Era la temprana tarde del viernes, un día antes del partido correspondiente a los cuartos de final de aquel torneo infantil. Ana, Fernanda y Ashley salían de clases. El grupo de amigas de hallaban saliendo de los muros dirigiéndose a un lugar en el cual se pusieron de acuerdo en ir anteriormente.
— ¿Lyon Café? — preguntó Ashley.
— ¡Sí! Es una de las mejores de la ciudad en mi humilde opinión. — respondía Ana
— Sí que te encanta ese lugar, ¿no?
— La verdad, sí. Además, está cerca de la escuela y siempre tienen algo delicioso. — Ana sonrió mientras hojeaba el menú.
— Bueno, hay que admitir que las papas fritas que sirven allí son increíbles. — comentó Fernanda con entusiasmo.
— ¿Tanto escandalo por unas papas?
— No seas así Ashley, verás que el lugar te va a encantar.Una vez en el local, buscaron una mesa vacía donde sentarse, la gente las veía raro, pues no es normal que un grupo de chiquillas hicieran acto de presencia en un lugar así. Llego una mesera y tomó sus ordenes.
— Espero que no haigan mentido. — dijo Ashley con una mezcla de entusiasmo y extrañeza.
— Oh, tú solo espera. Ja, ja, ja. — se limitó a decir Ana.El tiempo transcurrió y la comida llego. Las tres habían pedido lo mismo, una hamburguesa y papas a la francesa. Ana y Fernanda esperar a ver a Ashley empezar a comer, la expectación era enorme por parte de ellas queriendo ver la primera reacción que tendría a al probar las famosísimas papas del Lyon Café.
— ¿Qué opinas, Ashley? — preguntó Ana.
— Las papas son... grandotas. — Dijo Ashley con los ojos bien abiertos.
— Ándale, prueba una. — dijo Ana mientras tomaba una papa con sus manos y la acercaba a la boca de Ashley . — di "Ahh". Ja, ja, ja.Ashley se sonrojó, pero mordió la papa y en un instante su expresión cambió.
— ¿Y? — preguntó Fernanda con una expectación tal, que su pegaba pequeños brincos en su asiento. — ¿Te gustó?
— ¡Están bien ricas! ¡Quiero más! — respondió Ashley mientras rápidamente tomaba mas y mas papas.
— Te lo dijimos. Sabemos que este lugar está bien padre*.
Padre: En este contexto, "está padre" quiere decir que está genial/chido.Ellas la pasaron bien comiendo y hablando de muchas cosas triviales, entre ellas, como les estaba yendo en clases, etc. Cuando el tema de conversación cambió a algo que a las tres les incumbía.
— Mañana es el gran día, chicas. ¿Cómo creen que nos irá en el partido? — preguntó Ana, con una chispa de emoción en sus ojos.
Fernanda sonrió y respondió con confianza:
— Con la táctica que planeamos, estamos destinadas a brillar en la cancha. Además, tenemos la ventaja de conocernos bien. ¡Vamos a dar lo mejor de nosotras!
— Bueno, bueno, pero, ¿Por que eligieron este lugar para hablar de estrategias? — Exclamo Ashley con una sonrisa en su rostro.
— Es el mejor lugar para planear la victoria. ¿No lo crees, Ashley? Además, las papas fritas son una fuente de inspiración. — respondió Ana con una sonrisa.
— Está bien, estoy dispuesta a darle una oportunidad a este Lyon Café. Pero, jamás pensé que hablaríamos de estrategias. Pero, está bien, ¿Cuál será nuestro enfoque? — preguntó Ashley, uniéndose a la conversación.El trío comenzó a discutir estrategias, compartiendo ideas y opiniones sobre cómo abordarían el partido del día siguiente. Risas, entusiasmo y un lazo fuerte de amistad impregnaban la atmósfera del Lyon Café, mientras las tres amigas se preparaban mentalmente para el desafío que les esperaba. En un momento después alguien mas se les acercaba. Era otra niña
— Hola, ¿puedo unirme a su conversación? Escuché que van a jugar un partido importante. — dijo la niña con un brillo de emoción en sus ojos.
Ana, Fernanda y Ashley intercambiaron miradas amigables antes de invitarla a sentarse.
— ¿Te gusta el futbol también? — preguntó Fernanda a la niña.
— Sí, disfruto mucho al jugarlo. Además, me ayuda a despejarme después de tanta carga por la escuela. — respondió.
— Por cierto, ¿Viniste también por las papas? — le preguntó Ana.
— ¡Ja, ja, ja! No, mis padres trabajan aquí, es el negocio de mi familia. Mi abuelo fundó este restaurante hace años.
— ¡No inventes! —dijo Ana con una expresión incrédula.
— De veras. Aunque, bueno, tampoco esta bonito ver como cocinan y no poder tomar ni un solo pedacito de alguna comida. — le respondió la niña.
— Por cierto, dijiste que jugabas. ¿Eres buena? — le preguntó Ashley.
— Sí, soy defensa.
— Je, no te vayas a enojar, pero siento que podría ganarte. — dijo Ashley alardeando de sus habilidades.La niña solamente sonrió.
— Créeme que solo pocas han logrado pasarme, viendo tu forma de ser, no creo que tú vayas a ser una de esas personas.
El ambiente se volvió tenso en ese instante y las dos combinaban miradas. Pero Ana intervino para intentar calmar las aguas.
— Que pena contigo. Ella siempre se pone así cuando conoce alguien mas que juega futbol.
— No te preocupes, no estoy enojada. — Le respondió
— Por cierto, mi nombre es Ana, la de la gorra es Fernanda y la güerita es Ashley.
— Soy Rosa. Espero verlas por aquí mas a menudo.
— Espera, ¿Dijiste Rosa? ¿de pura casualidad eres Rosa Martínez? — preguntó Fernanda.
— Oh, sí. ¿Cómo lo saben?
— Bueno, investigamos mucho sobre nuestras siguientes rivales y... vamos jugar contra ustedes mañana — le dijo Ana.
— Con que ustedes son las Panteras. No esperaba verlas tan pronto. — Dijo Rosa mientras sonreía.Fue un encuentro inesperado. Pero, no paso de una conversación amistosa. Una vez terminaron de comer, se despidieron y se fueron. El día pasó y llego el momento que esperaban. El partido de los cuartos de final del torneo infantil. Ellas veían frente a ellas no solo la mejor defensa del torneo, si no a alguien que no solo es bien conocida por su talento, sino porque seguramente sepa de primera mano como es cada una. Sin duda, el partido mas complicado de ellas hasta ahora. Empezarán contra oponentes realmente fuertes. ¿Lograrán quedarse con la victoria?
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La Primera Estrella
General FictionAna, una niña de un pintoresco pueblo de México, ha heredado dos pasiones de su familia: el amor por su tierra y una habilidad innata para el fútbol. Desde temprana edad, Ana ha soñado con algo grande: vestir la camiseta de la selección nacional y l...