Danmachi: El ascenso de la muralla

Capítulo 24: Piso 13

Sintiendo una sensación de emoción, conduzco a Ryner, Ryuu y Gaul hacia la mazmorra.

Nuestro destino, piso 13. El primero de los pisos intermedios.

Leonmitchelli y Millhiore decidieron quedarse hoy para vigilar nuestra casa y Athena. Nuestra estrategia estándar.

La única razón por la que todos fuimos juntos a la mazmorra la última vez fue para poder subir de nivel. Pero algo así rara vez sucederá.

No hasta que el gremio nos exija realizar expediciones en el futuro una vez que nuestra familia alcance el estatus de rango D.

Cuando llegue ese momento, arreglaremos algo. Pero por ahora lo hacemos así ya que funciona.

Al entrar a la torre de Babel, los cuatro descendimos, nuestras capas de salamandra nos ofrecieron una gran protección contra los monstruos en los primeros 12 pisos.

Todo lo cual podemos manejar fácilmente ahora que hemos subido de nivel.

Sin embargo, no nos estamos volviendo arrogantes.

Ya que hacerlo dentro de la mazmorra nos conducirá a nuestra muerte.

Y no planeo volver a morir pronto.

Llegamos fácilmente al piso 12 en poco más de una hora después de entrar al calabozo, tomamos uno de los pasillos conocidos y comenzamos a descender. Finalmente llegamos a un área completamente hecha de lecho de roca, con múltiples rutas de túneles frente a nosotros.

Haciéndonos saber que hemos llegado a nuestro destino objetivo.

Los pisos intermedios, también conocidos como el Laberinto de la Cueva.

Tan pronto como entré a dicha área de la mazmorra me sentí empoderado. Literalmente puedo sentir la presencia de los demás sin siquiera mirarlos.

Lo que me dice que mi habilidad [Geo Archon] finalmente está entrando en juego.

'Finalmente.' Pensé. He estado esperando para desarrollar esta habilidad. Para probarlo y empujarlo. Permitiéndome aprender todos sus matices.

Con una pequeña sonrisa en mi rostro, continué guiando a los demás hacia adelante.

Pero me detuve en seco cinco minutos después cuando las paredes a ambos lados del camino en el que estábamos se abrieron y aparecieron treinta perros del infierno.

"¡Perros del infierno, en formación!" Lloré. Levantando mi lanza mientras lo hacía.

Los demás también levantaron sus armas.

Tan pronto como lo hicieron, los perros del infierno abrieron la boca en nuestra dirección y un gigantesco torrente de llamas corrió hacia nosotros.

Parece que la mazmorra no usa guantes de seda hoy.

A medida que las llamas se acercaban cada vez más, los cuatro nos apiñamos y usamos nuestras capas de lana de salamandra para defendernos de las llamas. Cuando nos sumergimos, el calor irradió a través de las capas, pero por lo demás salimos ilesos.

"Maldita sea, esto es una locura." Dijo Ryner. "Si no tuviéramos estas capas ahora seríamos cadáveres carbonizados".

"Es como dicen, los pisos intermedios no se parecen en nada a los pisos superiores". Agregó Ryuu.

"Correcto. Lo que significa mantenerse unidos y seguir la estrategia". Yo dije.

Los demás asintieron.

Después de que lo hicieron, esperamos unos segundos más hasta que las llamas de los perros del infierno se detuvieran por completo.

Luego hicimos nuestra jugada.