Katsuo ||BKTD||

|07| ¿Parto?

Maratón 2/2

[...🦋💗✨...]

La mesa del metal estaba fría después de todos las revisiones que le hizo el doctor ilegal, que la liga conoce.

—No estoy listo para sacar al bebé.

—Tienes que sacarlo ahora —dijo con voz amenazante Tomura.

—No tengo la anestesia, es un doncel el bebé saldría por cesaría para eso hay un protocolo no estoy listo para hacerlo no tengo nada. Tengo que hacerle una incisión abdominal y uterina, tengo que cortar siete capaz el no sería capaz de aguantar tal dolor. 

—Si puedo, si puedo—empece a repetir mientras mi voz se quebraba —Por favor, por favor saque a mi bebé bien —agarre la mano de Tomura y lo mire suplicante —Yo puedo, por favor.

—Traigan algo para que muerda, el renacuajo sale ahora —me miró —Eres fuerte así que mantente vivo.

Le sonreí.

A los pocos minutos tenia un suéter entre mis dientes mientras sentía como el doctor me preparaba para empezar la incisión.

Cuando sentí la cuchilla entrar en contacto con mi piel solté a gritar, haciendo caer el suéter que estaba entre mis dientes, Dabi agarraba con fuerza mis manos mientras Tomura no se movía de mi lado.

Himiko y Jin estaban arriba de otra mesas diciendo palabras que apenas registraba.

—A la bim, a la bom, a la bim bom ban Shoto Shoto ra ra ra!!! —empezaron a gritar por encima de mis gritos.

Kurogiri estaba de asistente del doctor pasando lo que este necesitara.

Shuichi prefería mantener su distancia.

Atsuhiro estaba a lado del monitor que mostraba mis signos comprobando que todo estuviera bien.

La incisión fue en el abdomen justo por encima del área púbica.

—Llegó el momento de extraer al bebé, díganle algo distráiganlo del dolor.

Todos se quedaron callados.

—Soy Touya nunca morí en sekoto he querido decírtelo todos estos meses pero no había visto la oportunidad –hablo rápidamente haciendo que apenas registrará lo dicho.

—Que mejor oportunidad que cuando le están asiendo una incisión de quince centímetros —hablo Atsuhiro.

El monitor estaba apunto de explotar.

—Era que lo distraerás, no que lo matarás idiota —le grito el doctor a Dabi.

No, no era mentira.

Busque a Dabi con la mirada cruzando mirada con esos ojos azules.

—Te voy a matar —le grite, como se atrevía a mentir con algo así.

—Mejor hablamos esto cuando estés mejor hermanito.

Lo mire de manera fulminante.