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V.

Misión: Primera aparición en familia.

Un tic nervioso apareció en su ojo, estresado por la situación. Una diminuta fisura se apareció en su ceja, como un gemelo tic de una mala película de horror.

Agobiado por su situación, se peinó el cabello hacia atrás para prepararse, intentando preservar su control mental, mantener la cordura con su hija falsa, aunque por supuesto su lobo lo ayudaba demás, se apoderaba de él y lo controlaba por completo.

Fastidio.

—Sora —lanzó un suspiró agotado—, prometí que no te obligare a nada, pero esto es importante —apretó los labios—. Solo te digo que cuando haya gente me digas papá ya después en privado puedes tratarme como gustes, ¿okey?

—Pero, ¿por qué señor Jungkook? —cuestionó ladeando la cabeza.

Mordió su mejilla interna, apretando con todas sus fuerzas la tela de su pantalón, refrenando la rabia y la ira. Intentó no arremeter con violencia contra el alfa que a su lado.

—Porque somos una familia —sonrío falso enchinando los ojos.

—Ya pero, ¿por qué?

Su ojo izquierdo volvió a temblar.

Taehyung por su lado río entrenido por la situación. Se removió en el asiento del copiloto conteniendo una estruendosa carcajada, si se termina riendo, posiblemente acabe golpeado nuevamente por el agresivo omega.

—¿Te parece gracioso, idiota? —se giró encararando a Taehyung—¿Qué le dijiste en el avión? fue sentada a tu lado todo el camino.

—Nada —fingió demencia ignorando la larga charla que tuvo con la cachorra con sobornos de por medio.

—Algo le dijiste —frunció las cejas—. La pusiste en mi contra.

—Amorcito, inventas cosas —bromeó agitando la mano con desinterés a le vez mirando hacia al frente hacía los grandes árboles.

Jungkook arrugó la nariz sintiéndose molestó por aquel comentario e incandose en el asiento del conductor sin una pizca de cuidado, y como pudo en la estrechez del auto estiró su cuerpo sujetando a Taehyung por la sudadera para después dirigir sus manos directo hacia el cuello del alfa apretó ligeramente dándole una mirada de rabia. No apretó más porque no quería tener un alfa muerto en el auto.

Para Taehyung, la reacción de Jungkook fue inesperada. Se preparó para un golpe, pero se sorprendió que lo tomara de aquella manera. La sorpresa lo dejó sin aliento, mientras sentía los dedos de Jungkook apretando cada vez más fuerte. No tenía opción para pelear o defenderse de forma adecuada por lo que esbozó una sonrisa molestando mucho más a Jungkook.

—¡Déjate de esas mierda, alfa imbécil! —expresó furioso.

—Ay, Jungkook no sabía de esos fetiches tuyos —dijo pícaro encontrando la situación para fastidiarlo—. No te preocupes, aquí esta tu alfa para complacer cada uno de ellos.

Se señaló así mismo con su dedo pulgar.

—¡Cállate! —chilló rechinando los dientes.

Love is war | KTH & JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora