Saliendo con mi entrenador (Ronny y Mikaela)

Capítulo 5

Ya era sábado, mi último entrenamiento con Ronny en esta semana, hace una semana que nos conocimos, y en los entrenamientos solo me habla lo necesario en los entrenamientos, la verdad, extraño mensajearme con él, hablábamos desde los buenos días hasta las buenas noches, y extraño eso, me acostumbré mucho a eso.

Me metí a bañar, me puse mi ropa deportiva y ya eran las 14:30, así que solo salí para el gym, no he comido muy bien estos días, no tengo apetito, pero no quiero volver a tener problemas por llegar tarde.

Llegué al gym, y ahí estaba Ronny, llegué justo a las 15:30, así que fui a dejar mis cosas y comencé a calentar. Mientras estaba saltando la cuerda comencé a marearme, así que pare.

—¿Que pasa?

—Nada, me maree un poco, pero ahora sigo no te preocupes.

—No, ve a sentarte.

Iba a caminar y casi me caigo, por suerte él estaba ahí y me alcanzó a atrapar, me levanto y me llevo a las bancas.

—¿Comiste hoy?

—No, venía tarde, entonces no quise comer.

—Ire a buscarte algo.

Fue a buscarme algo que comer y volvió con varias barritas de cereal.

—Gracias.

—Tienes que comer Mikaela, no puedes venir a los entrenamientos sin comer, te hace mal.

—Pero no quería llegar tarde, no quería tener más problemas contigo, y me quedé dormida, por eso salí tarde.

—Esta bien, pero no vuelvas a venir sin comer, por lo menos avísame que llegarás un poco tarde, no me molesta, me importa más que comas y no te sientas mal.

—Esta bien.

Me comí un par de barritas de cereal y me dejó sentada.

—Espera un rato, luego volvemos a calentar, iré a buscarte un agua.

—Esta bien, gracias.

*Narra Ronny

Me preocupe mucho cuando la ví casi en el suelo, y me sentí súper mal cuando me dijo que no había comido por no llegar tarde, eso es mi culpa, porque respondí muy mal cuando llegó tarde el otro día. Y los días siguientes también estaba muy frío con ella.

Fui a buscarle la botella con agua e iba pensando en como le pediría perdón, por como fui con ella esos días.

—Ten.

—Gracias.

Ni siquiera me miraba, hace días no lo hacía, al menos no directamente a los ojos como lo hacía antes, y extrañaba verle los ojitos tan lindos que tiene.

—Oye, quería hablar contigo.

—¿Sobre?

—Sobre como fui estos días contigo, quería...

—No tienes que explicarme nada, solo eres mi entrenador Ronny, estabas siendo profesional.

—¿Podrías escucharme?

—¿Por qué tendría? Tú no lo hiciste conmigo.

—Perdón. Quería pedirte perdón por como he actuado estos días.