𝐒𝐢𝐝𝐞 𝐄𝐲𝐞 ⌇· 𝐖𝐨𝐧𝐭𝐨𝐧 ₊

Ten

Dentro del campo de juego de baloncesto, corría más viento porque tenía ventanales abiertos en la parte superior de las gradas.

Solo por esa razón se colocó la casaca, no porque era de Wonbin, para nada.

—Te dije que le dio su chaqueta. —Escuchó detrás de él.

Era Jay junto a Sunghoon y otro chico más que no conocía, pero era igual de atractivo que sus amigos.

—Entonces sí es cierto.

—Sí, Sunoo, al fin Wonbin se interesó en alguien.

Los tres rieron entre ellos, hasta que se integró el tal Jake, a quien conocía porque es algo imposible que no sepa quién es.

Sohee también escuchó la conversación y le dio palmadas en la espalda a Anton.

—Ya los oíste, Wonbin hyung se muere por ti.

—No dijeron eso.

—Pero se sobreentiende.

Anton rio y despeinó a Sohee, de por sí ya estaba con los pelos parados, pero ahora se veía como un erizo.

—¡No~!

—Me la debías.

—Hola, nenes, ¿cómo les fue en su primer voluntariado? —Llegó Kai.

—Hyung, dígale que no estropee mi cabello —Se quejó Sohee.

—Él sabe por qué lo hice.

El mayor sonrió y les entregó unos pines.

—Tengan, son para que los coloquen en su mochila o donde quieran.

—Dice "Todos somos voluntarios" —Leyó Lee menor.

—Sí, espero se hayan divertido, debo seguir entregándoles a los demás.

—Gracias, hyung. —Despidieron ambos.

Esto de ser sociable les estaba cayendo bien.

—Y tú —golpeó el brazo de Sohee—, no me contaste qué tal te fue con Seunghan.

—Estuvimos limpiando y luego nos quedamos hablando.

—¿No hubo beso?

Sohee se trepó en su encima y rodeó con un brazo su cuello.

—¡Ya, perdón! Me estás ahorcando como mono.

Forcejearon un rato hasta que lo soltó y Anton se empezó a burlar de sus orejas rojas.

—¿Por qué tan sonrientes? —Apareció Jake.

Los dos se calmaron y lo saludaron con una reverencia.

—Buen día, hyung.

—Hola, soy Shim Jake, estaba invitando a algunos para ir juntos a comer cuando acabe todo esto. ¿Quieren venir?

Sohee iba a aceptar, pero Anton no estaba muy seguro.

—Te dije que te esperes a que venga Wonbin hyung —Intervino otro chico, a quien antes escucharon se llama Sunoo.

—¿Cuál es la diferencia? Wonbin irá de todas formas.

Anton escuchó eso y le dio la mirada aprobatoria a Sohee.

—Sí iremos —Contestó.

—¿Sí? Genial, ya ves, Sunoo, aceptaron.

Los mayores se alejaron y apareció Wonbin con sus cosas ya listas para irse.

—Al fin se terminó la jornada, todo quedó perfecto —Le contó a Anton—. Oh, te pusiste la chaqueta, se te ve bien.

—Gracias —dijo en tono bajo.

—Vi a Jake y Sunoo por aquí, ¿les dijeron algo?

—Nos invitaron a comer en grupo —Contestó Sohee.

—Me dijeron que tú irías —Agregó el menor.

Wonbin frunció el ceño, él no estaba ni enterado, pero ya sabía que fue idea de Jake.

—Ahora tendré que ir —Suspiró—. Que venga Seunghan y los alcanzamos.

La mayoría se estaba retirando y cuando llegó Hong, le contaron a dónde irían.

Ya afuera de la preparatoria, estaba el grupo completo esperándolos.

—¿Dónde queda? —Preguntó Taehyun con el celular en mano.

—Jay sabe.

—Es un lugar donde venden hamburguesas al estilo clásico americano, queda a tres cuadras.

—Tú sí que extrañas a tu país —Lo palmeó Sunghoon.

—Anton también es de Estados Unidos.

Todos giraron a verlo por el comentario de Sohee. Ay no, aquí va de nuevo el sonrojo.

—¿De qué parte?

—D-de Boston, pero crecí en New Jersey.

—Yo soy de Seattle —Dijo Jay.

La cara de Wonbin fue una de 'Nadie te preguntó', por lo que tomó la mano de Anton y caminó rumbo al famoso restaurante.

—Yah, ¿tan celoso te pones?

—Pero si solo le preguntamos de dónde es.

—No te lleves a Anton para ti solo.

Fueron algunos de los comentarios que le hacían al mayor.

Los demás solo se rieron y siguieron a la pareja, quienes iban dos metros adelante.

—Hyung, ¿puedo hacerte una pregunta?

—Sí, dime —Le dijo con un tono dulce.

Podía ser frío con los demás, pero con él cambiaba.

—¿Por qué nos molestan tanto? Lo digo porque es lo único que escuché en todo el día.

—Ahh —Wonbin rascó su cuello—. No lo sé, seguro que no están acostumbrados a verme tratar bien a alguien.

—Es un trato especial, entonces —Aclaró.

Wonbin se tomó su tiempo antes de sonreír y asentirle.

—Sí, es un trato especial.

Wonbin celoso es mi debilidad

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