🔥Un juguete sexual🔥 [Sonadow/Shadonic]

La Pelea.

Cierta eriza cobalto estaba un tanto ajetreada. El profesor le había pedido que trajera los libros que había calificado el día anterior. Eran muchos, 32 en total, y...para alguien de su tamaño y algo de fuerza le era difícil saber por dónde iba, hasta que en uno de sus pasitos torpes chocó con alguien.

Sonic: Ups...lo-lo siento mucho

Trató de moverse, pero antes de que lo hiciera pudo sentir un poco la liberación del peso que llevaba en sus bracitos. Alguien había tomado la mitad de los libros permitiéndole ver con claridad hacia delante.

Sonic: Oh, gracias Shadow

Shadow: Ven, te ayudaré

Mencionó tranquilo. Ambos fueron caminando con normalidad mientras miraban hacia adelante. Nadie decía nada, ninguno alguna vez ha tenido la oportunidad de charlar con el otro. Era una situación muy incómoda, pero que muy pronto resultaría cambiada por el azabache.

Shadow: Sonic...

Sonic: ¿Sí?

Shadow: ¿A ti te gusta Silver?

Sonic: *Se sonroja* Bu-bueno...la verdad es que sí *Sonrió al pensar en el mencionado*

Shadow: Ya veo... *Suspira decepcionado*

Sonic: ¿Por qué la pregunta?

Shadow: *Se detiene*

Sonic: ¿Shadow? *También se detiene y lo mira algo preocupada*

Shadow: Sonic... Silver es mi amigo, pero...

Sonic: ¿Pero?

Shadow: Por favor, te pido que te alejes de él

Sonic: ¿Qué?

Shadow: Por favor, es por tu propio bien. Silver no es como crees

Sonic: ¿De qué hablas?

Shadow: El solo te hará daño

Sonic: *Agacha su cabecita* Mentira...

Shadow: No te miento Sonic, él de verdad-

Sonic: ¡Mentiroso! ¡Él jamás me lastimaría!

Shadow: ¡Sonic abre los ojos! ¡Te está engañando!

Sonic: ¡Basta Shadow! ¡¿Cómo puedes hablar así de él?! ¿Y te haces llamar su amigo?

Shadow: ¡Sonic!

Sonic: Escucha. Solo dame los libros. Me falta poco para llegar a mi clase y por favor... no te metas en mis asuntos *Habló molesta mientras desviaba la mirada*

Shadow no respondió más. Tan solo gruñó un poco en bajo mientras le entregaba los libros. Miró una vez más a la pequeña y esta solo le dio la espalda para seguir su camino, y poco después, el hizo lo mismo.

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Amy: ¡Pss! Tails ¿Qué crees que le pasa?

Tails: No lo sé, pero se ve que hoy es mejor no decirle nada

Sonic: (Quién se cree ¡nadie habla así de Silver!) *Frunce el ceño*

Profesor: Muy bien chicos, ya pueden salir al recreo

Todos empezaron a salir. Pero la cobalto salió antes y sola. Sus amigos no dijeron nada al respecto, sabían que si la pequeña estaba molesta lo mejor era dejar que se tranquilizara. Ya más adelante, hablarían con ella sobre lo que lo que le estuviera sucediendo.

Sonic por su parte estaba caminando rápidamente por los patios, caminar la ayudaba a relajarse, pero parecía que en esta ocasión no le resultaría. En verdad sintió tanta impotencia cuando hablaron mal de la persona que amaba. Fue cuestión de minutos cuando sintió un jalón en su brazo, que, al darse la vuelta por intuición, logró ver a un Silver algo molesto también.

Silver: Sonic ¿Qué rayos te sucede? Te estoy llamando desde hace un momento y solo me ignoras

Sonic: Lo siento Silver, ahora no tengo tiempo *Intentó zafarse del agarre*

Silver: ¿Qué te sucede?

Sonic: Nada. Por favor, ahora no quiero hablar

Silver: ¡Sonic!

Sonic: ¡Ya déjame! ¡Entiende que no quiero verte ahora!

Silver: ¡¿Qué te pasa?! ¡¿Por qué me gritas de esa forma?! ¿Desde cuándo te has vuelto tan irritante?

Sonic: ¡Pues si soy tan irritante, suéltame!

Silver la soltó y Sonic salió corriendo hacia su clase, todos estaban disfrutando de la merienda así que podría estar sola allí, sin que nadie la molestara.

Cuando había llegado su enojo estaba desvaneciéndose y siendo reemplazado por un sentimiento de culpa. Cuando ella se molesta tiende a ser grosera y peleona. Ella mismo lo sabía y por ello se alejaba de sus amigos para evitar esos roces, pero jamás pensó que el chico que le gustaba tanto la vería de esa forma.

Sonic: Ay no... *Susurró mientras agachaba sus orejitas*

Amy: ¿Sonic? *Entra con algo de preocupación* Parece que ya se te pasó el enojo. ¿Qué sucede?

Sonic: Amy, hice algo malo *Miró hacia sus piecitos de forma apenada*

Amy: ¿Qué hiciste?

Sonic: Pelee con Silver...

Amy: Oow Sonic, no te preocupes. Estabas de mal humor, de seguro entenderá por qué reaccionaste así

Sonic: ¿Crees que me perdone?

Amy: Claro que sí. Habla con él cuando las clases terminen y así arreglaran las cosas entre ustedes ¿Te parece?

Sonic: Si...

Amy: Vamos a comer, aún falta unos minutos para que se acabe el receso. Tienes tiempo

Sonic: Gracias Amy

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Las últimas horas habían pasado ya. El timbre de salida se escuchó en todo el colegio. Y una pequeña eriza azul aun no estaba segura de ir a disculparse.

Entre el miedo y la vergüenza que sentía, prefirió mejor no ir a ver al plateado y se fue a su casillero como de costumbre. ¿Y que creen que encontró allí?

Exacto, una nueva carta apareció, pero esta vez no era ningún lindo poema y ni siquiera estaba decorada. Eso solo preocupó a Sonic quien con lentitud decidió abrirla y leer lo que decía, esperando que nada malo estuviese escrito allí.