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Damon.

Estar sentado acá es un fastidio, escuchar a los profesores lo es aún más. Aunque odie estar acá, lo necesito, tengo que recordarme a cada rato la razón por al que sigo aguantando esto. Y es eso lo que me hace querer seguir. Eso y tener el conocimiento y poder necesario para acabar con mi padre.

—Damon...—La rubia de atrás me toca el hombro.

—¿Qué quieres Tessa?—pregunto totalmente aburrido.

—Ese no es mi nombre... Me llamo...—Intenta explicar.

¿Ella no es Tessa?

Bueno.

Ni que fuese muy importante.

Yo ruedo los ojos, sin ocultar mi fastidio, dándole una clara señal de que su presencia no es bien recibida a mi lado.

No es una chica con la que me gustaría hablar, es cierto que es linda, pero nada más. No es interesante, no logra despertar mi atención como lo hizo ella una vez. Es solo rubia, con buen cuerpo, pero estoy seguro que en su cerebro no hay nada. Y no porque sea rubia. Es porque realmente en clase ha demostrado ser totalmente hueca.

Ella no me interesa.

—Solo quería saber sí...—Sigue hablando Pero su voz se ve opacada por otra.

Al parecer una chica ha llegado atrasada y el profesor no la quiere dejar entrar.

Patética.

No soy fanático de esta clase. Pero si del control, y odio la impuntualidad.

—¡Pero si le dije que era urgente!—Alega.—Mi hermano estaba...

—¡Señorita!—El profesor golpea la mesa—Sabe que a mi clase se entra a tiempo o no se entra, eso ya lo sabe, así que retírese. Sus temas privados se los guarda.

—No puede hacer eso. Era un caso de vida o muerte.

—Puedo y lo haré, si no se va ahora mismo...

—¡Bien! Me voy, pero volveré.—Lo señala con el dedo y el profesor la ignora.—Tiene que ir con cuidado por la vida, puede que algún día se meta a un club y saque sus trapos sucios.—Dice a toda voz.

Suelto una pequeña carcajada cuando veo la expresión del profesor. No sé que pase entre ellos, Pero parece ser que ella sabe algo que lo puede perjudicar.

Su voz me recuerda mucho a una persona del pasado.

No sé quien es, pero definitivamente es alguien complicada, no me gustaría ser su amigo, de hecho, creo que nadie de acá le gustaría ser su amigo. Por su carácter da mucho que pensar.

Y como ya se sabe, todo entra por la vista.

—Damon—escucho el susurro de Edgar.—Te tengo una invitación.

—Ahora no Edgar.

—Es que es algo nuevo... Te lo prometo no te vas a arrepentir.

—Edgar te dije que...

—Señor Ramírez y señor Acevedo salgan de la clase por favor.—Llaman nuestra atención.

Mierda.

Le dedico una mirada mortal a Edgar y me paro sin la intención de discutir con el viejo.

Es así de estricto. Parece como si estuviéramos en un jodido ejército militar.

Salgo de la sala a paso firme.

Tengo libre, así que tal vez debería hacerle caso al idiota de Edgar. Quien ahora se encuentra atrás de mí, siguiendo mis pasos.

—Tengo dos invitaciones a un club nocturno.—habla emocionado.

—Jódete, no quiero ir a un jodido club, de seguro irán puros adolescentes cachondos.

—Estúpido, no es esa clase de club, es uno de sexo... o algo así, créeme que te gustará, ayer fui y dios, es lo mejor.—suela un gemido fingido.

—No quiero follar con putas hoy.—Me quejo.—No estoy de humor. Después de la paliza que me ha dado mi padre hace unos días estoy adolorido.—Le recuerdo lo sucedido.

A el le cuento todo.

Sabe lo que pasa en mi vida. Conoce a mi padre y sabe cómo es.

—No es necesario follar, hay muchas opciones que te pueden hacer sentir maravillas y neutralizar el dolor que sientes.

—Llévame a esa mierda, pero si no me gusta, te tendré como sirviente por tres días.—contesto.—Y tendrás que someterte conmigo a los castigos de mi padre.

—Con todo respeto Pero ese viejo de mierda es todo un hijo de puta.—Comenta afligido—Y créeme, esta mierda te encantará.


(Actualizado)

12/07/2024♡

Dominame ✓ [Terminada, primer Libro]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora