La curiosidad mato al gato

Peligro S.O.S

Llegamos a la cafetería y nos sentamos en una mesa, le dije a Derek que tenía que ir al baño, fue mi excusa para escaparme a el almacén de la cafetería, Derek ni siquiera se dio cuenta.

Toque tres veces, y Tomas abrió la puerta, entre y me encontré con Ray sentada en una silla.

-¿¡ya nos vas a contar que paso!?- ese era Tomas, se escuchaba frustrado y preocupado.

-presten mucha atención, desde hace tres días mi vida se ha convertido en un huracán...-

Después de 15 minutos explicándoles todo, me dijeron que me iban a ayudar con mi mudanza, les dije que no podían contarle a nadie en donde iba a ser mi nueva casa, y que necesitaba que me ayudaran a liberarme de Derek por ese día.

Tomas hizo un plan, Ray me iba a prestar su ropa y saldría por la puerta de atrás, mientras ella salía por delante para hacerse pasar por mi, yo iría a casa a empacar todo, Tomas le diría a Derek en donde me iba a esconder y mientras Derek iba a buscar a mi antigua casa, ellos me ayudarían con la mudanza.

Aveces adoraba el cerebro de Tomas, solo espero que sus teorías y movimientos surtan efecto, de ventaja para mi que Ray tenía el mismo color de pelo que yo, solo que ella lo tenía un poco más largo, por eso acordamos que se lo amarraría.

Iniciamos con el plan, por suerte si me quedaba la ropa de Ray, Tomas salió a hablar con Derek e inició el plan Ray salió y yo igual, no se si el plan funciono, pero yo corrí lo más rápido que pude hasta llegar a mi casa, para mi suerte tenía buena condición.

Entre, escuche a mi Madre en la sala, la salude pero no recibí respuesta, entre a mi cuarto y agarre solo lo necesario, en la nota de la dirección decía que el departamento tenía muebles, así que solo llevaría lo indispensable, y llevaría también algunas cosas de mi Padre y otras de Kathy.

Tocaron la puerta y supuse que seria Tomas, pero sabiendo que estaba en peligro, mire por el picaporte y vi a un señor de negro, lo que mas me sorprendió, fue que traía un arma en un costado de su cintura, corrí a mi cuarto por mi celular y llame a Tomas.

LLAMADA COM TOMAS:

-Tomas ¿donde estas?, hay un hombre con arma afuera de mi casa, necesito tu ayuda- estoy temblando...

-Kassidy, ¿como es ese hombre?, quédate dentro de la casa, y no hagas mucho ruido- sonaba muy alarmado.

-¿Derek?, no se si confiar en ti, pero estoy muy asustada- mi voz sonaba cortada.

-¿donde estas?-

-en donde nos conocimos, en mi casa, por favor date prisa- dieron dos balazos a la puerta -Derek, entraron a la casa, ¿que hago?- corrí al cuarto más escondido que pude con mi Mama siguiéndome el paso.

-Kassidy, tranquila, no te pasara nada, estoy llegando, tranquila voy a colgar-

-no Derek no cuel...-demasiado tarde ya lo hizo.

Se escuchaban pasos cercanos, trate de calmarme, pero mi Madre hacia mucho ruido al respirar, trate de calmarla pero fue inútil, soltó un sollozo y él hombre de negro lo escucho, los pasos cada vez más rápidos se acercaban.

Abrió la puerta de un tirón, me jalo del brazo y encerró a mi madre en ese cuartito, me cargo sobre su hombro y me metió a otro cuarto, me tiro al suelo y comenzó a hablar.

-¿que tal niña?, espero no molestar en estos momentos, pero necesito algo que era de tu padre, algo con mucho valor, y tu lo tienes así que necesito que me lo des- su voz era ronca y muy profunda.

-¿a que se refiere?, no entiendo de que esta hablando, ¿que es lo que busca?- estaba muy asustada, me temblaba todo, la pistola la tenía aun al lado de su cintura.

Me jalo del pelo y me alzo a su altura, estoy llorando tanto que ni siquiera puedo hablar, espero que Derek llegue pronto.

-mira niña no estoy para tus juegos, o coperas o lo haremos por las malas-

-suélteme ¡por favor! ¡No se que es lo que busca!-

-muy bien, lo haremos por las malas- me aventó contra la cama, amarro mis manos a la cabecera y comenzó a sacar la pistola.

-señor, por favor, no tengo idea de lo que busca, si me diera mas detalles, se lo daré, ¡por favor!-

-eres muy bonita, me sorprende que tu Padre nunca me haya dejado conocerte- paso su pistola por mi mejilla, se acercó a mi y comenzó a besar mi cuello, tal vez no pudiera mover mis manos, pero tenía mis pies, le golpe su pierna y se alejó de mi gritando de dolor.

-maldita perra, eso lo pagaras muy caro- amarro mis piernas y comenzó a quitarse la ropa, ya no sabia que hacer, se acercó a mi y comenzó a desabrochar la camisa de botones de Ray, trataba de sacar mis manos, lo estaba logrando, él hombre loco bajo a mi pantalón, yo solté una de mis manos y escuche que alguien abría la puerta, era Derek, le dio un golpe en la nuca al hombre loco y mi pesadilla termino.

-¡llegaste!, estaba muy asustada- Derek me desamarro las piernas y la mano -muchas gracias- llore todo lo que pude y Derek me abrazo con fuerza, como si pensara que un minuto más tarde y me hubiera perdido.

-¿dudaste que vendría? Estoy aquí para protegerte, tranquila, ya paso, estoy aquí, mientras estés conmigo juro que no te pasara nada, tranquila- llore por todo, por el miedo, por sus palabras, por mi padre, por toda mi vida.

Derek seguía sin soltarme hasta que me calme un poco.

-Derek, ese hombre ¿esta muerto?- me daba miedo que estuviera vivo, pero me daba mas miedo que estuviera vivo.

-solo está inconsciente, relájate, voy a dejarte por un momento en lo que me encargo de él, ¿esta bien?- asentí con la cabeza, me soltó por completo y se alejo arrastrando al señor, me quede sola en el cuarto de Kaila.

Me acorde de que mi madre estaba encerrada, corrí a donde estaba y al abrir mi madre estaba llorando, se veía como cuando mi padre murió, cuando me vio, lloro con tanta intensidad, me agache y la abrace.

-¿estas bien Kassidy?, ¿que te hizo ese hombre?- se escuchaba muy preocupada.

-estoy bien, no me hizo nada, tranquila Mama, ya paso, tranquila-

-¿segura que estas bien?, si te pasara algo, no se que haría, perdóname por haberte dado esta vida, ¡perdóname por favor!-

-¿a que te refieres Mamá?, ¿acaso tu sabes porque esta pasando esto?- mi mamá paro de llorar y miro encima de mi hombro, voltio y vi a Derek, traía un maletín en la mano y unos documentos en la otra.

-¿señora Sonia, no cree que es hora de decirle la verdad?-

¿A que se referían?, ¿qué verdad?, ¿Como se conocían?, ¿Que esta pasando?.