Después de que el pelinegro terminó de comer, todos se encontraban en el living.
— Bien, acabo de encontrar el camino más corto para llegar. Pero es imposible a pie.
— Es imposible ir en auto.
— Pues tendremos que hacerlo.
— Saldremos lo más rápido que podamos y tratar de avanzar en el al menos tres kilómetros, después deberemos caminar. Tenemos que evitar a toda costa encontrarnos con algún militar.
— ¿Tenemos que ir todos? — preguntó el rubio.
— No, seria inútil y no cabemos todos en un auto. Los niños deberán quedarse, puedo ir con Yoongi y Hoseok.
— Oh no, yo voy a ir — hablo el de lentes.
— Yo también quiero ir — dijo ahora el otro niño.
— Es imposible, corren peligro. Tú — señaló a Taehyung — debes quedarte a cuidar a Jungkook y ese par de por ahí. Todo saldrá bien y vendremos.
Al menor de lentes no le quedó de otra más que aceptar.
— Bien, Hoseok, Yoongi, debemos irnos.
— ¿De donde sacaremos un auto? — preguntó el pelinegro.
— ¿Haz visto la cochera de esta casa?. Que se te apetece, ¿un ferrari o un lamborghini?
— Estarás bromeando.
El adulto y los dos adolescentes se despidieron de los demás y se dirigieron a la cochera. Cuando Seokjin ingreso el código y la cortinilla se abrió, los ojos de Yoongi brillaron. No se consideraba fans de los autos, pero ver los diferentes modelos que había, quedo boca abierta.
— Bien, usaremos este, es el más discreto.
Seokjin señaló un bonito lamborghini urus en color negro.
— Andando, Yoongi. — el castaño lo tomo del brazo y comenzó a jalarlo.
— Que pena que este auto vaya a tener que pasar por una situación difícil y después será abandonado.
— Ya esta viejo, no es para tanto.
— Hoseok, ¿por que nunca mencionaste que eras muy rico?
— No lo encontré relevante, aparte tengo muy malas experiencias con eso.
Hace aproximadamente un año, a Hoseok le gustaba un chico, era muy lindo y respetuoso con él, pero todo se fue al carajos cuando se entero que solo estaba con el por su dinero. Por eso, cuando entró a la universidad, trato de hacer todo lo posible por no llamar la atención.
Yoongi y Hoseok se metieron en los asientos de atras, mientras Seokjin ponía las coordenadas.
— Pónganse muy bien los cinturones.
Yoongi se encargo de abrochar muy bien el cinturón de Hoseok y el suyo. Cuando Seokjin abrió el portón de la entrada principal aceleró lo más rápido que pudo.
Ante el repentino impulso, Yoongi sujeto la mano de Hoseok.
— Esto es tan divertido — grito el pelinegro.
Hoseok sonrío y solo se limito a verlo. Yoongi parecía un niño, se veía muy emocionado. Después de un par de cuadras unas cuantas personas comenzaron a salir, pero a la velocidad que iban era imposible que lograrán hacerles algo.
Después de unos minutos, el GPS marcó que estaba cerca del destino final.
— Vayan desabrochando sus cinturones. Cuando pare el auto no bajen enseguida, debemos asegurarnos que el área esté despejada.
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APOCALIPSIS DEL AMOR || YOONSEOK
RomantikEl mundo se enfrenta a un virus letal y todo parece estar arruinado. ¿Qué pasará cuando por cuestión del destino dos chicos totalmente diferentes y desconocidos terminen juntos y tengan que cuidarse mutuamente? ¿Qué pasara cuando Yoongi encuentre el...