Aquí comienza todo

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CAPITULO 5

El resto de la mañana Felix estuvo llorando en su habitación, su madre había intentado hablar con él dos veces y las dos veces el pecoso la había rechazado.

Él estaba realmente mal con este tema, la idea de no ver a sus amigos le ponía triste y enojado, y seamos honestos, aunque ellos dijeran que jamás perderían el contacto era algo muy poco probable, ya lo sabía porque ya lo había vivido.

Le había dejado un mensaje de voz a su padre para que lo llamara en cuanto se desocupara y así contarle todo.

Felix estaba en su cama acostado y sollozando cuando su teléfono sonó, era su padre, lo sabía porque tenía un tono de llamada especial para él.

Tomó el teléfono y contesto de inmediato.

- ¿Bueno? – dijo el menor.

- Cariño, - habló el padre del pecoso, escuchar su vos ponía de buenas al menor- apenas me desocupe y escuche tu audio, no te escuchabas bien, ¿Qué pasa? - preguntó preocupado.

- Pasa que... – el menor se sentó en la cama – mi mamá otra vez está haciendo lo que ella quiere, sin consultarme nada.

El mayor resoplo. Él sabía lo difícil que era tratar con su ex esposa - ¿Qué hizo ahora tu madre?

- Pues sabes, hoy nos venimos a la casa de su novio, acepte venir con ella porque era lo que le hacia feliz, pero hoy a la hora de la comida me dijo que ya no iría al colegio donde mis amigos estarán – el menor hizo una pausa – Y con eso yo no quiero estar más aquí, quiero irme.

- Cariño, cálmate ¿A dónde se supone que quieres ir? – el mayor hablo con amor, sabia como era su ex esposa pero también sabía lo impulsivo que podía llegar a ser su hijo.

- Pues a donde vivíamos antes y si mi madre no quiere pues que se quede.

- A ver, sabes que tú no puedes vivir sólo aun, eres menor de edad.

- Bueno, pues entonces quiero regresar a vivir contigo, lo que sea, pero aquí no quiero estar, no si mi madre sigue con esa actitud de mierda - dijo el menor sacando su coraje.

El padre de Felix soltó una risita por lo alterado que estaba su hijo.

-No te rías – le dijo el menora su padre mientras rodaba los ojos.

- Ok, ok, a ver, te propongo algo.

- ¿De qué se trata?

- Tú no quieres estar ahí, eso quedo claro, pero... ¿estás seguro qué no tienes ni tantita curiosidad por conocer nueva gente? La cosa es, - hizo una pausa – te propongo que pienses eso, hasta la noche y...

- ¡NO! – gritó Felix poniéndose de pie alteradamente– No quiero pensarlo, ya tengo mi decisión y es un rotundo no.

- A ver, Felix, estas actuando por impulso, te digo que lo pienses, si al final del día me hablas y me dices que no quieres eso, yo hago lo imposible para que estés donde te sientas totalmente a gusto, pero piensa en las posibilidades, conocer gente nueva, nuevos ambientes, jamás viene mal.

- ¿me prometes que si te digo que no al final vas a llevarme a donde quiero estar?

-Te lo prometo, cariño, te lo prometo, tu madre sabe que primero estas tú, luego tú y al final tú, antes que nosotros – Felix hizo un puchero de niño chiquito – te amo mucho, hijo.

- Yo a ti papá, no te prometo pensarlo mucho, pero hablamos en la noche ¿ok?, te dejo, bye.

- Adiós, cariño.

Mi hermanastro es un idiota || Hyunlix Donde viven las historias. Descúbrelo ahora