Capítulo 67: La gran pelea (Parte 1)

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'Esta aquí. Por fin ha llegado el momento de la guerra. Pensé.

Una y otra vez mientras Rogue, Leonmitchelli, Echidna y yo regresábamos a la Casa del Búho.

Después de discutir las cosas un poco más con Shakti, Alise y los miembros de su familia, todos decidimos tomar caminos separados.

Una vez que esto sucedió, mi grupo decidió terminar la patrulla y ahora regresamos a la Casa del Búho para informar a Athena y a los demás sobre los eventos de hoy.

Al llegar a casa en un abrir y cerrar de ojos, convoqué una reunión en la sala y luego les expliqué a los demás lo que habíamos aprendido antes.

"Esto es muy preocupante". reflexionó Atenea. Una mirada contemplativa en su rostro. "Parece que Evilus se está preparando para ejecutar algo masivo. Pero en cuanto a lo que podría ser, no tengo idea."

"Bueno, entonces todo lo que podemos hacer es prepararnos". Yo dije. Todos los demás asienten con la cabeza.

Una vez que lo hicieron, recurrí a Millhiore. "Mili, ¿cómo está nuestro suministro?" Yo pregunté.

Desde hace unos meses comencé a abastecernos de pociones, elixires y varios otros artículos y los guardamos aquí en nuestra casa. No solo en preparación para el próximo evento, sino también en caso de que algo suceda aquí en el futuro y necesitemos una poción rápidamente.

Nunca sabes.

"Nos vemos bien, Morax". Millhiore me lo dijo. "Más de 100 pociones, elixires y un buen stock de todos los demás suministros que hemos estado almacenando durante estos últimos meses también". Ella me explicó.

"Bien." Yo dije. "Bueno, entonces se suspendió la reunión. ¿A menos que alguien tenga algo más que desee decir?" Yo dije.

Nadie pronunció una palabra.

Entonces con eso todos se dispersaron.

Fui a mi habitación y me metí en la ducha.

Mientras el agua tibia corría por mi cuerpo, mi mente volvió a toda la sangre y muerte que está a punto de ocurrir en Orario.

Sé todo lo que está por suceder, pero realmente no puedo hacer mucho para cambiarlo. Y si lo hiciera, las cosas podrían resultar aún peores.

Este es uno de esos raros momentos en los que el conocimiento previo es más una maldición que una bendición.

Suspirando, coloqué mi cabeza contra la pared frontal de la ducha y dejé que el agua corriera sobre mí.

Eso fue hasta que escuché a alguien entrar a mi baño.

"¿Quién es?" Yo pregunté.

Pero no obtuve respuesta.

En lugar de eso, se abrió la cortina y Ryuu entró a la ducha.

Luego vino detrás y envolvió sus brazos alrededor de mi cintura, presionando sus senos contra mi espalda.

Tomando sus manos entre las mías, me incliné suavemente hacia ella.

"Ey." Yo dije.

"Hola." Dijo Ryuu.

Luego nos quedamos allí en silencio, ninguno de los dos necesitó decir nada más.

En ese momento todos los pensamientos que daban vueltas en mi cabeza desaparecieron por completo y me sentí en paz. Ryuu siempre me hace sentir así. Al igual que el resto de mi familia y amigos.

Por eso voy a protegerlos a todos.

No importa qué.

Mientras me resolvía a proteger lo que era precioso para mí, de repente sentí que la mano izquierda de Ryuu agarraba mi polla semierecta y comenzaba a bombearla lentamente.

Danmachi: El ascenso de la murallaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora