Capitulo 9

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Ray miraba como Emma intentaba prender su moto, más de una vez, ya se veía agotada. Ya había pasado un mes desde que escaparon y se dirigieron a la casa que pertenecia al amigo Emma

—Emma...—la mujer lo vio con enfado —No es nada —Aparto su vista en el instante, no sabía que pasaba exactamente, desde que se había levantado Emma estaba enojada por todo lo que se ponía en su camino.

—¿Por qué... No andas? — se pregunto la chica al intentar ver para solucionar la moto, está soltó un suspiro largo y se bajó del vehículo siendo así que entrara a la casa, y solo saliera a los minutos con una mochila

—¿Dónde vas?— cuestión confundido el azabache quien la siguió con la vista

Emma lo vio de reojo —Si quieres sigueme, sino no preguntes. —Respondio con enojo, aquella mujer no iba a ser de mucho pedir o explicar más como la había tratado día anteriores como si ella fuera un objeto o algo 

La caminata fue en silencio, Ray mantenía su distancia ante ella, no lo entendía, ella por extraña razón había cambiado de carácter y no dudaba que fuera una trampa por aquella chica, iba a seguir dudando.

Emma miraba la vidrieras de las tiendas que cruzaban mientras que caminaba hasta que se encontró con unos pendientes y un collar delicados, conteniendo una flor roja en el medio, y el collar de un fino color dorado 

—¿Te gusta?— los ojos amatistas la vieron negar  

Emma lo miro de reojo y solo suspiro —Solo me hizo recordar algo. —aseguro al volver su vista hacia adelante y comenzar a caminar dejando a pocos pasos al chico 

La compra del fue rápida, Emma miraba a aquel chico como elegía y cada fruta, al igual que diferentes verduras. El lugar era enorme para poder perderse hasta que ambos se separaron, Emma iba a buscar una botella de leche, mientras que el azabache iba a ir a otra zona para buscar algunas cosas más que faltaba en la casa. 

Emma al ya terminar con sus cosas, se dirigió a la caja esperando a encontrarse al azabache, pero se sorprendió al ver cómo este se encontraba hablando con una chica de cabello oscuro largo, viéndose muy cercanos juntos. Ella solo sonrió de lado y se acercó al carrito dejando las dos botellas de leche dentro.

—¿Ya acabaste Ray?— cuestionó al verlo con una ceja levantada, pero el rostro de este suplicaba por ayuda 

—Oye...—aquella azabache llamo la atención de Emma —¿Quieres no molestar?

Solo faltaba que la rebaje con su mirada para que Emma se enfurezca y no tardó en hacerlo, aquella mujer solo buscaba algo de más de una noche y dudaba si lo obtendría con Ray.

—¿En qué estábamos?— cuestionó la chica al verlo de nuevo

—Yo...

Emma tan solo suspiro y se acercó a ella tomándola del hombro —En serio ya vete, y deja en paz a mi novio —Sus ojos ya eran de enojo y dudaba que aquella chica haga algo encontrá de ella —Buscate a otra persona —Estaba enojada, no por aquella chica que coqueteaba con Ray, sino que se había metido con sus compras, estaba claro no estaban las cosas que ella había puesto 

Aquella mujer solo suspiro —Bien. Me iré, llámame... —hablo al mirarlo a Ray e irse chocando a Emma sin decirle algo 

—¿Contento? Ya no me debes nada. —aseguro al comenzar a caminar hacia la caja para pagar todas las compras 

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Ojos Que Guardan SecretosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora