Pelea de monstruos

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La multitud observaba, horrorizada de como aquel misterioso hombre con katana había decapitado a un padre de familia, el caos se había desatado cuando aquel hombre unió nuevamente su cabeza a su cuerpo, todos en el lugar huyeron despavoridos, y los dos hombres empezaron a pelear en medio del caos.

Muzan se dirigió directamente al cazador, convirtiendo en demonios a todas aquellas desafortunadas personas, en efecto, el era el demonio original, y no perdería la oportunidad de probar quien era más fuerte, Toji se lanzó hacia Muzan, decapitando sin escrúpulos a los demonios que hasta hace unos momentos eran personas normales, ambos compartieron ataques mutuamente, con Muzan siendo medianamente superior a Toji en velocidad, pero con una fuerza menor que la de Fushiguro, eso fue un intercambio de golpes salvaje, Toji persiguió a Muzan, decapitandolo varias veces, igual que cortando sus cuerpo varias veces, a su vez que Muzan se encontraba a la defensiva, lanzando ataques a Toji que no resultaban más que en rasguños, pero de poco a poco se podría llegar a formar una herida fatal en el cuerpo del hombre, pero eso era demasiado complicado, Toji no emitía ninguna presencia, apenas lo perdiera de vista sería molesto volver a encontrarlo y el lo sabía, ambos aprovechando cada una de sus ventajas luchaban, con Muzan creando múltiples demonios, así como intentando usar su sangre con Toji, al no percibir respuesta por parte del cuerpo del sujeto empezaría a usar más y más, llegando al punto en que es un veneno en lugar de convertirlo en demonio, y si, Toji terminaría envenenado por la sangre de Muzan, pero aún así su cuerpo estaba a otro nivel, lo que para otros sería una dosis excesivamente letal de veneno para el era solo un debuff, Toji se empezó a sentir mal por el veneno, pero no había chance de que sufriera daño real o que se convirtiera en demonio, sin embargo, su fuerza se veía reducida, sus ataques serían cada vez más torpes, pero aún a la altura del combate, Toji era resistente a la sangre de Muzan, pero no inmune, cualquier otra persona ya habría muerto con la cantidad de sangre dentro del cuerpo de Toji, ya estaban cada vez más parejos, parecía que Muzan sería quién ganaría esta pelea, solo faltaba hacer que Toji sucumbiera ante el veneno lo suficiente como para poder matarlo.

Sin embargo, no contaría con que llegase a realizar una ráfaga de cortes por todo su cuerpo, destrozando la mitad de sus cerebros, en un ataque reflejo, Muzan lanzó una lluvia de golpes que no acertaría, su regeneración estaba dando mucha batalla, apenas una extremidad era mutilada volvía a crecer, sin embargo esa rafaga por parte del cazador fue una desventaja enorme, le dió una idea a Fushiguro sobre como podrían estarse repartiendo sus órganos vitales, probando su hipótesis fue directamente hacia el demonio, apuntando directamente a las zonas que había deducido serían sus puntos débiles, enfrentándose a todos los demonios que intentaban detenerlo, era una completa masacre, los demonios no podían hacer nada más que retrasar lo inevitable, al ser demonios recién creados no sabían nada de sus técnicas de sangre, por lo que solo eran bestias con una fuerza sobrehumana a las órdenes de su creador.

Muzan no era tonto, y se dió cuenta de lo que tramaba aquel cazador, y buscando evitarlo decidió usar a su favor el número de demonios que había en el lugar, haciendo que se lanzaran en bola contra Toji, el cual sin problemas los atravesaría, pero solo para darse cuenta de que su objetivo ya se había dado a la fuga, sin embargo aún no estaba fuera de su alcance, por lo que en un intento de perseguirlo dió un salto a la azotea de uno de los edificios, solo para ver a la distancia al demonio que buscaba, buscando de una vez por todas acabar con él, y fue en un solo ataque, un solo movimiento por parte de Toji el que marcaría quién saldría como el ganador de esta pelea, pues con una velocidad increíble lograría alcanzar a Muzan nuevamente, con un segundo ataque sorpresa, esta vez rebanandolo por partes en sus puntos vitales.

Era el fin de Muzan, o eso se suponía, Toji casi lo había logrado, fue por un pequeño margen de error de un par de centímetros que falló al cortar uno de los cerebros del demonio, lo cuál le permitió regenerarse nuevamente, Fushiguro, percatándose de su error, decidió realizar nuevamente los cortes necesarios para matar al demonio, pero antes de poder lograrlo el demonio actuó más rápido, realizando el mismo movimiento que hizo siglos atrás frente al primer usuario de respiraciones, el cual lo tenía igualmente contra las cuerdas en su momento, y lo volvería a hacer en está ocasión.

Esquivando por poco los cortes de Toji, buscó un lugar abierto para escapar de él, Toji lo perseguía, desconociendo el plan del demonio, buscando cortarlo sin éxito, ambos corrían como lo harían un depredador y su presa, logrando llegar a una zona con pocas edificaciones Toji buscaba acorralarlo de modo que no pudiera esconderse como lo hizo la vez pasada, solo para observar como el demonio estalló en miles de pedazos, Muzan sabía que si Toji lograba realizar un ataque que apuntará nuevamente a todos sus puntos vitales no saldría de esta, por lo que optó por hacerse estallar a si mismo, explotando en miles de pedazos que tomaron por sorpresa a Toji, solo alcanzando a reaccionar para cortar muchos de estos pedazos de carne que habían salido en todas direcciones, pero al ser algo inesperado no pudo reaccionar del mejor modo, solo logrando cortar alrededor del 75% de todos los pedazos que salieron.

Para Toji ésto no era una victoria por completo, es cierto que se le podría considerar victorioso en este combate, pero su contrincante logró escapar exitosamente, una vez había pasado el efecto de la adrenalina del combate pudo sentir verdaderamente el efecto de la sangre de Muzan en su cuerpo, estaría bien en un par de horas o días, pero la sensación era verdaderamente debilitante, aún así, ya consideraba este enfrentamiento finalizado, y con sus heridas decidió volver por fin a la montaña donde se realizaba la prueba estándar para los cazadores de demonios, regresando de forma exitosa y logrando volverse parte de los cazadores de demonios.

Muzan, por su lado, una vez habían salido expulsados los pedazos de carne volvió a rearmar su cuerpo con los pedazos que quedaron, se encontraba más débil que de costumbre, aún era una amenaza pero sabía que si decidía intentar un ataque sorpresa hacia el cazador acabaría muerto en ese momento, lo más prudente era retirarse a un lugar nuevo, preferiblemente lejos de Tokio, se sentía humillado, un humano que ni siquiera usaba respiraciones le había hecho frente y no solo eso, sino que también estuvo a punto de matarlo varias veces, el coraje recorría las venas de Muzan, nunca olvidaría la amenaza que representaba este hombre del cuál no sabía su nombre ni procedencia, sólo sabía una cosa: que debía matarlo cueste lo que cueste.

Toji en Kimetsu no YaibaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora