Hogwarts Legacy y el Torneo de los Tres Magos

06. La caza de Harlow

Nota: Gracias a todos por seguir leyendo mi historia. Te aviso de que será una novela larga, así que tómate tu tiempo para votar y comentar siempre que puedas. Ver interacción me ayuda a seguir motivada :')

Feliz Halloween a todos/as!! (este episodio lo publiqué el 31 de octubre)

***

¿Un estudiante? ¿De quién estaban hablando?

Lana y Poppy se miraron, sorprendidas por lo que habían escuchado. El campamento no era muy grande, solo había un par de tiendas campañas a media montar y montones de jaulas de Puffskeins amontonadas a un lado. Uno de los Ashwinders conjuró una llama para hacer una fogata con un simple hechizo de conjuración de fuego. Poppy parecía nerviosa sobre el rescate, pero Lana la detuvo. Colocó su mano delante de ella y le dijo, "Espera". La conversación entre los Ashwinders y los cazadores furtivos aún no había terminado. Lana quería saber más. Que hubiesen mencionado a Harlow no era una casualidad y tampoco el hecho de un estudiante de Hogwarts estuviera envuelto en una peligrosa conspiración. Lo que más sorprendió a Lana fue que los dementores no se hubieran percatado de su presencia, ya que se encontraban relativamente cerca del castillo. Aquello no eran buenas noticias ¿Quizás habían hecho un conjuro de ocultamiento?

-Estoy casando de que un simple crío nos diga qué hacer, no sé a qué está jugando- no parecían muy contentos, estaba siguiendo las órdenes de Harlow. Pero no importaba lo fuerte que Lana lo intentara, no sabía cuál estudiante podría estar interesado en relacionarse con magos tenebrosos.

"¿Sebastian?", pensó.

No, eso era imposible. Sebastian odiaba a los magos tenebrosos...y a los duendes. Observando, ella vio como ex seguidores de Ranrok se acercaban desde una esquina del campamento con una carro lleno de pieza de metal duende. Su ojos y armaduras emanaban un brillo, uno muy oscuro ¿Tenían acceso de nuevo a los almacenes de los guardianes? Parecía que haber vencido a Ranrok no había hecho tanto bien después de todo. Ya que estos pudieron usar la magia antigua oscura de nuevo. Aunque Lana tomo el poder, pensó que con la destrucción del último almacén, todo se había terminado...

-Por fin habéis llegado, por las barbas de Merlín- uno de los Ashwinders comenzó a remover todas las cajas de metal duende- ¿Esto es todo?-. 

-Claro que no estúpido, esto es todo lo que hemos podido rescatar de la torre de San Bakar- el duende le miró con condescendencia, y los otros de la misma forma.

Parecía que la relación entre los magos y los duendes seguía igual de complicada como lo era usualmente. Algo era seguro, los duendes estaban intentando vaciar los almacenes y extrayendo la magia antigua de las zonas de los pruebas ¿Pero como? A menos que estuvieron reconstruyendo las máquinas perforadoras. Visto todo el metal duende que estaba reuniendo.

-¿Habéis activado las nuevas minas como Harlow ha ordenado?- un Ashwinder preguntó, uno distinto al que se encontraba en frente del líder de los duendes.

-Sí, y mejor que nos vayáis pagando por nuestro trabajo pronto, el trabajo no es gratuito- el duende gruñó mientras se subía en un los carruajes dónde transportaban y entregaban los materiales.

-Eso no depende de nosotros, no nos podemos exponer, el Ministerio nos está buscando- el trato era áspero y seco, no era nada fácil.

-Como sea- los duendes se marcharon, los Ashwinders continuaron construyendo el campamento. Parecía que tenían pensado quedarse durante un periodo largo.

"¿Lista?", dijo Lana. Lana sacó su varita y con una rodilla apoyada en el suelo, se colocó en posición de salida. No era la primera vez que había arrasado un campamento de Ashwinders y este no seria el último. Su corazón latía con fuerza, quizás había perdido la práctica. Esto no era como estar  en clase, aquí si cometías un error no había una segunda oportunidad. Poppy no se veía preparada. Uno, dos tres.