My safe haven, 𝗟𝘂𝗸𝗮𝘀 𝗨𝗿𝗸𝗶𝗷𝗼. [editando]

Capítulo 2

Me desperté y ví que me encontraba en la sala con Lukas al lado, Fede estaba con los pies arriba del estómago de parce, Carlitos estaba casi en el suelo, Max al lado de Carlitos con la cabeza fuera de la sofá, Ian al lado de Alan quién se estaba tirando un pedo.

Me moví un poco y noté que Lukas tenía su mano en mi cintura. Me quedé viendo un punto fijo, minutos después volví a quedarme dormida.

—¡Lukas... Lukas! — Escuche decir a Fede. Mis ojos se abrieron lentamente, Lukas también se despertó.

—¿Qué sucede, Fede? — Pregunta Lukas.

—La entrevista, Lukas — Dice Fede cruzando los brazos —.¿Qué haces con tu mano en la cintura de mi hermana? — Pregunta Fede con una cara de que nos va a molestar con eso toda nuestra vida y a la vez con cara de que quiere matar a Lukas.

Lukas quitó su mano de mi cintura, nervioso. Yo solo permanecía callada.

—Voy a ir a casa para vestirme rápidamente y nos vemos en la entrevista, ¿okey? — Dice Lukas ignorando la pregunta de Fede.

—Bueno, pero apúrate, boludo.— Dice Fede.

Lukas se va de la casa y yo me quedó con Fede y los demás, quiénes dormían cómo si no hubieran dormido hace 4 años.

Se me ocurrió una idea y sonreí traviesa.

—No me fío de esa sonrisa. ¿Qué planeas? — Dice Fede mirándome con desconfianza.

—¿Y sí les hacemos una broma? Podemos despertarlos mojándolos o chocando dos sartenes cerca de sus oídos.

Fede se ríe.

—Bueno, mirá, voy a buscar la pistola de agua y le tiramos agua, ¿Sí? — Propone Fede.

—¡Sí! — Digo, emocionada.

[...]

Fede había traído dos pistolas de agua para hecharles a los chicos.

—Uno, dos... — Empieza a contar Fede.

—... Y, tres. — Terminé yo.

Y a la misma vez les hechamos agua a los chicos para despertalos.

—¡Qué hijos de puta! — Se queja Alan.

—¡No! ¡Estába durmiendo! — Se queja Alex pasándose la mano por la cara para quitar un poco del agua.

—¡Qué hijos de su pinche madre! — Se queja Max.

—¡No, boludo, uno acá no puede dormir a gusto! — Se quejaba el tío Ian.

—¡Lo siento, tío Ian, la idea fue de Fede! — Me hice la víctima —. Yo acá soy inocente.

—¡Qué boluda que sos! — Dice Fede tirandome agua al pelo.

[...]

Cómo hoy teníamos una entrevista, pues, tenía que ir.

Fuí a bañarme y vestirme rápidamente. Me puse lo primero que encontré, un Jersey y unos vaqueros.

Después de eso rápidamente fuí al baño a cepillarme los dientes y peinarme.

Me dejé el cabello suelto y empecé a ponerme un rímel y me puse un gloss. La verdad no me puse tanta cosa en la cara, de todas formas ya era horrible, ¿Para que empeorar?

Salí del baño y fuí a la habitación de Fede quién se estaba terminando de arreglar.

—¿Aún no estás listo, Fede pupas? — Dije poniendo mala cara mientras me sentaba en su cama.