Capítulo 18

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~5 meses después~

Ya tenía 6 meses de embarazo, exactamente 25 semanas, todo había estado bien, todo exepto que aún no atrapaban a Nick, y que por alguna razón, peleaba mucho con Ronny, por la más mínima estupidez.

Cómo ahora, que venía llegando del gym, enojado.

—¿Qué pasa?

—Nada

—Dios Ronaldo, no empieces con lo mismo, habla conmigo por favor.

—No quiero hablar contigo ¿Es que no lo entiendes? NO-QUIERO-HABLAR-CONTIGO.

—¿Sabes qué? Esta bien, pero después no vengas haciéndote el cariñoso conmigo, ya me harte de esa mierda.

Iba caminando hacía la habitación, cuando escucho algo que realmente me duele, y él lo sabe.

—Pues si tan harta estas largate de aquí, ni que me encantara vivir contigo en tu condición.

Me volteo para mirarlo, y veo el momento exacto en el que se arrepiente de lo que dijo.

—No quise decir eso Mika...

—Pero lo hiciste, y lo piensas. Vere si puedo quedarme con Sammy un tiempo, así podrás estar tranquilo, sin ninguna embarazada molestándote.

Cuando llegue a la habitación y cerre la puerta escuchando como sus pasos se acercaban.

—Mika lo siento, de verdad, no quise decir eso, estoy molesto conmigo...

—Ya te dije Ronaldo, estoy cansada de esto, solo discutimos, y cada vez dices cosas más hirientes. Déjame sola, llamaré a Sammy.

Él salió de la habitación y después de un rato, cuando estaba calmada llame a Sammy, pero ella estaba de viaje, me dijo que podría quedarme en su depa, pero me da miedo que Nick vuelva a encontrarme sola, así que le dije que me quedaría aquí.

En eso, Ronny vuelve a entrar.

—Compré comida, para que cenemos, y hablemos.

—Ahora voy.

Fui y lo ayude con las cosas, y nos sentamos a cenar.

—Rivers esta en españa, con produ, así que tendre que quedarme aquí, lo siento, pero trataré de no molestarte, dormiré aquí en el sillón así no...

—Ya calla Mika, sabes que no harás eso, duerme en la cama, es tuya, yo dormiré en el sillón.

—Pero es tu depa Ronaldo.

—También tuyo, no hagas caso a lo que te dije hace rato Mika, por favor, sabes que hablo estupudeces cuando estoy molesto, lo siento, de verdad.

—Da igual, Ronaldo, lo dices porque lo piensas, esta bien, solo no quiero seguir molestando.

—Basta de decir eso Mika, por favor.

Lo mire, y ví que estaba llorando demasiado.

—¿Por qué lloras Ronny? ¿Qué pasa mi amor?

Me levanté y lo abrace, por más cosas que me diga, es mi Ronny, siempre lo será.

—De verdad perdón princesa, no me gusta discutir contigo, y mucho menos hacerte sentir mal.

—Tranquilo amor, lo solucionaremos, buscaremos soluciones, ya no llores mi vida, tranquilo.

Cuando ya se calmo nos fuimos a la habitación y nos dormimos.

~Dos semanas después~

En estas dos semanas todo había vuelto a ser como antes, casi no discutíamos con Ronny.

Estaba haciendo la comida cuando escuche la puerta y ví a Ronny entrar.

—Hola mi amor, ¿cómo te fue?

—Más o menos, iré a bañarme.

—Esta bien amor, ya casi esta la comida.

Entró a la habitación y yo comencé a arreglar la mesa. Cuando salió me ayudo a llevar los platos y comimos.

—¿Quieres hablar amor?

—No princesa, no quiero.

—Esta bien, ¿Quieres hacer algo?

—¿Qué cosa?

—No sé, ¿Ir por un helado?

Ronny me miro y se rió.

—¿Me estas diciendo indirectamente que tienes antojo de helado?

—Puede ser.

—Esta bien princesa, pero en un rato ¿sí? Tengo una reunión ahora.

—Esta bien amor.

—Ya voy a la oficina preciosa, deja los platos ahí, luego los lavo.

—Bueno amor, estaré en la habitación.

—Okei princesa, te amo.

—Te amo.

Sinceramente no sé cuanto tiempo paso porque me quede dormida, Ronny fue quien me despertó.

—Princesa, ya terminé, vamos por el helado.

—Quiero dormir amor.

—¿Quieres que yo vaya por el helado?

—¿Por favor?

—Esta bien, dejare con llave, cualquier cosa me llamas princesa.

—Esta bien amor.

Ronny me beso y se fue, yo me volví a dormir. Paso el rato y sentí abrirse la puerta, y ví segundos después a Ronny entrando con mi helado de chocolate.

—Gracias amor.

—No es nada, podríamos ver algo mientra comemos helado.

—Busca algo amor.

Sentí una muy fuerte patada en el vientre que me hizo soltar un gran quejido.

—¿Qué paso amor?

—Tu hijo me acaba de golpear.

Ronny me acarició el vientre y el bebé se tranquilizo, con eso y con el helado.

Tengo 6 meses de embarazo, exactamente 27 semanas y dos días, y desde que este bebé comenzó a crear sus pies, me patea muy seguido y muy fuerte, aún no esta aquí y ya me deja noches sin dormir a veces, y de todo esto me quejo con su papá, quien es el único que lo calma.

Ya en la noche me bañe, Ronny me seco el pelo y nos acostamos, me costo dormirme porque de nuevo, el niño comenzó a patear, pero Ronny me ayudó también con eso.

Desde que hablamos, y dejamos de pelear por todo, así han sido casi todos lo días, me gusta que haya vuelto mi Ronny.

Saliendo con mi entrenador (Ronny y Mikaela)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora