idiota insoportanle

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-¿que haces aquí?, ¿cómo me encontraste?...- estaba muy sorprendida de verlo.

-no fue difícil, simplemente te rastreé-

-aun así, pierdes tu tiempo, yo ya conocí a alguien mas- además me da miedo el como me rastreó.

-¿encerio?, no te creo, nunca te fue fácil socializar- y tú que sabes...

-yo no lo busqué, el me buscó, idiota- bueno en realidad apenas lo conozco.

-mira, solo vine para arreglar las cosas contigo, pero si tu no quieres me iré- era buena idea, adiós bastardo.

-es exactamente lo que quiero, así que adiós-

Estaba por cerrar la puerta cuando la empujo, me tropecé para atrás y caí en el sillón, el entro, me jalo de la mano y me acorraló contra la pared.

-mira Kassidy, no me importa si estas con otro tipo, soltera o casada, vas a ser mía, no importa lo que tenga que hacer- ¿cuando se volvió tan agresivo?

-suéltame maldito bastardo, ni en un millón de años vuelvo a estar junto a ti-

Esta situación no podía ocurrir dos veces en la misma noche, se estaba acercando a mi boca, y si eso pasaba probablemente hasta abusara de mi, pero alguien me lo quito de encima y lo aventó hacia el sillón.
Caí al piso y "mi héroe" me levanto y me saco de la casa, no fue hasta que pude reaccionar que vi que Derek era mi rescatista, me metió a un auto (que supuse era el de él), me puso el cinturón, lo cual agradesco porque condujo a muy alta velocidad, me dormí en el camino, y cuando desperté estaba en una cama, me levante y examine la habitación, era más grande que la mía, y estaba un poco desordenada.

Me revise, para ver si no había sido violada o algo...
Pero por suerte llevaba toda mi ropa puesta, menos mis zapatos, me puse a buscarlos por todos lados, pero no estaban, me metí abajo de la cama para revisar, y en efecto estaban hasta el fondo, logre entrar, pero a la hora de salir me quede atorada.

-¿que haces?- me tense al escuchar esa voz.

Hay no creo que ya llego Derek.

-solo estoy buscando mis zapatos- dije con una voz baja.

-tus zapatos están en el armario, los que estaban abajo de la cama son los míos, son parecidos-

-por eso decía que iba a ordenar un poco tu cuarto y quería recoger lo que había debajo de la cama- a y además estoy atorada.

-a mi me parece que estas atorada ¿quieres que te ayude?- ¡que! ¿Acaso lees la mente?

-yo no estoy atorada, puedo salir cuando yo quiera- eso espero.

-¿enserio?, entonces sal- ¡MIERDA!

Trate de salir con todas mis ganas, estaba sufriendo la peor de las vergüenzas, pero me fue imposible salir.

-y entonces, ¿puedes salir o no?-

-si, solo que me pones nerviosa- o rayos ¿qué he dicho?

-aaa... Entonces, te pongo nerviosa, por eso te desmayaste ayer, cuando te me acerque demasiado- es un idiota...

-no mal interpretes las cosas, me desmaye porque no me gusta el contacto físico- además tu que sabes de mi ¡NADA!

-se mas de lo que piensas, pero bueno cambiando de tema, creo que seria mejor que salieras de ahí, haber, levando la cama y tu sales, ¿ok?- esto me esta dando miedo, creo que es una especie de psíquico, dejare de pensar en ese caso...

-ok- me sorprendió la fuerza que tiene, yo si tratara de levantar la cama no se movería ni un centímetro, salí y me pare.

Pero el muy idiota, al bajar la cama, se golpeo su dedo del pie y cayo encima de mi en la cama.

-¡AH carajo! Eso duele-

-no creo que más de lo que estoy sufriendo yo- no podía ni respirar por lo pesado que es...

-oh, lo siento, pero me gusta estar encima de ti, me siento dentro de una película de amor- se acomodo para quedar frente a frente.

-mejor quítate de encima y dime en donde estoy para que pueda irme- sinceramente tenía que salir de ahí, estar tan cerca de el me ponía nerviosa.

-pues no te vas a ir, y si te vas, te vas a perder, además ¿que tiene de malo estar conmigo?, no tienes porque ponerte nerviosa, no te haré nada- ¿que acaso no tiene cerebro?, en primera, me cayo mal en cuanto lo conocí, en segunda, necesito volver a mi casa y en tercera me da miedo que sepa lo que pienso.

-mira... Yo soy la supervisora de mi casa, y tengo que cuidar a mi hermana y a mi Mamá- además tenía que hablar con Kathy, me mando una carta de que regresaría en tres meses y necesito ver si se quedara.

-aaa, pues no creo que les haga daño que no estés un día, además, me gustaría pasar más tiempo contigo- ni en sueños idiota.

-encerio necesito irme, no sabes lo mal que se pone mi casa cuando no estoy, además mi Mamá ayer me pidió que fuera a comprar algo y necesito ir-

Dios, ¿porque este hombre es tan testarudo?, pero al parecer mis palabras lo convencieron y se quito de encima de mi, me puse mis zapatos, él se metió al baño, y esa fue mi oportunidad.

Salí corriendo de la habitación y me dirijí a la salida, trate de abrir la puerta pero estaba cerrada, busque por todos lados las llaves hasta que las encontré, escuche que el idiota estaba saliendo del baño, y me apresure a abrir la puerta, justo lo escuche gritar al momento en que cerré y salí corriendo hacia las escaleras.

Llegue a la planta baja y pregunte en recepción que donde estaba, el señor se veía muy amable, me dio indicaciones y un mapa para que no me perdiera.

Salí de lo que parecía un edificio de departamentos. El señor me dijo que caminara hacia la derecha del edificio y pidiera un taxi en esa esquina.

Hice todo como me indico, pero no pasaba ningún taxi o camión que conociera, comense a asustarme porque sabia que Derek saldría en cualquier momento y me encontraría aquí, por fin venia un taxi, se detuvo pero antes de poder entrar mi mala suerte comenzó.

-¿a dónde crees que vas?- me agarro por la cintura y me alejo del taxi.

-déjame en paz, ¡ALGUIEN AYUDEME!- casi parece que nadie hacia caso, ya que incluso el señor del taxi se fue y me dejo sola con este bastardo...

-si tanto querías irte me hubieras pedido que te llevara-

-no lo creo, y ahora por tu culpa perdí MI taxi- ya estoy harta de todo esto, lo malo es que no traigo conmigo mi gas pimienta.

-sabes que, no me importa lo que pienses, tu vienes conmigo, quieras o no- me cargó sobre su espalda, aunque no entiendo como puede hacerlo, me he esforzado mucho para ser pesada y que nadie me pueda cargar, pero al parecer el callo en un balde de desechos tóxicos y es súper fuerte.

-más te vale que me bajes en este momento o te juro que grito- aunque no creo que nadie me haga caso

-míralo de este modo, si te ven sobre mi espalda, resistiéndote y gritando, a todos se les va a hacer la situación más romántica del mundo, aunque tengo que decirte que estas un poco pesada, tus esfuerzos han funcionado muy bien- tengo que escapar de él de alguna forma.

-muy bien entonces enfréntate a las consecuencias- dejo caer todo mi peso sobre el y los dos caemos al piso.

Justo lo que supuse, estoy demasiado pesada, y me enorgullezco de ello.
Me paro lo más rápido que puedo y corro, veo un taxi a lo lejos y lo paro justo a tiempo antes de que Derek reaccione, le digo al taxista que arranque y por fin me alejo de el idiota, y de su mar de problemas, pero a pesar de ser libre, siento curiosidad por él...

La curiosidad mato al gatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora