Platicas privadas

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Dormí prácticamente muchas horas de más, no puedo creer, esta vez, ni una mendiga pesadilla, eso era bueno...

Me levante de la cama y escuche sonido en el baño, me hacer que y era una persona vomitando, abrí la puerta lentamente, y era Derek, estaba (iughg) vomitando, me acerqué para darle mi apoyo moral y que todo saliera, tapando mi boca para yo no vomitar también.

-¿Derek, estás bien?-

-claro que no, todo va a salir mal, todo por mis estupideces, soy un idiota y ahora lo voy a perder todo-

-pero, ¿qué pasa? ¿Qué hiciste?-

-ese es el maldito problema, no es por lo que hice, es por lo que tengo que hacer, y si lo hago, me arrepentiré de todo como nunca lo he hecho, ¡y todo es por ti!- Derek se levantó del suelo, parecía muy alterado, pero yo no puedo ayudarlo si no me dice lo que pasa...

-Derek, cálmate, cuéntame que está pasando, tal vez pueda ayudarte-

-YA HICISTE SUFICIENTE, ¡ME ENAMORE DE PENDEJO QUE SOY!, eso es todo, perdón,-

-Derek, ¡espera!- se fue, solo me dejo ahí, y yo no sabía si eso había sido una ruptura o solo fue una pelea...

Ahora sí que no sabía que jodidas estaba pasando, necesito recapitular, y para eso, necesito a Gabriel...

Me di una ducha y me puse lo primero que tome, fui directo al cuarto de Gabriel, pero no estaba, entre y escuche unas voces, supongo que son de esas puertas secretas que también tenía mi padre, me hacer que para escuchar, eran Gabriel y creo alguien más...

-¿qué haces aquí?- era Gabriel, soñaba asustado...

-no es obvio, vengo a verte a ti y ver si tienes información importante- esa voz, se me hacía conocida, pero no recuerdo...

-no tengo información para ti, además sabes bien que no eres bienvenido aquí, por favor, vete.-

-¿crees que me iré sin mi hermanito?-

-el no es nada tuyo, se alejó de ustedes, ahora está de nuestro lado- la voz de Gabriel sonaba cada vez más tensa..

-pues claro que está de su lado, ese es su trabajo, él siempre ha sido un marica, pero aun así, nosotros seguimos mandándole-

-¿a qué te refieres Rodrigo, habla claro, Él ya no es ni tu hermano ni tu cómplice, y te lo podemos demostrar-

-Jajajaja, pero claro que lo pueden demostrar, él está siguiendo nuestras órdenes, y cuando logre acercarse a la chica, todo se acabara, así que mantén el ojo abierto-

-pero claro que si-

Se escucharon pasos y cómo pude me metí debajo de la cama, me escondí hasta que escuche que cerraron la puerta, me asomé con cuidado y no había nadie, luego, justo cuando iba a salir, entró un Gabriel muy pero muy enfadado, sacó su teléfono y llamó a alguien.

-más te vale que vengas en este preciso momento-

-¡TE DIGO QUE TRAIGAS TU MALDITO TRASERO PARA ACÁ!-

Colgó y se sentó en su silla, tengo mucha suerte de que la cama tenga un edredón demasiado largo, pasó como media hora y un Derek con ojos rojos y nudillos sangrados entro encambronado.

-ahora que quieres Gabriel-

-¿qué que quiero?, quiero que me explique eso de que sigues trabajando para Rodrigo, ¿cómo?-

-yo no trabajo para él, tú mejor que nadie sabes que lo deje-

-eso no fue lo que me dijeron hoy, por alguna razón Rodrigo vino y me dijo que estas ayudándolos, a cazarla, como puedes, TU hacer eso, se supone se lo prometiste, ¡PROMETISTE CUIDARLA!-

-claro que lo hice, y es lo que estoy haciendo, si me quedo con ella, jamás la dejaran en paz, tengo que alejarla, no puedo más con esto, ¡YA NO SE QUE HACER!- Derek se tiro al piso y comenzó a llorar, quería correr y abrazarlo, odiaba verlo así.

-mira Derek, tu mejor que nadie sabe que es hora de decirle la verdad, ella está lista-

-pero yo no lo estoy, no quiero perderla, no todavía, ella es lo único que me queda y si se va, no tendré de otra que rendirme contra mi padrastro...-

-Derek, lo siento, pero es hora, tienes que hacer que te odie a como dé lugar-

Derek lloro tanto que pensé que se quedaría sin lagrimas, Gabriel estuvo a su lado como un buen padre, así pasó el tiempo hasta que yo quede dormida, cuando desperté, ya no estaba nadie en el cuarto, salí de debajo de la cama y me fui a mi cuarto, ahora sabía algo, pero no sabía cómo encajarlo, es muy claro que están hablando de Rodrigo, y mi conciencia dice que es el mismo que mencionó mi padre, y Derek al parecer está involucrado con él, pero a la vez no, y al parecer, yo estoy en el centro de tiro de una guerra y todo se está llendo a la jodida mierda, ¿que más se me pasa por alto?, a si, Derek planea hacer que lo odie, hay que prepararse mentalmente para no odiarlo, a pesar de que lo que haga sea la mayor estupidez y pendejada que se le ocurra.

Ya que no podía dormir, salí a la calle, camine por un rato pensando en todo lo que había escuchado, no me di cuenta cuando llegue a un baldío, en una esquina vi a alguien caminando hacia mi, no lograba reconocerlo, hasta que se acercó más, era Derek, y parecía borracho, muy borracho.

-¿qué haces aquí?, es peligroso que estés en la calle a estas horas- me tomo del brazo muy fuerte, eso me dejara moretón.

-Derek, ¿estás bien?-

-¿porque ahora esa es tu pregunta favorita?, ¿sí digo que si, me dejaras en paz?-

-Derek, en serio, estas borracho, tranquilízate, discutimos cuando estés sobrio-

Me pude soltar de su agarre, y Derek se quedó estupefacto, con una cara de mierda más horrible que le halla visto.

-Kassidy, lárgate, ¡metete a la casa! No tienes permitido salir-

Hay que aceptarlo, eso sí que me hizo enojar, pero no voy a discutir, Derek está borracho y no le haré fácil su trabajo de hacer que me odie, ya sé que es por mi bien, pero ni él ni yo estaremos completos sin el otro, talvez me vea como una zorra porque ni siquiera lo conozco bien, pero es como si todo lo que hiciéramos nos saliera bien cuando estamos juntos.

Camine hacia la casa, y gire mi cabeza, Derek había empezado a llorar, me acerqué a él y le susurré.

-tranquilo, pase lo que pase, jamás voy a odiarte-

La curiosidad mato al gatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora