17: ❝Zona Cero.❞

1.1K 235 55
                                    

Se le conoce como Zona Cero al terreno delimitado en que estalla una bomba, o es sede de algún ataque nuclear. Así como cualquier espacio donde precede cualquier tragedia, o devaste total; tal es el caso, con las bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki, como también el ataque a las torres gemelas.

La zona cero, es terreno donde sucede la tragedia. Y no hay vuelta atrás.

Cuando acumulas una serie de mentiras, estas tienden a:

1. Desbordarse.

2. Estallar.

En el mejor de los casos, puedes crear una consciencia para evitar la catástrofe. En el peor, esperas hasta que la presión consuma esa red de flamables engaños.

Todo inició a finales del verano, exactamente 3 meses después de su boda. Horas después de que JiSung pidiera el divorcio. La chillona alarma resuena en los oídos del rubio, quien gruñe en protesta al sentir sus sienes ser taladradas. La migraña saludándole apenas despega los párpados, a pasos pesados abandona su preciada cama en aquella alcoba de invitados que armó de último momento—donde ha estado durmiendo los últimos días—, mejor que el sofá, por cierto.

Sus pesados pasos resbalan a través del suelo, hasta que se abre camino al baño del cuarto. Lo primero que atina a hacer es observar su reflejo; nota entonces párpados hinchados, piel sin vida, ojos opacos, profundas ojeras, labios resecos y cabello cenizo.

Ignora el golpe a su orgullo cuando remoja su rostro con agua fría, esperando despertar antes de iniciar la rutina diaria.

4:56 am está ingresando al vehículo que lo llevará hasta la mansión, conduce con las ventanas bajas. Sintiendo la dulce brisa veraniega presumirle el rocío matutino.

Es delicioso, refrescante. Así olía la libertad.

Cada tanto mira su reflejo por el retrovisor, comprobando que su maquillaje está bien aplicado. Su piel ahora tiene color, sus pómulos rubor “natural” y sus labios cierto brillo.

Está mejor, mucho mejor.

6:53 am.

Aparca frente a la mansión, dando una honda respiración antes de abandonar el coche e iniciar con su jornada. Saluda en medio de una sonrisa a cada uno de los empleados dentro, yendo directamente al despacho para iniciar sus labores.

Pronto tendría una reunión con el abogado que le enseñaría ciertos manejos en la manada. Debería alistarse.

A pesar de haber tomado sus medicamentos, siente cierto malestar; puesto que, últimamente, las píldoras no son suficientes. Únicamente aminoran los dolores, es tétrico saber cómo se ha acostumbrado.

9:23 am.

Su madre le ofrece el desayuno, oferta que declina, prefiere continuar con aquellos documentos para así irse temprano a casa. Nadie cuestiona nada, con una sonrisa orgullosa le dejan continuar.

La jornada es algo de lo mismo, no hay reales cambios en sus acciones.

10:40 am.

El hijo alfa de los Han llega a donde los recién casados viven, esperando visitar a su hermanito para darle algunas noticias. JiSung abre la puerta con confusión, mirando sorprendido el rostro familiar al otro lado.

—¡Hyung!—no duda en lanzarse a sus brazos, sonriendo enormemente de verlo. El aroma a vainilla parece neutralizarse; incluso si su hermano nota las anomalías aromáticas de aquella vivienda.

❝Amour Plastique❞『•MinSung•』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora