Un heredero y linaje

Capitulo 8 Conocerse más

Cecilia entró a la oficina con una bandeja llena de comida.

-Es hora de desayunar, excelencia.

-Genial, moría de hambre.

Me acerqué a la mesa donde Cecilia dejó la charola.

Mientras tomaba un pedazo de pan y lo untaba con mantequilla, Cecilia terminaba de arreglar la mesa para la comida.

-Oh sí, Excelencia, el comandante de los caballeros me dijo que el duque pregunta si está libre más tarde para cenar juntos.

Saque el pan de mi boca y mire a Cecilia extrañada.

-¿El duque? ¿Mi esposo me está invitando a cenar? - repetí para aclarar.

-Si, excelencia.

Bastián y yo casi nunca comemos juntos, supongo que quiere hablar de lo que ocurrió anoche. de repente me empecé a sentir ansiosa, lo que sucedió ayer en la noche me tiene avergonzada, mi cara se sentía caliente de repente al recordarlo. En serio quería hablar de eso, cómo podía ser tan descarado.

-¿Qué respuesta le doy, Excelencia?

No podía rechazar su invitación, esto es algo que teníamos que aclarar porque era nuestro deber.

-Esta bien, dile que lo veré en la cena.

-De acuerdo, excelencia.

***

Terminé mi trabajo y mis demás pendientes, al caer la noche, me dirigí hacia el comedor para reunirme con Bastián. Me retrasé 7 minutos de la hora acordada, ya que hoy fue un día ocupado. Llegué hasta la sala del comedor y los guardias abrieron las puertas.

-Lamento el retraso, el trabajo tomó más tiempo.

Bastián se encontraba sentado y desvió su vista de los documentos que estaba leyendo.

-Esta bien, solo fueron unos minutos y ya que estás aquí podemos empezar.

Se levantó y tomó la silla para ofrecerme asiento, su gesto me dejó impresionada no esperaba que fuera tan atento.

-Gracias. - le agradecí de vuelta y me senté.

Después los empleados, llegaron con charolas llenas de comida, trajeron frutas, pan y diferentes carnes.

-No sabia que comida era tu favorita, pero tu secretaria me dijo que eras de buen comer y que casi no eres quisquillosa.

-Esta bien, todo se ve delicioso.

Tome un trozo de carne y le di un gran mordisco, sabía muy bien, tenia tiempo que no cenaba así, casi no usamos el comedor. Mientras disfrutaba de mi comida, note que Dean me estaba viendo fijamente.

-¿Qué sucede?

Bastián salió de su trance sorprendido.

-No yo..., solo...es bueno que te haya gustado la comida.

-Ah sí, bueno.

Estaba siendo muy amable esta noche, tal vez no sabe cómo comportarse después de lo que pasó.

-Bien entonces, ¿a qué se debe tu invitación?

Suspiró antes de responder.

-Yo quería disculparme por lo de anoche, Emma lo siento no quería que te sintieras incómoda.

Su disculpa parecía sincera, se notaba arrepentido, Bastián es conocido por ser un caballero fuerte y frío, pero también es conocido por sus valores y honestidad, por eso los caballeros lo siguen y respetan.

-Esta bien, entiendo, solo estaba sorprendida, ese fue...mi primer beso y reaccione de esa forma.

-Si...y es por eso, que quiero hablar contigo, al parecer va ser difícil, hacer algo así para nosotros y sugiero que lo mejor será acostumbrarnos, tal vez pasar más tiempo juntos, ¿que opinas?

Tenía razón, sería mejor primero convivir más para que no sea tan incomodo cuando estemos cerca.

-Estoy de acuerdo, pero como pasaremos tiempo juntos, si casi siempre estamos ocupados.

Cortó en rebanadas la carne y la puso en mi plato, la carne se veía muy suave.

-Bueno podemos, desayunar o cenar juntos si estamos desocupados a esa hora y también podemos dormir juntos, no tenemos que hacer nada solo compartir la misma cama para acostumbrarnos a estar a esa distancia.

-Eso...

-Claro, si tu estas de acuerdo.

-No, está bien, mañana podemos dormir en mi habitación, pero no vamos a poder comer juntos, mañana saldré de la mansión, tengo unos asuntos que hacer.

-Me parece bien.

Cortó más carne para mi.

-No esperaba esta atención de parte tuya.

No habíamos compartido una cena juntos, era una situación nueva.

-¿A qué te refieres? eres mi esposa y nunca te he tratado mal. - dijo disgustado.

-Si, bueno es solo que no sabia que serias asi.

-Sabes, hay muchas cosas que no sabes de mi.

-Lo se, y tu tampoco de mi. - sonreí con gracia.

Bastián tomó su copa y bebió un trago de su vino.

-Entonces es hora de darnos la oportunidad de conocernos mejor, hemos estado distanciados, pero en serio quiero conocer mas de ti Emma.

Sus palabras parecían sinceras y su pequeña sonrisa demostraba que estaba bien con eso.

-Entonces estaré a tu cuidado, querido. - dije divertida.

Le tendí la mano como un gesto de mi amistad. Le pareció divertida mi acción y estrechó su mano con la mía.

-También cuida muy bien de mi, querida.