On The Horizon ʚɞ (Traducción)

Agosto

⚠️ Algunas escenas en el hospital. Nada gráfico, salvo una mención de un accidente grave entre varios coches. Menciones de vómitos. Gran parte de Harry no sabe si se odia a sí mismo o no. Se habla mucho del impacto del COVID en el panorama médico.⚠️

Domingo 28 al miércoles 31 de 2022

Harry no llega a Manchester hasta las nueve y media de la mañana del domingo, apenas más de 24 horas desde que desembarcó del Horizon.

Bueno, eso no es cierto. Es muy temprano en la costa este de Estados Unidos, por lo que en realidad han pasado más de 20 horas desde que abandonó el barco, pero está tan agotado que bien podría no haber dormido en tres días. No se arrepiente, aunque le resultó más difícil recordar cómo funciona el sistema de trenes y mirar su teléfono para pedir un Uber. Los colores y las formas han comenzado a mezclarse. Debido a la falta de sueño, con frecuencia olvida sus pensamientos a mitad de camino.

Para cuando su vehículo se detiene frente a él durante los últimos quince minutos de viaje, Harry está realmente muerto de pie. Tropieza con la parte trasera, le hace un gesto de reconocimiento al conductor y sostiene la cabeza entre las palmas de las manos durante todo el viaje, entrando y saliendo de la conciencia. Se necesita mucho esfuerzo para obligar a sus piernas de gelatina a salir del auto y cargar su equipaje los dos pisos hasta su departamento. Además, una vez que lo haya logrado, se quedará atrapado tratando de descubrir dónde dejó sus llaves cuando se fue hace más de dos semanas. Un tiempo vergonzosamente largo después, Harry casi se desmaya cuando encuentra sus llaves en lo que posiblemente sea el lugar más obvio donde podría haberlas dejado: el bolsillo delantero de su equipaje de mano.

Suspirando, abre la puerta y se encuentra con una visión familiar pero fría. Su apartamento es mucho más grande que el camarote de un crucero, pero ¿a dónde se ha ido todo ese color? Las paredes están vacías, los muebles son básicos, los electrodomésticos son blancos, la decoración es inexistente y, Dios mío, de verdad, ¿el ambiente siempre ha sido tan estéril? ¿Se había traído sin darse cuenta el hospital del trabajo a casa?

Tiene la necesidad de decorar con delfines.

Por muy aburrido que sea, ha estado lejos de ser ordenado. Hay un montón de papeles al azar en su mesa del comedor. Su cama no está hecha. La comida en mal estado que se quedó en el refrigerador y apestó el lugar. Cajas junto a la puerta, vacías, en las que habían enviado su nuevo equipaje —es posible que haya esperado hasta el último minuto para comprarlas—. Harry mira sus maletas, llenas hasta el borde de ropa sucia y recuerdos, y de repente se siente abrumado por todo el trabajo que hay que hacer. Entonces, hace lo que haría cualquier persona en su sano juicio con dos días libres y sin dormir lo suficiente.

Él limpia. Excesivamente. Agresivamente.

Con fuego ardiendo en sus ojos, Harry abre su equipaje y mete tanta ropa sucia en la lavadora como sea posible. Corre hacia la mesa, organiza los papeles y los empuja hacia donde deben ir, principalmente el reciclaje. Tira la mayor parte de lo que hay en el refrigerador y anota los alimentos que necesita en una hoja de papel contra la puerta del refrigerador. Deconstruye las cajas, saca la basura y el reciclaje inmediatamente y luego regresa y rocía todo con una neblina de aromatizante para hacerlo menos abrumador.

La maldita niebla se llama 'Ocean Breeze' porque, por supuesto, lo es.

La alarma de lavado suena, por lo que se apresura a transferir la carga a la secadora antes de empezar una nueva porque lo necesita. Mientras está de humor, decide que todas las superficies necesitan un lavado. Eso se suma a la lista de tareas pendientes, además de desempolvar todo lo que se le ocurre. Cuando llega al final de sus tareas, plumero en mano, ha llegado a la foto enmarcada de él, Anne, Gemma y Robin que cuelga cerca del balcón.