Cartas sin dirección

Carta 6

jen.

Domingo como todos los domingo, es día de  pereza y ocio por lo que sigo en mi cama, son las 10:30.  cuando un ruido viene de la planta de abajo, que fue eso voy bajo medio dormida, cuando me acerco  escuchando los  gritos de mi madre y sollozos de ali, por lo cual me apresuro.

-¡Recoge eso rapido, es que acaso no puede ser más torpe!, ¡no piensas cuánto costó eso! veo a mi madre gritando a ali mientras ella solloza.

-¿Que esta pasando aqui?,.- dijo yendo hacia dónde está ali y trato de consolarla.

- Es que acaso eres ciega, la torpe de tu hermana rompió el vaso de cristal, recoge eso con las manos.-

- estas loca ella no hará eso.-

veo que mi hermanita se agacha y lo hace al recoger uno de los cristales afilados hasta  que se corta dejando pequeñas gotas de sangre mientras solloza.

- ¡Callate que me irritas, para de llorar o te daré un motivo para eso!.- veo como va con toda su furia hacia ella.

- ¡Ni se te ocurra ponerle un dedo encima o no respondo de mi! grito interponiendome y ganándome una cachetada

-¿quien te crees,se te olvida quien soy?, tu madre entonces me debes respeto.-

- lo se madre,pero ali solo cometió un error y mirala la tienes aterrorizada, entiende fue un accidente.- digo sobándome la mejilla.

- como sea yo me largo y cuando regrese no quiero ver a ninguna de las dos, ni a este desastre.dice mientras se va

cuando escuchamos el azote de la puerta, me volteo y abrazo a ali mientras esta sigue llorando.

- me da miedo mamá, por favor llama a papi y dile que regrese.- dice ali mientras la consuelo.

-Quisiera ali,pero recuerda que esta trabajando.- le digo mientras le sobo el cabello.- pero tranquila no estará aquí por siempre, hoy saldremos la familia hoffman nos invito a comer.

- esta bien me ire a cambiar me dice mientras se seca las lágrimas con la pijama.-

.-ven te pondré una bandita para tu dedo.-

la hago sentarse en la encimera, mientras yo busco una bandita en el botiquín, se que estan aqui y la encuentro se la pongo y veo que no tiene ningun vidrio enterrado solo fue un rasguño.

-listo ahora ve y cambiate yo arreglare este desastre.- le digo mientras se va.

voy limpiando  y veo el vaso solo es un vaso común, recojo los vidrios grandes con cuidado y barro los pequeños y me deshago de ellos como me enseñaron. no entiendo el enojo de mi madre solo fue un accidente. cuando por fin ali está lista y yo igual, nos vamos a la casa de los hoffman.

-Bienvenidas, mis niñas pasen.- dice milena con alegría.- que grande estas ali.

mi hermanita sonríe y la abraza, ella es casi una abuela para nosotras.

- Hola mile-digo dándole un abrazo y ella me lo responde.- es un gusto verte.

después de un rato aparece madisson muy feliz ya que sus padres regresan hoy, ella aparece utilizando un vestido lila.

- lo siento no sabia que tocaba venir de traje digo con pena al mirar mi ropa poco entonada.

- No te preocupes sabes que mis cosas son las tuyas, ven vamos a cambiarnos.- me dice jalandome de la mano hacia su habitación.-

mientras me pruebo el vestido azul marino que ella me da me cuenta de la cita que tuvo con un chico de nuestra escuela, que al final no terminó muy bien y ella se quedo en casa de tomás y este la consolo.