Capítulo 10.

447 25 0
                                    


Harley.

Espero tras la puerta de cristal del café donde trabajo. Son cerca de las 10:00 pm y el firmamento ya no luce ninguna luz, ninguna además de las estrellas difusas que poco se ven desde donde me encuentro.

Por suerte, Jules no me ha pedido quedarme de nuevo para cerrar; se lo ha pedido a George, quien tuvo que aceptar sin titubeo, debido a la cantidad de favores adeudados que Jules le recitó casi de memoria; supongo que ira turnándonos a ambos esta tarea mientras ella sale despreocupada y temprano del local, por las 'situaciones de emergencia' que ocurren casualmente a la misma hora. Ni si quiera voy a preguntarle.

Al final, accedí a que Harry me acompañase de vuelta los días que suelo salir más tarde. Y aunque no me parece una buena idea, al poner en una balanza a aquel hombre atemorizante del viernes, y a Harry, el acosador enigmático que escasamente conozco...bueno, ahora mismo parecen tener el mismo peso.

Mis pensamientos son ahuyentados cuando la imagen del susodicho aparece tras el cristal, mirándome con apenas una media sonrisa torcida. Abro la puerta de inmediato, reaccionando de mi trance.

— ¿Lista? — Dice cuando nos encontramos de frente. Su tono es extraño, y sus ojos parecen no dejar salir ningún estibo de emoción, como una armadura.

Asiento.

Nuestros pasos son tensos, siendo estos los únicos que llenan el silencio tajante de la larga acera. No puedo evitar pensar en lo tardío que se convertido de pronto el trayecto, y apenas llevamos 2 cuadras.

Comienzo a contar las grietas del suelo, sólo para mantenerme distraída y ajena al misterioso chico que camina a la par de mí. Pienso en lo que pudo haber causado cada una de ellas, su constante uso, algún objeto pesado cayendo sobre él y agrietándolo, sismos tal vez... Esto no está funcionando.

— ¿Por qué te mudaste sola hasta aquí? — Pregunta repentinamente mientras inserta su mirada en mi rostro. Ni si quiera se esfuerza en sonar casual, su cuestionamiento ha sido demandante.

— Yo... —No le diría que fui echada de la casa de mis padres ¿O sí?, suena patético. —...quería comenzar a ser autosuficiente. —No es una mentira en su totalidad, sólo no 'quería', me obligaron. Palabras más, palabras menos.

Asiente con una sonrisa irónica en el rostro, volviendo su vista al frente. No entiendo su gesto, luce como si acabara de decir algo erróneo, algo estúpido; luce incluso perdido.

— ¿Y tú? —Las palabras se escapan de mi boca por inercia; y me retracto de inmediato al notar su ceño más fruncido que nunca, su mandíbula encajada con tal brutalidad que dos bloques gigantescos de metal frío, y sus ojos cristalizados sutilmente.

Siento que he presionado un botón que no debí oprimir, siento presenciar el accionamiento de un volcán a punto de explotar. Y sé que quiero correr lo más lejos de aquí, de él, antes de que estalle.

Pero no lo hago. Me limito a mirarlo con pánico, entretanto mi cabeza busca con desesperación alguna manera de calmarlo, sin éxito.

— Harry —Intento, tocando apenas su brazo. Él vuelve su rostro hacia mí con rudeza, encontrándose nuestras pupilas; las suyas parecen arder en llamas. — Harry... —Reitero con titubeo. Presencio la cantidad abismal de sentimientos cruzando por su verdosa mirada, como estrellas fugaces, como aves huyendo hacia el horizonte.

Pronto, Harry retira sus ojos de los míos, negando con la cabeza mientras suelta en un susurro dicho con sólo su aliento: —Lo siento— Me sorprende la rapidez con la que ha recuperado la compostura; ya que, en menos de un minuto, nos encontramos caminando sobre el asfalto mojado de nuevo, en silencio, como si nada hubiera sucedido más que la larga y tediosa caminata que supone llegar hasta la estación de autobuses.

. . .

Hemos llegado al edificio más rápido de lo que esperaba; sin ningún inconveniente, o bueno, casi sin ningún inconveniente. Al menos ese hombre amenazante no se ha aparecido de nuevo, supongo que ese era el punto.

— Gracias. —Suelto una vez que nos encontramos frente mi apartamento.

Asiente.

— No hay de que —Medio sonrío antes de introducir la llave en el cerrojo, abrir la puerta y disponerme a entrar. — Harley —Giro sobre mis talones para encararlo, y lo miro.

Su expresión es prolija, intensa. — Mañana te acompañaré de nuevo —Afirma. Pero de nuevo, sé con certeza, que eso no es lo que ha querido decir, no es lo que gritan sus ojos.

— Seguro —Respondo, siguiendo el libreto que nos hemos creado, ignorando en nuestros rostros lo que dice lo contrario.

══════════

Hola! 

El capítulo es un poco corto ;/ Pero aún así, espero que les haya gustado. Voten y dejen un señor comentario, que eso me hace feliz :DD xd 

Pásense también por las 2 nuevas propuestas:

• The well (El trailer en multimedia)

• Beautiful Nightmare

Les agradecería mucho que me dijesen su más sincera opinión ;)

Nos leemos luego :)

The Boxer [H.S. au]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora