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Pov Freen

Al llegar al parqueo de mi apartamento, ciento que alguien me observa, me giro y no veo a nadie, me monto en el auto y mientras salgo del estacionamiento y miro para todos lados ya que no es la primera vez que me siento observada.

Llego y me pongo en mis asuntos y no puedo concentrarme, pienso en mi bebe y en como reaccionara Bec cuando se entere espero que no termine lo que tenemos y como si fuera telepatía me llama.

- Hola, preciosa.

- Hola, mi amor...

- Como estas, pasaste buena noche.

- Nooo.

- Si, y porque?- dice intrigada.

- Porque me hiciste mucha falta.

- Hoy te recompenso.- dice juguetona.

- Yo espero.- lo oigo reír.

- Que tengas un súper día, nos vemos esta noche.

- Igual tu... Nos vemos.

Después de un almuerzo ligero, sigo preparando la presentación del Best Seller de la editorial, hasta que ya es hora de ir al hospital. Después de ponerme la inyección, voy al estacionamiento y cuando abro la puerta del coche siento que alguien me abraza por detrás.

- No hagas, ruido,- susurra y siento algo duro en mi costado- dame el bolso sin hacer mucho movimiento. - me quito el bolso y se lo paso, siento como se va corriendo, me volteo y lo veo huir. Los nervios hacen que se me caigan las llaves de las manos, respiro profundo, recojo mis llaves, me subo al coche y arranco al departamento, como se los códigos de seguridad aparco en la plaza 5 y subo al apartamento con piernas y manos temblorosas. Al entrar veo a Gail y me lanzo a sus brazos.

- Freen, que pasa? - su voz suena preocupada mientras me lleva a la sala y me ayuda a sentarme en el sofá.

- Es que, me asaltaron,- rompo a llorar.

- Tranquila, llamaste al Señorita Armstrong.- niego con la cabeza y empiezo a llorar de nuevo- voy a buscar mi celular y a traerte algo para que te tranquilices.

- Gracias Gail,- veo cómo se dirige a la cocina, cinco minutos después regresa con una taza de té, me lo tiende, cojo la taza de té y la veo marcar su celular.

- Roger, como estas- escucha lo que dicen del otro lado - es que a la Señorita Chankimha la asaltaron - asiente a lo que le dicen,- está bien.- cuelga.

- La Señorita Armstrong está en una reunión, desde que salga le avisa.- me dice y se sienta a mi lado.- Freen te pasa algo más, verdad?

- Gail, yo...- dudo en decirle pero tengo que desahogarme con alguien.- yo estoy embarazada- veo que su cara se ilumina con una sonrisa.

- Ohhh, Freen felicidades.

- Gail, puedo perderlo,- las lágrimas brotan de mis ojos, la miro,- tengo anemia grave y debo llevar un tratamiento por un tiempo,- seco mis lágrimas,- pero no le quiero decir a Rebecca hasta que esté segura de que lo voy a conservar,- agarro su mano.- por favor guárdame el secreto.

- Claro que sí, cuenta conmigo...

Pov Becky

Al salir de la reunión con los señores de la maderera, veo a Roger esperándome y tiene cara de preocupación, le hago señas para que me siga, entramos al despacho y me acomodo en mi silla.

- Que pasa Roger.

- Señorita Armstrong, Gail me aviso que a la Señorita Chankimha la asaltaron y que estaba en el departamento.

- Que!!!- me paro de golpe, - pero está bien.

- Si...

- Vamos a casa ahora- grito. Salgo de la oficina y le digo a Andrea que cualquier imprevisto me llame.

Los 15 minutos más eternos fue los del transcurso de la empresa al Departamento, al llegar no espero que Roger me abra la puerta y entro al ascensor, cuando llego a mi piso entro casi corriendo y encuentro a Freen en el sofá, cuando me ve se tira en mis brazos.

- Rebecca- dice entre sollozos y yo la abrazo fuerte y beso su cabello, después de un momento abrazados, la despegó de mí para ver su cara.

- Estas bien? - asiente y vuelve a esconder su cara en mi cuello. La llevo hasta el sofá y le pido que me cuente lo que paso.

Me dice que estaba en Hospital Vejthani Bangkok, por un chequeo de rutina y cuando estaba en el parqueo alguien la agarro por detrás y la amenazo con un arma para que le entregara el bolso.

- Freen porque no me dijiste que ibas a ir al hospital? - me agarro el cabello.- yo creía que estabas aquí.

- Yo sé, es que...- quiere decir algo pero se calla.

- Que había en tu bolso Freen.

- Mis documentos, el celular, las llaves del apartamento, eso era lo más importante.- dice.

- Roger!!!- lo llamo y al momento llega- en el bolso de Freen estaba su celular lo pueden empezar a rastrear.

- Claro que sí Señorita.- se va y siento que Freen se recuesta en mi hombro.

- Que te pasa?- pregunto preocupado.

- Me duele un poco la cabeza.- susurra.- tengo hambre

- Ven Vamos a que comas algo y luego te duermas un rato.- nos paramos y vamos a la cocina y le pedimos un sándwich de pollo con queso danés y tomate, a los cinco minutos ya tenemos nuestra cena enfrente y es un deleite ver a Freen comer con tanto gusto, después de comerse el pan se toma un vaso de jugo y luego uno de leche y veo como Gail sonríe, nos despedimos y vamos a mi habitación, la ayudo a desvestirse y nos metemos en la ducha, al salir le pongo una de mis camisetas se recuesta en la cama y se queda dormida. Voy al cuarto de seguridad de Roger y le digo que quiero que haga todo lo posible por encontrar el ladrón, vuelvo a mi habitación me acuesto a su lado, después de un rato me quedo dormido abrazando a Freen...

Mientras desayunamos le digo a Freen que donde quiera que valla me avise, termino de desayunar y me voy debido a que mi día está un poco agitado. Después de salir de un almuerzo de negocios decido llamar a Freen para saber cómo esta.

- Buenas Tardes, gracias por llamar, Hanna le asiste.

- Buenas tardes, podría comunicarme con Freen Chankimha, por favor.

- Freen no se encuentra en este momento quiere dejarle algún mensaje.

- Y usted no sabe dónde está.- como va ser que salió sin avisarme si fue lo primero que le dije.

- No señorita.

- Pues está bien, gracias.- cuelgo y casi tiro el teléfono de la rabia cómo es posible, que después de lo que paso salga sin avisar, sin decir a donde va, pero me va oír.
Siento que tocan la puerta.

- Pase- digo de mala manera.

- Señorita las partencias de la Señorita Chankimha aparecieron, tenemos que pasar por ellas a la comandancia.

- Pues vamos que esperamos- y salimos a recoger sus cosas...

Ella quiere más?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora