03: ❝Esencia de Coco.❞

1.5K 274 29
                                    

Luna de miel, debían estar bromeando.

¡Dos meses en un lugar que aún desconocía, junto al alfa más infantil del mundo entero!

JiSung se enteró hace poco más de tres minutos que, sus ahora suegros, les darían como regalo de bodas el viaje de la luna de miel.

¿Lo peor? MinHo no había debatido nada, absolutamente nada.

Dos semanas pasaron desde la última vez que vio a Felix. Comenzaba a perder la paciencia; su vida se resumía en buscar trajes, flores, adornos, sillas, banquetes y mil cosas más.

Iba a explotar, ¿por qué aceptó?

—Oye, ¿estás bien? — y esa maldita voz. Llevaba un mes de conocerle, pero para ese punto, comienza a odiarlo.

El alfa junto a él era sumamente callado, y extraño. La mayor parte del día jugaba videojuegos, comía paletas o solo se hallaba masticando chicle.

—Llevo tres días durmiendo en tu casa, porque terminamos muy tarde de ver todo lo relacionado con la boda —su tono es calmo al inicio, pero termina por perder los estribos, cinco segundos más tarde—. ¡No estoy bien!

El alfa retrocede un par de pasos, sin saber cómo manejar tal situación.

—Lo lamento, no pensé que mamá se pondría tan emocionada con este asunto —hay sinceridad en cada palabra, consigue calmar al menos un poco al omega—. ¿Quieres ver a tu beta?

JiSung asiente, mordiéndose el labio inferior; triste. Al alfa no le gusta la sensación de aquello.

—Mañana distraeré a mamá, así podrás ir a verlo — MinHo no piensa mucho cuando despeina amistosamente el flequillo del omega, para dejarle solo, otra vez. Quiere darle algo de privacidad.

JiSung frunce el ceño, incómodo con esa sensación que le cosquillea en el fondo del estómago.

El futuro alfa de la manada no está particularmente emocionado con la boda; sin embargo, puede entender la molestia del castaño. Él no tiene nada que perder uniendo su vida al omega. JiSung, sí.

—¿Puedes venir? Mamá quiere decirnos algo —interrumpe nuevamente el alfa, segundos después de que se había marchado. Más calmado, el omega accede sin rechistar nada.

La señora Lee ha sido demasiado dulce con él; incluso si odia admitirlo, esa familia hace todo lo posible por hacerle sentir cómodo. Cuando JiSung se detiene al final de la escalera, la madre de MinHo cuelga la llamada que atendía.

—JiSunggie, me gustaría que fueras este fin de semana a la casa fronteriza con MinMin, así podrán acoplarse antes de la boda—los dos chicos fruncen el ceño ante tal orden, disfrazada de sugerencia.
       
—¿Acoplarse? — irrumpe MinHo, evitando que el propio omega lo haga.

Su madre asiente.

—Cariño, JiSunggie también vivirá ahí, al menos un año. Es justo que ayude a que el lugar luzca acogedor para él. Las siguientes semanas serán ocupadas, así que deberían ir... mañana—una nueva llamada entra al teléfono de la mujer que organiza su boda, interrumpiéndola, y termina por excusarse antes de atender.

¿Más ocupados? JiSung se va a desmayar.

—Lo siento, no lo sabía —murmura entonces, agobiado.                          

—Está bien, no importa

—Haré que nos dejen partir al atardecer, puedes ir en la mañana. Con permiso —MinHo le rodea, subiendo a su habitación en un intento por mantener la compostura. Su madre va a volverlo loco, ¿tan difícil era solo casarse con? Al parecer, sí.

❝Amour Plastique❞『•MinSung•』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora