10 - El bar

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Sentado en su silla con los pies apoyados en el escritorio, Leon leía la primera parte del informe que le había hecho Sherry. Las órdenes eran que ella hiciera un primer reporte sobre cómo se habían destacado los cadetes hasta que terminaran las pruebas, que tendría que haber sido días después, pero pidió hacer una excepción para tener una primera imágen sobre las condiciones en las que se encontraban los cadetes.

Mientras leía los resultados había algunos que le llamaron la anteción. El primero fue John Perlman, quien había demostrado un nivel de precisión en las pruebas de tiro que no coincidían con el perfil que había leído sobre él. Claro estaba que sabía de antemano de que había falsificado sus datos, pero no salía de su asombro.

El otro resultado fue el de Claire. Él la conocía bien e incluso tenía conocimiento de primera mano de que ella era hábil tiradora y lo que le había mostrado Sherry en las pruebas parecía ser de una pelirroja totalmente diferente a la de siempre.

«Me pregunto qué le habrá pasado», pensó Leon. La única conclusión a la que llegaba era que estaba distraída.

La paz que reinaba en su oficina fue abruptamente interrumpida cuando alguien abrió con fuerza la puerta. Levantó la cabeza de inmediato y su mirada se encontró con una cabellera roja que le pertenecía a una mujer que tenía la mirada clavada en él. Leon hizo un escaneo rápido de la mujer y notó que tenía la ropa un tanto desalineada, el rostro estaba algo mojado y el pelo húmedo.

«Debió haberse duchado y luego vino a mi oficina inmediatamente después», concluyó el agente.

—¿Te crees gracioso?— preguntó Claire furiosa.

—Me temo que no sé de qué estás hablando— le dijo totalmente calmado Kennedy, lo que hizo enfurecer aún más a Claire. Ella se acercó y apoyó con fuerza las mano en el escritorio.

—No trates de salir de esta como si no supieras, ya me fastidiaste suficiente por hoy.

—¿Te refieres a la evaluación que tuviste más temprano? Sherry me mandó los resultados y no parecen muy alentadores, lo que reafirma mi decisión— le comentaba mientras se levantaba de su asiento.

Leon se acercó a ella y le mostró la tablet para que vea de primera mano los resultados, pero ella la dejó arriba del escritorio y se concentró de nuevo en Kennedy.

—Ese no es el punto. El punto es que me mandaste a ser evaluada para demostrar si estoy capacitada. Jamás pensé que eso pasaría porque, de todas las personas que saben de lo que soy capaz, eres tú.

—Y por ese motivo tomé esa decisión, que por cierto fue respaldada.

—¿A qué te refieres?— preguntó confusa.

—Hablo de que tu hermano y yo estuvimos de acuerdo en mandarte con el resto. Acéptalo, no tienes la preparación necesaria.

Claire esuchó eso y puso cara de indignación.

—¿Estás bromeando, cómo puedes decir algo así? He sobrevivido a varios accidentes biológicos, donde también te recuerdo lo sucedido en Raccoon City y Harvardville. No encontrarás a nadie de esos cadetes con la experiencia que tengo yo.

—Pero tú lo dijiste, has sobrevivido, no fuiste al peligro, el peligro te encontró a ti. Y que yo recuerde todas esas veces lo hiciste como una civil o empleada de TerraSave, ninguna como una agente entrenada para estas situaciones o de ningún tipo.

—Pero yo...

—Pero nada, tienes que entender que unas prácticas de autodefensa con tu hermano y buena suerte no son argumentos suficientes para ser evaludada como agente y soldado con entrenamiento militar. La decisión ya está tomada y no hay vuelta atrás, si quieres seguir tendrás que hacerlo como nosotros lo ordenamos. Tenemos la responsabilidad de que todos ustedes se vuelvan lo mejor de sí mismo, y a veces el camino puede ser distinto para todos, igual el tuyo.

Recuperar el Tiempo PerdidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora