Todo se volvió un caos.
Por culpa de las emociones no había visto que Bob, Kim, William y Kevin habían llegado corriendo hasta donde estábamos y habían presenciado la muerte de Isabella.
—¡Una ambulancia! —había gritado uno de ellos.
Rápidamente se acercaron para tomar el cuerpo de Edward que estaba a punto de derrumbarse. Bob le sujetó, le tumbó boca arriba y le examinó la herida.
—Se está desangrando. Tenemos que hacerle una transfusión —sentenció.
—¿¡Aquí!? ¿Estáis locos? —chilló Kevin, observando como la sangre que caía se mezclaba con la suciedad del suelo.
—La ambulancia no llegará a tiempo —aseguró Kim—. ¡Trae las agujas del coche! —le gritó a William.
Dada la frecuencia de los accidentes relacionados con sangre que sufríamos Edward y yo en el transcurso de nuestras actividades delictivas, siempre equipábamos alguno de nuestros coches con un botiquín de agujas y vendajes. William salió corriendo a cumplir con lo que le habían ordenado.
—¡Escuchad! —gritó Kevin— Si es cierto que la ambulancia no llega a tiempo, la persona donante morirá durante la transfusión.
—¿Qué tipo de sangre es? —me preguntó Bob, ignorando las palabras de su compañero.
Recordé cuando Edward me lo dijo.
Un día, que sin nada en lo que pensar nos permitimos hablar de cosas grotescas, cosas que solo se pueden hablar en la complicidad del secreto y la confianza del amor.
—Es A negativo —respondí yo, presa de la confusión.
Vi cómo su rostro se contrajo en una expresión de angustia.
—Los únicos compatibles con A negativo son otros A negativo o..., los O negativo —me explicó.
En esos momentos, regresaba William cargando en sus brazos un manojo de tubos y agujas envasadas.
—¿¡QUIÉN ES O NEGATIVO O A NEGATIVO!? —chilló Kim, echando a correr para dirigirse a toda prisa hacia el final del pasillo, que daba a aquel espacio rectangular de barandillas. Según supe después, algunos de los criminales, atraídos por la curiosidad, habían vuelto a adentrarse en el lugar— ¿¡QUIÉN ES O NEGATIVO O A NEGATIVO!? —repitió, golpeando la barandilla oxidada con su puño cerrado.
Nadie respondió.
—Yo soy O negativo —dije.
—Señor...—respondieron Bob y Kevin al unísono.
Sabía exactamente lo que tenía que hacer. Bob no rechistó; sacó de su envase un tubo que tenía incorporado en cada extremo una fina aguja y clavó una de ellas en el antebrazo de Edward. Me quité la americana y traté de desabotonar la manga derecha de mi camisa, pero la urgencia del momento hizo que la desgarrara. Nada importaba ahora, solo él, solo Edward.
Bob me tendió el otro extremo del tubo. Me incliné, agarré la aguja quirúrgica y la acerqué a mi antebrazo. Nuestros guardaespaldas se alejaron, permitiendo que tuviéramos un momento de intimidad y despedida. Todos eran conscientes de que yo iba a morir por lo que estaba a punto de hacer.
Justo cuando iba a clavar el frío metal en mi piel, la mano moribunda de Edward cayó sobre el dorso de mi mano armada.
—No lo hagas, por favor —me suplicó en un susurro. Yo no me atrevía a mirarle; seguía observando la aguja que se encontraba a pocos centímetros de mi piel—. Por favor, Oswald, por favor —seguía pidiendo, con los ojos llorosos.
Al fin, reuní el valor para enfrentarle y cruzar su mirada con la mía.
—Edward, ¿Recuerdas lo que te dije? —le pregunté, tratando en vano de mantener la voz serena.
Mis ojos se habían cruzado con la blancura mortecina de su tez y la oscuridad que comenzaba a llenar su mirada. Le perdía, y no había nada en este mundo que pudiera detenerme ya, pero quería que lo comprendiera, que no me odiara por lo que estaba a punto de suceder.
—Oswald, por favor...
—Te dije que te lo daría todo —contesté por él, consciente del poco tiempo con el que contábamos—. Me arrancaría la piel si con ello pudiera fabricar un abrigo que te protegiera del frío de la noche y recorrería el mundo con tal de encontrarte aunque para ello tuviera que atravesar montañas, mares o desiertos. Bajaría al mismísimo infierno y habitaría en él si con ello pudiera pasar mi eternidad a tu lado —hice una breve pausa para tomar aire y expulsarlo con un rápido suspiro—. Cada parte de mi ser, cada lágrima, cada gota de sudor y sangre te pertenecen Edward...
—Oswald...
—Sólo te doy —le interrumpí, al tiempo que hundía la aguja en mi vena—, lo que tuyo es.
Al momento, pude ver como la sangre fluía por el tubo de plástico que conectaba nuestros cuerpos y llegaba hasta su brazo para filtrarse por sus venas. Le vi revolverse, como tratando de zafarse de la aguja y evitar que lo salvara, pero le retuve, apretándole contra el suelo.
—No permitiré que mueras, Edward. Encuentro todos los motivos en tu mirada que necesito para hacer lo que estoy haciendo.
—No, no, no —siguió peleando Edward de forma desesperada, mientras yo comenzaba a notar la debilidad en mis músculos.
La vida se me escapaba en cada gota donada a mi amado y la aguja irritaba ya mi carne. Tomé las pocas fuerzas que aún mantenía y me incliné para rozar mi nariz con la suya.
—Edward, por favor, recuérdame pero no permitas que mi memoria apague esa luz en tus ojos —suspiré—. Esa luz que me brindaste desde el primer día y que ha sido la primera y única que ha alumbrado mi camino.
Escuché como Edward trataba de decir algo, pero el cansancio también comenzaba a acumularse en sus párpados y lo único que brotó de su garganta fueron palabras incoherentes.
—No me odies cuando despiertes —le pedí, consciente de que aún me escuchaba. Subí un poco la cabeza y besé su frente antes de entregarme en los brazos fríos de la oscuridad.
Mi corazón juró entregarle la sangre y la vida si era necesario, pues aunque era triste la despedida de la única persona que he amado y era grande el temor a que me odiara tras tomar esta dura decisión y haberle dejado solo en este mundo, no hay nada que deseara más que darle todas las posibilidades que en mis manos cupieran de vivir y gobernar el mundo.
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"Y si el mundo se cierne ante mí, diré que valió la pena pagar el precio de tu sonrisa"
Hola!!!
Unas disculpas por la tardanza de este nuevo capítulo, he estado trabajando en varias historias para subir contenido más a menudo aunque..., será un poco diferente😈
Hasta la proximaaa!!!!
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Hasta la última gota (Nygmobblepot)
FanficUn nuevo criminal lleva meses aterrorizando a la ciudad y asesinando a todos aquellos que se opongan a sus negocios. Montresor (como se hace llamar ésta nueva mente criminal), ha invitado a una reunión a algunos de los criminales más importantes de...