Triángulo amoroso {Larry/Zarry/Zouis}

Capítulo 2.

Capítulo 2.

Harry miro la hora y se percató que Zayn aún no llegaba. Bufo. Siempre era lo mismo. Su novio siempre llegaba tarde. Su madre tampoco estaba y él estaba solo en su casa. Él quería arreglar las cosas con Zayn, que todo fuera como antes. Y si tenía la casa para solo ellos dos. No la iba a desaprovechar.

El timbre de la puerta sonó sacándolo de sus pensamientos. Se acomodó mejor la ropa y se levantó a abrir.

Zayn se encontraba con un cigarrillo entre sus manos dándole una calada. Cuando boto el humo los labios de Harry se apoderaron de los de él. La lengua del rizado delineo el inferior y luego lo mordió. El pelinegro soltó el cigarrillo colocando las manos en la cintura de Harry. Este último enrollo sus brazos en el cuello de su novio. Apretándolo a él para que sus miembros se encontraran. Zayn jadeo en su boca.

Punto para Harry.

Se separaron con los labios hinchados. Mirándose a los ojos. Zayn se había olvidado lo hermoso que era el rizado.

–Hola, amor.

El pelinegro no contesto. Solo se acercó besándolo más.

Entre beso y beso llegaron al sofá. Tocándose por todo el cuerpo. Sintiendo sus erecciones hacer fricción contra la otra. La ropa ya estorbaba y comenzaron a quitársela. Quedaron desnudos. Harry se posiciono encima de su novio y comenzó a prepararlo.

Ese era un secreto de Zayn.

En la relación con Louis era el activo y con Harry era el pasivo.

(...)

Los dos se encontraban en el sofá, todavía desnudos. Harry le acariciaba el brazo lentamente a Zayn mientras este se fumaba un cigarro, exhalando el humor por su nariz. El rizado miro su perfil y acerco la mano a sus mejillas.

–No me toques –el pelinegro advirtió.

Harry rodo los ojos. Él quería, a él le gustaba consentir a las personas pero su novio no se dejaba. Se acomodó mejor entre los brazos de Zayn y suspiro. Pensaba que con el sexo que habían tenido las cosas iban a cambiar, tal vez no del todo, pero si algo.

Y se equivocó. Se equivocó rotundamente. Zayn se levantó casi que tirándolo al piso. Miro al chico, que comenzaba a colocarse su bóxer y se cruzó de brazos.

Él quería que ambos se abrazaran y durmieran en los brazos del otro. Que se besaran por horas, él quería mimarlo. Pero no, Zayn no se dejaba.

–Cariño.

Bueno, por lo menos aún le decía ese lindo apodo.

–Dime.

–La he pasado bien contigo.

Esas palabras hicieron que una enorme sonrisa se apoderara del rostro de Harry. Con hoyuelos y todos. Zayn sonrió internamente, unas simples palabras y ya tenía al rizado a sus pies. Que ingenuo.

–¿Por qué has llegado tarde hoy?

Esa pregunta lo agarro desprevenido. Parpadeo varía veces y lo miro. No podía simplemente decirle que estaba follando con otro, oh no, claro que no.

–Se me ha hecho tarde. Lo lamento, sabes que te quiero.

El rizado le pareció extraño. Zayn Malik nunca decía esas palabras, pero sonrió, esta vez sin hoyuelos.

–Me tengo que ir.

Y eso ya no era extraño para Harry. Que su novio se fuera después de una buena follada y no volviera por ahí en varios días. Aunque existían los mensajes, Harry se estaba cansando de todo. Él quería más.

–Está bien. ¿Nos vemos mañana?

–No. Lo lamento pero ya tengo planes.

Como ir a follar con otro que no eres tú.

Harry asintió. Pero la curiosidad le gano y abrió su boca para preguntar:

–¿Con quién tienes planes?

Zayn rodo los ojos.

–Tú no me controlas la vida, cariño. También tengo amigos, como por ejemplo: Liam.

Muy pocas veces el rizado había oído de ese tal Liam, aunque si sabía quién era. Había tenido la oportunidad de conocerlo.

Después de que Zayn se fuera, él agarro su ropa que estaba esparcida por todos lados y se vistió completamente. Estaba aburrido. Muy aburrido.

Se colocó a reflexionar sobre su vida porque no tenía más nada que hacer. Su madre aun no llegaba y él no quería salir para ningún lado. Vio su teléfono en la mesita que estaba a un lado y lo agarro entre sus manos. Paso su dedo desbloqueando la pantalla y miro que tenía un mensaje.

Una sonrisa. Una sonrisa genuina y completamente hermosa se posó en su rostro.

Louis.

Eso apareciera en el identificador. Él castaño precioso de bonitos ojos azules. Bueno, así lo había apodado Harry.

Louis: Hola, Harry. Espero que te acuerdes de mí, soy el castaño con el que estuviste a punto de follar. Espero que no me hayas olvidado.

Soltó una carcajada ante la espontaneidad del chico ¿Cómo olvidarse de él?

Yo: Claro que me acuerdo tuyo. Como olvidar a un chico tan precioso.

¿Y qué hacia él escribiéndole a un chico que no era su novio? ¿Qué hacia él diciéndole esas cosas a otro chico?

No le importaba la respuesta y tampoco quería averiguarla.