Capitulo 2 Un nuevo hogar

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Me despedí de mi familia y me subí al carruaje que tenían preparado, era hora de irme y vivir en otra casa como una mujer casada. El príncipe no quiso estar en el mismo carruaje, así que se fue en otro, era lo mejor yo tampoco quería su compañía.

El carruaje avanzó dejando atrás la multitud, miré por la ventana admirando el paisaje, tomaba casi 6 días llegar, sería un largo viaje y cansado.

El carruaje hizo unas cuantas paradas para descansar un poco y seguir el camino, durante el viaje la pasé durmiendo todo el tiempo y comiendo un poco.

Después de seis largos dias, finalmente llegué a la mansión, como ya era media noche hacía demasiado frío y había una gran ventisca de nieve.

Baje del carruaje adolorida al pasar mucho tiempo viajando. El frío viento golpeó mi cuerpo haciendo que empezará a temblar, rápidamente los sirvientes me dieron una capa y me guiaron adentro.

Los empleados abrieron las puertas, al entrar todo se veía muy iluminado y elegante, el interior también era muy cálido.

Se acercó el mayordomo para recibirme y saludarme con respeto.

-Bienvenida excelencia, me alegra que haya llegado a salvo, yo soy Rodrigo y estoy para servirle ¿quiere que le preparemos un baño caliente o prefiere cenar primero?

-Tomaré un baño primero y cenaré en mi habitación.

-Muy bien.

-¿El príncipe ya está aquí?

-Todavía no ha llegado, excelencia.

-Perfecto, estaremos en habitaciones separadas, no compartiré habitación con él. - dije directa.

-Como desee excelencia, la doncella la acompañara. - dijo servicial.

Una doncella me saludo cortésmente.

-Buenas noches excelencia, soy Mary, yo la acompañaré a su habitación.

Seguí a la doncella y admiré la mansión, era enorme, estaba muy bien amueblada y decorada, no estaba mal.

-Esta es su habitación, excelencia.

La habitación también era cómoda y este lugar podría agradarme si no fuera por la persona con quien la tengo que compartir.

No sé si pueda convivir con una persona así, sé que yo fui la primera en decir algo indebido, pero fue sin querer, él no tenía por qué vengarse de esa manera, yo me habría disculpado sinceramente si no me hubiera dicho eso, como una mujer y su esposa tenía que respetarme y no dejarme en ridículo ante todos.

Me sumergí en la bañera que la doncella había preparado para mí, suspiré, había sido un día largo, después tendría que arreglármelas para tratar con ese tipo.

Después del baño, los empleados me trajeron la cena, todo se miraba delicioso, el estofado, pan recién horneado y el vino, sabían exquisito. Cuando mi estómago se llenó con rica comida quedé satisfecha.

Mientras reposaba y descansaba, tomé un libro del estante para leer, después de un rato, el sueño se apoderó de mí y decidí acostarme en la cama para dormir. Cuando toque la suave cama, el sueño llegó rápidamente.

***

Al día siguiente me desperté temprano y me recibió una fría mañana, que llegaba hasta los huesos, no estaba acostumbrada a climas tan helados.

Las doncellas entreron a mi habitacion, prepararon agua tibia para lavar mi cara, también peinaron mi cabello habilidosamente.

-Excelencia, su cabello necesita un cuidado especial, ¿Quiere que le demos un tratamiento?

Un heredero y linaje Donde viven las historias. Descúbrelo ahora