Jujutsu Kaisen -o͟n͟e͟ s͟h͟o͟t͟s͟ (+18)

01

*Ding* el sonido de una grabación de video comenzó a sonar desde el teléfono de Gojo, "Está bien, está bien, ¿di eso de nuevo por mí? ~" El hombre de cabello blanco arrulló con arrogancia.

“¡Gojo, imbécil! Uf, olvídalo, fui estúpido al preguntarte”. Levantaste los brazos en señal de derrota, poniendo los ojos en blanco mientras te girabas para salir de su habitación, avergonzado.

"Noooonono", gritó, el timbre sonó de nuevo, finalizando el video, "Lo siento, no debería molestarte así ~" El hombre estaba de repente detrás de ti, envolviendo sus brazos alrededor de tu torso y te meciendo de lado a lado. "Perdóname, me equivoqué, ¿vale?" trató de razonar, realmente no quería arruinar esto.

Después de todo, su linda amiguita acababa de irrumpir en su habitación y confesar que nunca antes se había tocado y que quería un poco de orientación; Sabiendo que Gojo tenía cierta experiencia con mujeres, acudiste a él en busca de ayuda.

"Para compensarte, ni siquiera te haré pagar por esta sesión, ¿qué tal eso?" Él sonrió molesto detrás de ti, asomando la cabeza a un lado para que pudieras ver su expresión a través de tu visión periférica.

"¿Qué eres un terapeuta sexual?" Te reíste, haciéndolo suspirar de alivio. "Seré cualquier cosa que necesites que sea~" movió las cejas, haciendo que te quitaras su pesado cuerpo de encima con falso disgusto.

“Entonces, ¿eres un aprendiz visual? ¿O más manos a la obra? Preguntó cuando giraste tu cuerpo para mirarlo una vez más, dejando que te arrastrara hasta sentarte al final de su cama.

"No estoy uh... realmente seguro cuando se trata de esto". confesaste. "No estás seguro de mucho, ¿eh?" Bromeó, haciéndote golpearle ligeramente el hombro, "jaja, pronto sabrás si eres un aprendiz práctico o no". dijo ambiguamente.

Pero por alguna razón le confiaste esto a Gojo...

...lo cual podría haber sido un error.

No anticipaste lo irritable que te pondría esta situación. Siempre has encontrado atractivo el gojo; quién no lo hizo; pero viniste a él porque nunca antes había pasado nada entre ustedes dos, eran amigos, estabas seguro de que la atmósfera no se sentiría tan embarazosa pero—

"Este es tu clítoris, quieres hacer pequeños círculos así con uno o dos dedos", habló el hombre de cabello blanco, actualmente sosteniendo media naranja en una mano y frotando círculos apretados en la sugerente hendidura de la fruta con el otro.

Gojo estaba sentado frente a ti en su silla mientras tú te sentabas en la cama, con las piernas abiertas mientras sostenía la fruta frente a él y te daba instrucciones sobre cómo hacerlo.

"Tampoco quiero ir demasiado rápido, quiero ejercitarte un poco". Habló, mirándote de vez en cuando para asegurarse de que estuvieras prestando atención; Después de todo, esto era importante.
"Si empiezas a sentirte demasiado necesitado, frota tus dedos aquí-" arrastró sus largos dedos hasta el centro de la fruta, presumiblemente donde estaría la abertura de tu coño.

Frotó sus dedos en el exterior de la hendidura, en un movimiento de "ven aquí"; no insertar los dedos; simplemente acariciándolos por fuera, frotándolos ocasionalmente hacia adelante y hacia atrás sobre la abertura.

"¿Estás prestando atención?" - Comprobó, sacándote de tu estupor mientras tus ojos se posaban en los suyos, esperabas que el sonrojo en tu rostro no fuera tan evidente como se sentía. Simplemente asentiste brevemente ante su pregunta, sin confiar en que tu voz sonara firme en este momento.

Cuanto más y más duraba esto, más y más necesitado te sentíamos entre tus propias piernas, un calor crecía entre ellas y estabas rezando para que Gojo no se hubiera dado cuenta de que tus piernas estaban cruzadas no para comodidad sino porque habías estado apretándolos constantemente y frotando tu coño contra la puntada de mezclilla áspera que tus jeans hicieron por un tiempo.