Capítulo 6

106 22 8
                                    

JOSEPHINE

Jamás creí que Tom me terminaría quitando lo que había demorado horas en elegir para utilizar, sin embargo, no me escucharían quejarme. Esa noche, nadamos en el cuerpo del otro. Me hizo suya y lo hice mío. Descubrí en Tom lo que jamás creí que encontraría. Todo era hermoso. 

Hasta que el sol iluminó la habitación. 


Fue mi culpa, en realidad. 

Fue mi culpa, porque por querer fingir que había despertado completamente radiante. Comencé a buscar la forma de irme al baño sin despertar a Tom. Cuando lo hice, no encontré el baño. Entonces, terminé abriendo un par de puertas. No sé que esperaba encontrarme. Si me hubiera encontrado con el cuarto rojo de Christian Gray creo que me hubiera impactado menos. Porque al pasar de una habitación a otra, di con la sala. En la que unas hermosas fotos de Tom y la chica con la que ya no tenía nada se encontraban sobre diferentes muebles. 

En realidad, creí que había sido un accidente. Mi primer pensamiento fue "okay, se olvidó de quitar esta foto." Pero no podía justificar las otras dos sobre la repisa de libros, o la otra que tenía sobre un mueble, junto a las gafas de leer. No podía justificar que tuviera fotos con la rubia. 

No podía tomar ninguna, tenía una sábana que me cubría y yo debía sostener. Pero definitivamente se trataba de ella. Ella, con sus labios rojos, besándolo en la mejilla. Fotos polaroid de ellos bailando, de ellos en la playa. Fotografías de ella sobre sus piernas y sus frentes unidas. No quería ver más, y lo seguía haciendo. 

Me estaba matando. 

─¿Jo? ─ la voz del chico hace acto de presencia, y siento sus pasos acercarse. Ahí estoy, desnuda debajo de una sábana celeste, en medio de una habitación repleta de fotos de otra chica. Veo como su rostro palidece, y entonces lo comprendo todo. 

─Hijo de puta ─ susurro mientras cierro los ojos. ─ Volviste con ella, ¿cierto?

─No-

─Te dije que si me mentías... ─ se me corta la frase a media línea. ─ Te lo dije ─ hablo. 

─Jo, no es lo que crees. En serio. ─ intenta con todas sus fuerzas hablar, decir algo, pero no puede. Primero, porque no tiene demasiada defensa, y segundo, porque está semi-dormido. 

─¿Ah no? ¿Y cómo es entonces? ─ pregunto, aunque cuando abre la boca, no le permito continuar ─ Olvídalo, no te creo absolutamente nada. 

─Josephine, en serio. No... no es lo que crees. 

─Ya no creo nada. Ya no te creo nada. 

─Déjame explicarte ─ dice en lo que paso por su lado. 

─¡Déjame ir! 

─¡No! Te quiero, Josephine. Ésto no es lo que crees, esto... es un favor, a Nils. Ella-

─Ella es tu futura esposa. ─ digo. Recuerdo su anillo en su dedo. 

─No me casaré con ella. 

─Haz lo que quieras. Ésto fue definitivamente un error. 

─¿Un error? ¿Así nos ves? ─ me pregunta. ─ No, Jo. 

─Esto es un error, Thomas. Tendríamos que haber parado cuando notamos que estaba sucediendo... fue mi culpa.

─Por favor, Josephine. No hagas ésto, no significa nada para mí-

─Pues que mal por ella, porque... no merece que tú le pagues así.

No permitiría que me dijera nada más. Podía intentar explicarme, podía intentar decir que estaba todo bien, que en realidad no estaban juntos, pero no le creería nada. Si él me decía "buenos días" yo miraría por la ventana para verificar que sí fuera de día. Había traicionado mi confianza, y habíamos iniciado algo en base a mentiras. 

─Permiso ─ digo mientras sigo recolectando mi ropa. 

─Sus padres la ignoran, porque rompió conmigo. ─ suelta.

─Si, seguro. Seguramente se siente terrible, seguramente necesitaba que tú vuelvas a empapelar la casa con su foto. Ésto la hará sentir mejor. 

─Diremos que estamos juntos, solamente para ayudarla. 

─Me estás jodiendo. ─ cada cosa que dice es más absurda que la anterior. Cada cosa que dice hace que me enfade más con él. 

─¡No! Es solo un favor ─ me promete, nuevamente. ─ Por favor, no te vayas ─ me dice, y luego me toma de la mano. 

─Eres un imbécil si crees que me quedaré. Thomas... ¿acaso escuchas lo que me pides?

─Te pido que me quieras. 

─No. ─ lo corto ─ Yo te quiero. ─ Confieso. Lo hago. Mierda que lo quiero. Me gustaría no sentirme como me siento por descubrir lo que he descubierto, pero no puedo. Me siento terríblemente mal. Me siento traicionada y siento que lo último que necesitaba en mi vida era ésto. ─ En cambio tú, me pides que me quede en lo que finges tener una realción con otra persona. Quien casualmente, es tu ex-prometida. Por la que hace dos semanas estabas lloriqueando en una fiesta. ¡Carajo me besaste porque ella estaba ahí y sabías que te vería! Thomas... no quería ésto. Te dije que no quería ésto y vienes y lo haces. Eres de lo peor. 

─Por favor, perdóname. 

─No puedo perdonarte por mentirme de ésta manera. Te dije que detestaba la mentira, te lo conté, lo sabías perfectamente. ¿Cómo me pides que te perdone cuando lo único que has hecho ha sido mentirme? Ésta no es una buena forma de empezar, ¿no crees? 

─Te prometo que lo solucionaré. 

─No me prometas nada. Quédate con Nils, sean felices, o no. Pero... no me metas en medio. ─  digo en lo que tomo mi teléfono de la mesa de luz de Tom. 

Si dice algo más, no lo escucho, porque abandono su casa. 

Y ya no vuelvo a verlo. 

Sin embargo, él se mantiene en mi vida de una forma que jamás creí que lo haría. 

Midnight Rain │Tom HiddlestonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora