☀️ Aprendiendo a amar ♥️

Capítulo 4

"Los momentos de felicidad en nuestras vidas son fugaces"
Claudia
La desesperación se apodero de mí, lo único que quería en estos momentos era que Luciana aparezca. El camino de regreso a casa cada vez se me hacia mas largo, mi mente creaba muchos escenarios en los cuales Luciana aparecía.
Después de un largo recorrido llegamos a casa, pude ver que Sebastián estaba esperando en la entrada, me despedí de Anthony y me dirigí hacia la puerta.
- Entonces me vas a decir que es lo que está pasando - dijo Sebastián, en su rostro pude ver lo preocupado que estaba y algo de culpa.
- Deje a Luu, con un amigo de Anthony solo por unos minutos; mientras nosotros salimos de la fiesta porque queríamos pasar un momento a solas, pero no fue mucho tiempo lo juro, cuando regrese no encontré a Luciana por ningún lado y el amigo de Anthony dijo que su novio había ido a recogerle y que él no pudo hacer nada, y ahora no se nada de ella. Que se supone que haga si no la encontramos - dije mientras rompía en llanto.
- Se que la encontraremos, ella aparecerá - dijo, mientras me abrazaba.
Salimos en buscar a Luciana por los lugares más cercanos, regresamos a la fiesta y no encontramos ninguna pista de ella, los minutos que pasaban parecían una eternidad y eso era desesperante, porque el tiempo pasaba y no sabíamos nada de ella.
Después una cansada búsqueda regresamos a casa, ya era la una de la mañana y aun no sabíamos nada de ella me sentía devastada de no poder saber nada de ella y todo esto era mi culpa. Al entrar en la casa, me dirigí hacia los muebles quería descansar un poco en eso vi un rostro familiar.
-Lu... Lu... Luciana, estas bien, donde estabas - dije mientras corría hacia ella para poder abrazarla. Era ella después de tanto buscar por fin ella estaba acá, no podía creerlo.
Ella estaba inconsciente y se había quedado dormida en el mueble. Al verla ahí acostada sentí un gran alivio estaba tan contenta de que ella este acá y que no le haya pasado nada.
Con la ayuda de Sebastián la llevamos a su cuarto y la dejamos que descanse y nosotros fuimos hacer lo mismo.
Al día siguiente desperté un poco tarde y no era para más debido a que dormimos muy tarde. Después de despertar fui a ver a Luciana, ella aun estaba dormida y lo que hice fue tirarme encima de su cama para que se despertara.
-Déjame dormir - dijo ella mientras se cubría la cama.
- Luu despierta ya es tarde, tienes que contarme lo que paso ayer. Después de todo me debes una explicación, como es eso que tu novio fue a recogerte de la fiesta - dije mientras jalaba la sabana.
- Novio de que hablas - dijo ella mientras se levantaba, estaba despeinada y en su rostro se notó una expresión de sorpresa y confusión.
- Si, cuando regresé con Anthony, ya no estabas y Miguel dijo que tu novio había ido a recogerte y el no pudo hacer nada - dije mientras la miraba.
- No recuerdo nada, pero quien seria ya sabes que no tengo novio, de repente fue algún conocido, que me vio mal.
- Quizás esa persona te escribió, revisa tu celular - dije mientras esperaba que vea su celular.
- Mira este mensaje, reconoces el numer- dijo mientras me entregaba su celular.
Al ver su WhatsApp pude ver que había un numero desconocido que le había escrito: "Espero que te encuentres bien y verte nuevamente. Cuídate, no quiero que le pase nada a mi futura novia, te quiero. Atentamente: Tu admirador secreto."
No podía creer que una persona desconocida hubiera sacado a Luciana de la fiesta, me sentía mal; porque el tan solo echo de que a ella le hubiera pasado algo me atormentaba.
- Quien podría ser, no conozco a alguien que me admire tanto, como para hacer algo así - dijo ella mientras me miraba.
- Supongo que ahora solo quedan dos opciones buscar a esa persona o esperar que aparezca en tu vida, aunque creo que ahora solo quedaría esperar - dije mientras le devolvía su celular.
Al pasar unas semanas, Anthony me invito nuevamente a una fiesta la cual iba hacer en el mismo lugar donde nos llevó por primera vez, pero esta vez Luciana ya no me acompañaría. Al llegar a la fiesta pude ver que muchas personas estaban tomando, parecía tan similar a la vez pasada.
Anthony me llevo hacia donde estaban un grupo de chicos. Al llegar ahí pude ver que habían tres chicos y uno de ellos era Miguel, a los otros dos chicos no los había visto, también había dos chicas y una de ellas era Karina.
Al presentarme con ellos supe que se llamaban Angel, Robert y Diana.
Angel era un chico alto y delgado, con el cabello oscuro y los ojos verdes y se podía ver que tenia un rostro muy expresivo.
Por el contrario a Robert era alto y esbelto, con una figura atlética. Su cabello oscuro caía en mechones desordenados sobre su frente, y sus ojos grises eran penetrantes y fríos como el hielo.
Diana tenía el cabello castaño oscuro caía en ondas suaves alrededor de su rostro, y sus ojos marrones brillaban con una chispa de alegría. Su figura era delgada y llevaba puesto un vestido negro el cual le quedaba perfectamente. Ella era el centro de atención, tenía una sonrisa radiante en su rostro y era muy coqueta.
- Quieres una bebida - dijo Anthony, mientras me hablaba al oído.
Yo asentí, quería probar las bebidas y también no quería parecer aburrida, estos días habían sido un poco difíciles en casa y como dicen un trago puede que ayude a olvidar los problemas.
Al probar por primera vez el alcohol se me hizo un poco amargo, pero después de un par de bebidas, ya no tenía ese sabor.
Estaba bailando con Anthony , todo iba tan perfecto. Después de un tiempo de estar en la fiesta, resulte bailando con Diana.
- ¿Qué te parece la fiesta?
- Esta interesante, es la primera vez que me divierto tanto - dije mientras sonreía.
- Debemos salir más seguido.
- Te doy la razón.
- Si quieres podemos ser amigas - dijo ella en tono medio dudoso. Quizás pensaba que no quería ser su amiga.
- Claro - dije yo mientras la abrazaba, creo que el alcohol si estaba haciendo efecto. En ese momento pude ver de nuevo esa radiante sonrisa que tenía antes.
Tener amigas cercanas a Anthony haría que me sienta más cómoda después de todo, así cuando saldríamos ya no me sentiría muy extraña.
Después de eso regresamos a la mesa donde los chicos estaban tomando.
Karina también estaba ahí y cuando vio que llegue, me pidió que le acompañe al baño.
- Pude ver que Diana y tu se hicieron amigas.
- Si, me parece una chica muy amable.
- No te dejes llevar mucho por las apariencias.
- ¿Qué quieres decir con eso?
- Claudia, yo se que el estar con Anthony no es muy fácil, porque el es muy conocido y se que quizás tu quieras ser amable con muchas personas cercanas a él. Pero creo que debes tener cuidado en eso. Aveces hay personas que están cerca de él solo porque quieren hacerle daño y creo que ahora tu eres el blanco perfecto - dijo ella con tono muy serio.
- Esto es frustrante - dije mientras miraba mi rostro en el espejo.
- También hay chicas que van a querer separarlos y debes tener cuidado y tener más confianza en ti misma. Y debes saber que ser amiga de Diana no es una buena opción.
- ¿Por qué?, si ella ni siquiera mira a Anthony y creo que no le gusta.
- Ten cuidado y no te le acerques mucho, si no quieres quedarte sin Anthony.