𝙏𝙚 𝙘𝙝𝙤r𝙚𝙤 𝙚𝙡 𝙘𝙤𝙧𝙖𝙯ó𝙣 -𝙉𝙤𝙧𝙚𝙣𝙢𝙞𝙣 𝙘𝙝𝙞𝙡𝙚𝙣𝙞𝙨

6.- viernes

Viernes 16.

HOY ERA EL DÍA.

HOY ERA EL CARRETE.

Desperté terrible emocionao.

Me bañe, me cambie de ropa, desayune, saludé a mis viejos y me fui al paradero, llegué al liceo y subí hasta mi sala terrible flash.

–ADIVINEN QUIEN DEBUTA HOY!– grité corriendo donde estaban los cabros.

–Aonde, vo debutaste hace rato ya– dijo Mark.

–Ya pero ahora debuto en un trío po.

–Uy, verdad que hoy es el carrete– dijo Yuta.

–Esperé caleta por este momento chiques.

–Amigo, ojalá la pasemos bacan hoy.

–Obvio que la vamos a pasar bien po, uno mismo pone el ambiente po.

–Oe Jeno ¿Puedo hablar contigo en privado?– me pidió Mark, me asusté un poco.

–Obvió amigo.– nos alejamos de los cabros y me llevó afuera de la sala.

–Amigo, pensé mucho esto y nose que hacer ¿Tu creí que sea buena idea comerme con el Yuta en el carrete?

–Obvio po weon, como no te lo vai a comer, es tu momento, los carretes son los mejores lugares pa comerse.

–Esque me da miedo, imagínate me dice que no y se vuelve incómodo todo.

–No po mi rey, no tengai miedo.

–Esque...– agachó la mirada– Me gustaría ser como tu, no teni miedo y jamas te rechazan, siempre haces todo lo bacan y nunca quedai mal parao y si quedai mal te da lo mismo, pero nose si yo pueda po.

–Mark, mirame– Alzó su vista– Vo Mark, eri el weon más chistoso, buena onda, buen compañero, buena persona que conozco, tu risa hermano es iconic, tus ojos son terriblemente lindos, besai rico y estoy seguro que debí culear también rico, eres lindo tanto por fuera y por dentro, lo único que teni mal es que eri inseguro cuando eri el meo mino, teni todo lo que a alguien le gustaría, asique teni que ser seguro de ti mismo ¿Sabi que me digo a mi mismo por si me llegan a rechazar? Me digo que esa persona se lo pierde, porque yo se que estoy rico, que soy lindo y soy terrible buena onda, si esa persona no lo quiere ver, mala cuea no ma, asique si Yuta no ve eso, es problema de el, pero tu Markitos, eri todo lo que está bien en este mundo ¿Ya?

–Gracias wons– me abrazó.

–Na que gracias, te dije lo que no puedes ver no más, asique tu dale con todo mi rey, que te va a hacer caso y si no lo hace le pego y lo hecho de mi casa.– se puso a reír.

–Ya, me parece.

–Hola, Jeno – escuché a mi lado derecho.

–Uy, los angelitos están cayendo del cielo?

–Aprovecha el angelito por ahora, porque desde las 8 de ángel voy a tener la cara no más– Renjun besó mi mejilla y siguió caminando hasta llegar a su sala.

–Mish– dijo el Mark.– Hoy si o si coronai.

–Y no solo yo, tu también.– le pegué en el hombro.

–Fe no ma.

Ambos entramos a la sala otra vez.

–¿Que paso y porque me excluyen?– se quejó Haechan.

–Cosas de hombres, oe después de las clases quieren ir a mi casa?

–Ya, me parece– dijo Yuta.

–Yo igual.