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Pov Rebecca Estamos desayunando antes de comenzar con la mudanza, que consiste más en el traslado de nuestra cosas personales y algunos muebles y utensilios, le pedí a Richie y a Roger que se fueran a la casa nueva para que reciban allá los de la mudanza y yo controlo desde aquí, pero lo hago más por Freen, ya que sé que es capaz de ponerse a empacar y llenar caja y con su abultado vientre no puede ni moverse, pero ya falta poco para la llegada de nuestro hijo.

Cuando terminamos de desayunar voy hacia la habitación y dejo a Freen conversando con Gail en la cocina, un momento después escucho el timbre y son los de la mudanza, les explico lo que tiene que llevar y comienza la mudanza, dos horas después estamos camino a nuestro nuevo hogar, voy manejando el Audi R8 con Sawyer y Gail detrás de nosotros.

Llegamos minutos después que el camión y empiezan a bajar las cajas, toda mi familia está aquí ayudándonos, como a la una Gail y Ana nos prepararon una pasta con camarones en salsa blanca con pan de ajo y todos alabamos su comida estuvo riquísimo.

- Nam ves porque Freen tiene loco a mi hermano,- dice Richie y ella lo mira con una ceja levantada,- cocina riquísimo, deberías aprender de ella,- ella le pega en el hombro y todos reímos.

Ya al caer la tarde todo está en su lugar, fue de gran ayuda mi familia, nos la pasamos haciendo chistes, hasta Roger que es tan serio, lo vi estallar varias veces en carcajadas. Veo a mi madre observar la escena a lo lejos y sus ojos están cristalinos, me acerco a ella y la abrazo.

- Que pasa mamá, - digo y sostengo su cara entre mis manos.

- Es que te veo feliz mi amor, con tu esposa, con tus hermanos, conmigo y tu padre,- deja caer dos lágrimas por su cara,- No creí que ese momento llegara.

- Es que yo tengo dos ángeles que me ayudaron a ser quien soy y ser feliz.- me mira con los ojos muy abiertos,- tu que me rescataste cuando tenía 4 años y que a pesar de lo que fui en mi adolescencia, siempre has estado ahí conmigo y Freen madre,- suspiro,- ella me enseño amar y ser amada.

- Ohhh, mi bebe te quiero tanto,- me abraza.

- Yo también.- la abrazo, en ese momento sentimos uno brazos que se nos unen y es mi padre.

- Yo los quiero más a los dos,- estallamos en una carcajada.

- Porque nos dejan afuera,- dice Irin al lado de Richie y los dos están haciendo un puchero.

- Todavía hay espacio para ustedes,- dice mi madre y nos fundimos en un gran abrazo

Cuándo todos se han ido vamos a muestra habitación a ducharnos, cuando salgo de la habitación encuentro a Freen mirando por la ventana el atardecer. Me acerco a ella por detrás y la abrazo, siento como recarga su cabeza en mi pecho.

- Te gusta,- susurro.

- Si, gracias por hacerme la mujer más feliz.

- Señora Armstrong entre estas paredes vamos a escribir nuestra propia historia, cada rincón y cada habitación va a estar impregnado por nosotros y llevara nuestro propio sello, beso su cabeza,- junto a nuestro hijo y lo que venga,- acaricio su vientre,- créame que lo de ser feliz es recíproco, la Amooo.

Ya Freen está en la recta final del embarazo, casi no puede dormir, va mucho al baño aunque eso es desde el principio, he decido pasar la mayor parte de tiempo en la casa solo voy a la oficina si es necesario y cuando Freen me deja, estoy revisando unos documentos que Ross necesita cuando tocan a la puerta.

- Pase,- digo sin levantar la cabeza.

- Mi amor, me puedes ayudar a estregarme la espalda,- me guiña un ojo y sé a qué se refiere.

- Claro que sí, Señora Armstrong,- dejo todo lo que estoy haciendo y me voy a la ducha con mi mujer...

Ella quiere más?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora