I just want to be your girl tonight (Jenlisa+18)

𝚕𝚘 𝚝𝚎𝚗𝚐𝚘 𝚊 𝚖𝚒 𝚏𝚊𝚟𝚘𝚛.

Lisa.

Salí rápidamente de mi oficina, en busca de Emma, pero cuando llegue no estaba, se me olvido por completo que la había dejado en un hotel hace media hora, pero en las bancas vi a Jisoo quedándose dormida.

Me acerque a ella, para preguntarle que hacia ahí tan temprano.

-Hola señorita Jisoo, ¿Que está haciendo aquí tan temprano?- tomé asiento al lado de ella, para saber si necesitaba algo.

-Hola, muy buenos días señorita Manobal, disculpe las fachas, pero no eh dormido toda la noche esperando algo sobre Jennie, no me dejaron visitarla aún, dicen que solo puede entrar su abogada por el momento.

-Oh entiendo, ¿Quisiera entrar conmigo entonces? -Le di una media sonrisa a Jisoo.

-¿De verdad?- Se levanto de un brinco y se puso bastante feliz.

-Claro, el protocolo indica que puedo llevar a un familiar, siempre y cuando yo esté con ustedes. -Me levante para ver si a Jisoo le parecía el método que tenemos.

-Si, si, quisiera ver como está en estos instantes. -Su sonrisa mostró sus dientes tan brillantes de la emoción, se nota que si quería a su amiga.

-Bueno, ¿vamos entonces? - le extendí mi mano y ella la tomo con mucho respeto.

Caminamos hasta la oficina de Alan, quien es el que otorga los permisos de entrada a la cárcel. 

-Manobal, tiempo sin verte por estos rumbos.- Estrecho mi mano con dulzura.

-Alan, tienes razón pareciera que no trabajamos en el mismo lugar- Me ofreció asiento para seguir charlando. 

-Gracias por la amabilidad, pero en este momento estoy bastante ocupada con mi nuevo caso, otro día será.  

-Oh, entiendo, ¿Vienes a visitar a tu cliente entonces?

-Exacto, su nombre es Jennie Kim.- Tecleo algunas letras en el computador e imprimió dos hojas. 

-¿Ella también pasara contigo?- Miro a Jisso de pies a cabeza.

-Si, entrara conmigo. 

-Bueno toma.- Me entrego las dos  papeletas, pulso un botón y las puertas se abrieron de par en par. 

-Gracias Alan, a la próxima no mires de más. -Esto ultimo lo dije para que se avergonzara y no volviese a ver a nadie asi como miro a Jisoo. 

Al cruzar la puerta, un agente tomo los papeles y otra nos revisó lo que llevavamos, nos pidieron que dejáramos nuestros teléfono.

Slo teníamos 25 minutos para nuestra visita, la habitación donde se encontraba Jennie era de las ultimas, por lo tanto, teníamos que pasar todas las habitaciones donde se encontraban verdaderos criminales.

-Señorita Jisoo no tenga miedo, ellos no pueden hacernos nada.- Estaba sujetando mi brazo con tanta fuerza, que sentía que me lo arrancaría en cualquier momento.

-Esta algo oscuro.- Su voz era mas aguda, como asustada.  

-Hey hermosuras vengan acá.

-Reinas. 

-Guapas. 

Como esos "piropos" nos dieron unos cuatro mil más. Bastante incomodo, pero es una triste realidad. Llegamos a la cárcel donde estaba Jennie y wow, que hermosa se veía durmiendo, no perdía el glamour, tenía mi chamarra tapando su torso y estaba echa bolita. 

-Jennie, Jennie.- Empezó a gritarle Jisoo, tratando de llamar su atención.

Jennie comenzó abrir y frotar sus ojos, se sentó y estiró un poco, preferí que no me viese, así que me coloqué frente a la habitación que estaba al lado.