• ༄ 13 ༄ •

87 17 22
                                    

El baboso de su amigo Seungmin lo llamó esa mañana para decirle que iba a acompañar a Hyunjin al aeropuerto para despedir a Felix (el ex).

— ¡Qué vergüenza, Kim Seungmin!

— ¡Pero es mi amigo ahora!

— ¡Fuiste a una guerra, te vestí y maquillé para eso! ¿Ahora me dices que se hicieron amigos? ¿Qué mierda?

Se burló de su mejor amigo y le colgó cuando iba a defenderse. Continuó riéndose cuando se puso de pie y se dirigió a la ventana de la sala con su taza de café en mano.

— Tu corazón es tan puro, Seung-tonto — comentó y le dió un sorbo a su bebida. — En tu lugar le hubiera dado un beso con lengua a Hyunjin en la cara de su ex. Me haces sentir como si fuera un degenerado. — suspiró y de repente pensó en Minho. No le había respondido su último mensaje desde la noche anterior. Quiso suponer que seguía durmiendo, la verdad es que no quería verse intenso. No quería alejarlo ni asustarlo. La última vez que se vieron acordaron volver a verse en cierta fecha, que era exactamente mañana. Pensar en eso le generaba ansiedad, pero al menos con él se sentía cómodo, como si hubiera estado a punto de perderse a sí mismo hasta que lo conoció. — Mierda, sigo siendo muy intenso.

En la tarde Seungmin volvió. Se dieron un breve saludo, luego Kim se metió a la ducha, Jeongin lo siguió, se cruzó de brazos y se apoyó en el marco de la puerta.

— ¿Cómo te fue?

— Todo bien.

La respuesta fue tan simple y con tono dubitativo, que Jeongin sentía que algo más estaba pasando por la cabeza de su amigo.

— No me mientas.

— Ey, yo jamás te miento. Simplemente nos despedimos de Felix, luego Hyunjin me trajo en su auto hasta aquí y... ¿sabías que Chan y Changbin volverán a irse de viaje?

Por ahí iba la cosa.

— Bien por ellos.

— Sí, pero... eso me dejó pensando.

"¡Lo sabía!"

— ¿En qué?

— En el dinero. — de repente el agua dejó de caer dentro de la ducha. — El dinero es realmente poderoso. Puedes ir a donde quieras y hacer lo que quieras, cuándo y cómo se te plazca. Nuestros amigos nacieron en cunas de oro, incluso Hyunjin y el chico con el que sales. — suspiró — Siento que en el futuro Hyunjin querrá hacer muchas cosas conmigo, pero en varias ocasiones no me va a alcanzar y entonces él se ofrecerá a pagarme todo, me sentiré como un parásito en su vida y su familia me va a odiar.

— No es justo para ti que pienses así.

— Es inevitable, Jeongin. Y sé que has pensado en eso. Por la familia de los chicos ricos con los que has salido es que ninguna de tus relaciones ha funcionado como te hubiera gustado. ¿Me pasará igual? ¿La familia Hwang hará algo para que deje a Hyunjin? ¿O crees que me amenacen a mí o a mi familia? ¿Qué tan lejos pueden llegar para que no estemos juntos?

— Deja de ser ridículo. — lo regañó, pero aun así no podía negar que sí había pensado en ello. — Esta no es una novela.

— Tienes razón. — Seungmin pareció sonreír — Me preocupo por nada. No hay razón en el mundo que me haga dejar a mi principito. — Jeongin abrió la boca, pero la cerró de inmediato. Ni siquiera sabía qué decir. — Ahora vete, que ya termino de bañarme.

— Bien.

— Bien

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Primera hoja de otoño 🍁| MINJEONGWhere stories live. Discover now