Toji en Kimetsu no Yaiba

Cazador nato

Han pasado años desde que Toji asesinó a su clan, desde entonces ha tenido que ganarse la vida de diversas formas, pero se especializó en aquella que más se le daba: el asesinato. Toji se volvió un asesino a sueldo que mataba sin preocupaciones, todo lo que necesitaba era dinero, armas y nada más, no tenía familia que defender, hijos que cuidar, gente a la cuál querer, y así vivió durante años hasta que, cuando este cuerpo tenía 19 años de edad, se le encomendó una misión no de asesinato, sino de guardia, para este punto ya se había hecho de una reputación como asesino, siendo capaz de cumplir trabajos que rozaban lo inhumano, y la comunidad de asesinos no fue la única que lo tenía en la mira, pues cierta organización ya lo estaba investigando, y así llegaría el día en que su vida tomaría un nuevo rumbo, y comenzaría de esta forma: Toji inició una misión que le encargaron de proteger a la hija primogénita de una familia adinerada, pues los guardias de costumbre no podrían vigilarla hoy, no necesitaba estar junto a ella como escolta, solo debía vigilar que nada grave le pasara, y así fue, permaneció vigilandola durante todo el día hasta que cayó la noche, donde dicha joven ya se encontraba de regreso a su hogar, cuando en el camino fue atacada, Toji de inmediato reaccionó y detuvo al agresor, el agresor tenía un aspecto humanoide, parecía humano pero con rasgos extraños, era pues, en efecto, un demonio, Toji ya había luchado con un par de ellos para este punto, y ya tenía idea de como lidiar con ellos, y su combate empezó, dado que las herramientas de Toji no servían para cazar demonios decidió ir a puño limpio, lanzándose de lleno contra el demonio, el demonio estaba esperando a que Toji bajara la guardia al perseguirlo, pero los niveles de ambos tenían una diferencia abismal, era como si un pollito quisiera escapar de un oso, el demonio no tenía oportunidad de atacar a Toji, ese hombre era demasiado ágil, fuerte y hábil como para poder hacerle algo, y no parecía ser del tipo que se cansa con facilidad, Toji arremetió con fuerza contra el demonio, buscando masacrarlo a tal punto de que ni siquiera la regeneración del demonio lo pudiera salvar, y con cada golpe lo desgastaba enormemente, la regeneración del demonio era cada vez más lenta, y Toji apenas y soltaba sudor, y fue en un ligero descuido de Toji que el demonio usó su técnica de sangre demoníaca: Contraataque, por cada golpe que el demonio recibía regresaba de forma automática un contraataque, aunque ésto estaba lejos de vencer a Toji, aunque pueda contraatacar su fuerza es débil, por lo que no podría hacer mucho daño a Toji, además si el oponente tenía el nivel suficiente el contraataque podía ser evadido o contrarrestado con otro contraataque por parte de Toji, en cuyo caso complicaría el lanzar nuevos contraataques, además de que si le lanzaban un ataque mortal sería incapaz de contraatacar, pero lo que lo ayudó fue el factor sorpresa, lo que tomó con la guardia baja a Toji, fueron 11 los contraataques de Toji, de los cuales 5 acertaron exitosamente contra el cuerpo de Toji, aunque no le hicieron ninguna herida real estos golpes bajaron un poco el rendimiento del hombre, pero sin dudas Toji decidió ir de nuevo contra el demonio, su rendimiento bajó, no por los golpes recibidos, sino por evadir los contraataques venideros, y así continuó durante varios minutos hasta que llegó un cazador de demonios, el cuál gracias a Toji rápidamente decapitó al demonio, Toji podía hacer pedazos a un demonio de ese nivel solamente con sus puños, pero era desgastante debido a que debía enfrentarse contra su regeneración, teniendo que destrozarlo de forma que el cuerpo no se pueda regenerar, pero el cazador, pese a ser muchísimo más débil que Toji, tenía las herramientas adecuadas para acabarlos de forma rápida, cosa de la que carecía Toji, honestamente sus puños siempre bastaron para acabar con demonios, pero era lento y algo peligroso, y una vez logrado ésto incluso un cazador como el que acudió a matar a este demonio podría notarlo, el potencial de Toji era inmenso, su poder bruto de por sí ya era inmenso, superando incluso a los pilares y, muy posiblemente, a las lunas demoníacas, y no podía dejar pasar la oportunidad de integrar a un valioso guerrero en sus filas contra los demonios, y Toji, por su parte, se encontraba en un limbo donde no sabía que hacer con su vida, así que decidiendo probar algo nuevo, y buscando evitar que ocurra algo como lo que paso en su vida pasada con Satoru Gojo, eligió tomar un nuevo camino, un nuevo estilo de vida que no tuvo oportunidad de vivir en su vida pasada, y así terminaría viajando con Urokodaki, el expilar del agua, el cual probaría si le enseñaría dicho estilo de respiración o lo descartaría