El Heredero de la Oscuridad

hard to love

Desperté con una jaqueca horrible, la cama estaba extrañamente más suave de lo que recordaba y las almohadas parecían plumas suaves.

Abrí los ojos, mi entorno era distinto. Cama grande, cobertores de seda y plumas, mosquitero en la cama, ventanal grande, cortinas rojas que estaban apenas abiertas para dejar entrar la mínima luz a la habitación, mesas de noche, lámparas caras, alfombra en todo el cuarto, más adelante estaba un tocador grande pero vacío, una mesa pequeña junto a un sillón que parecía reclinable, mucho espacio y tres puertas.

Esto definitivamente no era la casa de Vince Rowell.

Alguien entró por la puerta.

- Estas despierto
Su voz era tan familiar.

Cuando se acercó más pude ver su rostro, era Ethan pero ligeramente más maduro.
No quise precipitarme a nada así que espere a que hablara más y me diera quizá más información.

- probablemente te preguntes que ocurre, soy Kal el hermano gemelo de Ethan solo que sucedieron muchas cosas el día que mataron a mis padres o al menos eso supongo ya que no hay rastro de ellos.

- ¿Dónde estamos?

- No pareces alterado, me impresiona. Uhmm en una línea temporal distinta, aprendí a como ir y venir de mi línea temporal original a la secundaria.

Asentí con la cabeza.

- ¿Por qué estoy aquí? ¿Es un tipo de secuestro?

- todo lo contrario, me llamaste.

Señaló el tatuaje que me había hecho el sujeto que vino al castillo esa vez.

- No recuerdo haberlo hecho.

- porque lo hiciste subconscientemente.

- ¿Por qué siento que sabes más cosas que yo?

- porque estas en lo correcto, he estado investigando por días aquí, meses en nuestra línea original.

- ¿cuanto llevo aquí?

- quince días inconsciente.

- ¿y allá?

- uhmm como 3 meses supongo.

- el tiempo aquí es muy lento.

- en realidad es muy versátil, puede que sean tres meses o quizás uno es difícil saber del tiempo entre mundos.

-¿Qué esperas de mi?

- nada. Solo quiero protegerte.

- ¿Por qué?

- Porque te amo.

- No me conoces.

- quizás a este tu no, pero si a los tu de siglos pasados y sé que como en vidas pasadas te amaré en futuras.

Di una risa burlona.

- este yo no te conviene, no estoy hecho para eso además de toda la caja de Pandora que soy y es mi vida.

- creo todo lo contrario.

Me puse de pie y camine hasta quedar a milímetros de él.

- Te haré sentir como en el cielo, seré todo lo que necesites hasta que te haga enloquecer pero créeme trato de advertirte para ahorrarte el dolor porque de alguna manera la cago, así soy, difícil de amar y no te prometo dar mucho.

Kal me tomo suavemente de la barbilla atrayendome a él, por un momento sentí que me besaría pero en su lugar cambió de movimiento y susurró a mi oído.