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Las mejillas de Quackity se pintaron de rosa carmesí mientras veía el pesado de papel, el rubio no pudo aguantar la risa.

Auron los observaba de lejos, no le parecía que ellos estuvieran juntos.

Pensaba que quizá eran celos de que el pelinegro siempre fue como el niño pequeño, el protegido del grupo.

"¿Quizá son celos? Aunque algo no me pinta bien.."- Pensaba este algo preocupado

Cuando salieron al receso, el grupo fue a la cafetería para comprar algo de comida.

Obvio que los dos " casi algo" iban de la mano, hasta que uno de los demás los separó para llevárselo a elegir que quería comer, la verdad era que no querían que estuviera con rubius de esa manera.

"¿Que sucede? Yo ya elegí mí comida"

"Quackity aléjate de rubius por tu propio bien.. créeme, soy tu mejor amigo"- Dijo auron quien buscaba separarlos

El pelinegro no parecía convencido, al instante negó para irse de nuevo con el rubio a por fin poder comer después de la clase pesada de matemáticas.

"¿Cómo buscaremos a Luzu?"- preguntaron Juan y Ari, les gustaba este plan, parecía un juego de una play que habían jugado antes.

Todos se quedaron en un silencio mientras comían, parece que ya no iban a seguir.

Cuando volvían a clase Rubius se chocó con una chica de pelo marrón, flaca y alta tal como el.

"Discúlpame, no te vi.."- dijieron a la vez.

El chico había quedado con la boca abierta, como si hubiera visto una obra de arte pero disimulo rápido, Quackity estaba allí.

Rápido volvieron a clase, cómo era de costumbre el azabache ya estaba sobre pensando sobre lo que había pasado.

¿Quien era esa chica? ¿Por qué se miraron así? ¿Se conocerán ya? Seguro solo es su amiga, no es nada más ¿No?

Pensamientos corrían por su cabeza, no eran nada "oficial" aún, apenas un beso se dieron pero el pelinegro se había ilusionado de mas.

"Comencemos con la clase chicos"


𝘑𝘶𝘨𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘢 𝘭𝘢𝘴 𝘦𝘴𝘤𝘰𝘯𝘥𝘪𝘥𝘢𝘴 - 𝘓𝘶𝘤𝘬𝘪𝘵𝘺 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora