Neptuno se encontraba buscando algo lejos de su orbita asteroides para que gillermo no se sintiera solo, estaba totalmente solo en aquel lugar, con una expresión neutra, al parecer el efecto estaba terminando...
Unas de sus lunas lo estaba observando, era tritón, lo miraba con algo de lastima, él al estar mas tiempo con neptuno cuando aun estaba cuerdo, al recordar esos momentos en que neptuno los trataba a él y sus hermanos con mucho cariño le causaba mucha tristeza, aun que cuando neptuno se encuentra en ese estado es mejor no hablar con él. Estaba por irse con las demás lunas cuando una voz fría y sin vida lo detuvo.
—¿t..tritón?—dijo neptuno de manera fría, estando en ese estado no le gustaba encontrar a sus lunas, en especial a tritón...
—hola...neptuno—dijo este con algo de miedo en su tono voz—....yo ya me iba—dijo este saliendo corriendo antes de que neptuno lo detuviera.
Este se quedo observando como tritón se iba, sintiendo rabia y tristeza al mismo tiempo.
—¡vete! ¡es lo único que sabes hacer! ¡huir!—le grito a su luna, sintiendo como lagrimas rodaban en sus mejillas, pero no eran lagrimas de rabia.
Rápido se fue hacia su orbita, al llegar agarro aquel frasco, estando a nada de tratarse cuatro de esas pastillas una voz lo detuvo.
—das asco
Neptuno observo al asteroide con cara.
—mierda, solo cállate gillermo me tenes arto—dijo este casi gritando, agarrando las cuatro pastillas tomandolas de una. Luego de unos minutos empezó a sentir su cuerpo pesado, cayendo de golpe en la 'cama' quedando totalmente dormido.
/.../
Neptuno se encontraba flotando por ahí, no muy lejos de su orbita, tenia los ojos cerrados disfrutando de su soledad, muy pocos veces lo hacia, aun así lo disfrutaba. Estaba por quedarse dormido cuando algo choco con su cuerpo.
—¿uh?—este lo miro curioso, tomándolo en sus manos, observándolo con mucha atención, notando como en la tapa de este decía "diario de urano" —un diario....urano.....
Este lo observo por un largo rato, pensando en si abrirlo o no, sabia quien era urano, pero pocos eran sus recuerdos hacia él. Luego de estar dudando en si abrirlo o no al final lo hizo, se sentó en la 'cama' abriendo una pagina al azar, leía lento, pues le costaba leer desde niño.
"Querido diario
Saturno a estado mas llorón de lo normal, me tiene cansado de que siempre venga a mi orbita a preguntar por su luna favorita; titan. Si tanto se le escapa por que no simplemente lo ata y ya, así quizás me deja en paz de una maldita vez."
"Querido diario
¡¿POR QUE NO PUEDO TENER SUS ANILLOS!? ¡YO DEBERÍA DE TENERLOS NO ÉL! SOLO SE FIJAN EN SUS ANILLOS ¡YO TAMBIÉN TENGO ANILLOS! QUE SE VALLAN A LA MIERDA TODOS-"
Antes de terminar de leer la pagina cerro el diario.
—pffff que temperamento—dijo este volviendo a abrir el diario en una pagina al azar.
"Querido diario
Mi relación con mis lunas cada vez se va a la mierda, trato de llevarme bien con ellas pero no cooperan, además que ni se donde están. Se que esta mal pero si ellas no me quieren no puedo obligarlos....creo."
Las páginas eran escritos cortos, la mayoría de estas solo hablaba de saturno y sus anillos, de cuanto desearía tenerlos. Eso a neptuno le pareció algo patético, aun que borro eso de su mente y rápido sintió pena por él, seguro y son igual de lindos que los de saturno, aun que no recordaba como exactamente era este.
