† PSICOFONIAS . . .

CAPITULO II

Las imágenes me pertenecen prohibido su uso, reproducción o copia para otro fics, historia, etc. Los personajes no me pertenecen sólo los utilice para fines de la historia todos los derechos a su creadora. La historia si es de mi propiedad, no se permite utilizar para cualquier adaptación o historia.

"Nunca abras una puerta que no esté cerrada con llave . . ."

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Naraku Tanaka, empresario, arquitecto, ingeniero y dueño de una de las minas más ricas de África. Su vida se vio interrumpida por la intempestiva muerte de su hermana menor la cual, le dejó a cargo toda su fortuna . . . y una niña, su más grande tesoro. La jovencita fue puesta bajo su tutela a la edad de 8 años, nunca ingresó a la escuela pública ni privada, en todas ellas donde fue inscrita con el tiempo fue expulsada por fomentar la histeria colectiva, según ella, afirmaba ver y platicar con gente que no estaba ahí. Todo se le adjudicó a un severo caso de autismo, era antisocial no tenía amistades ni hablaba con nadie. Finalmente, poco después de un ataque a una de las niñas fué vista e hicieron más pruebas otros especialistas llegando a la conclusión y siendo diagnosticada con la enfermedad mental de la esquizofrenia, Según testigos, sufría de alucinaciones. Los médicos y psicólogos que la trataron terminaron por afirmar que la niña, si escuchaba voces . . . Los demonios en su cabeza según se afirmaba en el colegio, kagome jamás pensó que fueran malos, hasta el día de la aparición después de la muerte de su madre..

Naraku, no se complicó la vida y simplemente la mantuvo en su casa, con médicos, enfermeras y expertos en el cuidado de personas "especiales " como ella. Era muy inteligente, tenía un IQ DE 170, aprendió a pintar, además de tocar el piano, Leía todo lo que encontraba así que aprendió historia antigua y varios idiomas. Ella no estaba loca . . . simplemente la gente que la tuvo a cargo jamás se interesó verdaderamente en su caso. Kagome escuchaba . . . más nunca hablaba, no padecía esquizofrenia, era solo un alma solitaria a la que nadie puso verdadera atención, solo su madre, quien la escuchó y la entendió por el gran amor que le tenía. Ahora en su madurez a los 20 años, se encontraba encerrada en un mutismo y aparente indiferencia a todo cuanto la rodeaba, llevaba así ya más de 6 años. . . El tiempo coincidía con la última vez que fue visitada por un espectro. . . el espectro de su madre. Por aquel entonces, llevaba varios años de haber fallecido. . . kagome había dejado de ver las apariciones y escuchar voces después que su madre murió.

kagome tenía 14 cuando aquello apareció . . . quedó aterrada ante la figura descarnada y fantasmal que flotaba sobre su cama . . . y le cantaba . . . le cantaba su canción favorita acariciando su rostro con manos huesudas y frías. Los ojos de Kagome estaban desorbitados y llenos de miedo . . . Mirando aquella extraña aparición . . . Cómo las que veía en su niñez. . . aquella figura irreconocible vestida con la misma indumentaria con la que recordaba que había sido enterrada su madre. Esa noche de lluvia, el espectro le hablaba en un murmullo, como un eco . . .con palabras de cariño, en tanto ella encogida en una esquina de la cama, con mucho miedo, no podía apartar la vista de aquella oscura aparición.

« " No te escondas . . . llegará el día en que ojos de gato del color del oro. . . marcarán tu destinooooo! " »

Kagome, cerrando los ojos con fuerza para no seguir mirando aquello, alcanzó a sentir la mano fría en su coronilla . . . . Y el frío beso en su frente del espectro que alguna vez fue su madre . . . perdiendo la conciencia después de aquel momento traumático y por demás perturbador. Al día siguiente despertó, y no volvió a emitir sonido alguno, su mirada se perdió en la nada hasta el día en que la llevaron al castillo, la última adquisición y proyecto de su tío. . . La joya arquitectónica más antigua de Europa que aún seguía en pie . . . El antiguo Castillo Vladislao.