︎𝗥𝗼𝗺𝗮nce 𝗔𝗹 𝗧𝗿𝗶𝗻𝗼mio ── CHANGINMIN

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Bang entró a su oficina junto al beta que lo dejó sobre su escritorio, sacando la playera para revisar cada lugar de esté buscando una que otra herida pero solo se encontró con la del brazo que era un corte por una corta pluma. Soltó todo el aire contenido de su pecho, había sido un día agitado tanto para los chicos como para él, que no encontró nada relevante de WooSung. Bang dejó su cabeza apoyada en el hombro del beta que dejó caricias en las hebras negras del australiano.

—Esto tomará tiempo —exclamó Bang dejando sus manos a cada costado del beta en el escritorio.

—Es lógico, pero lo lograremos o ¿acaso nos hemos rendido por encontrar a alguien?, ahora solo hay que cuidar al chico —pasó sus brazos por el cuello del alfa —. ¿No crees que necesito mi recompensa por llegar bien?

WooJin acercó su rostro al del alfa pero este se alejó, sonriendo al ver cómo el beta mordía su labio y pasaba sus piernas por su cadera atrayéndolo más a él para rozar sus miembros. El beta aún no perdía esperanzas de que el alfa le aceptara el beso, pero no fue así, solo lo que recibió fue que el alfa se alejara de él para sentarse en la silla.

—La recompensa va cuando llegas sin ningún rasguño, uhm —alzó sus cejas sonriendo al ver cómo el pantalón del beta le empezaba a molestar.

—Mierda Chan —jadeo al oler las feromonas de Chan, un rico olor a café y chocolate amargo. Haciendo que se recostara en el escritorio.

Bang admiro la vista que le entregaba el beta, pero después de unos segundos le llegó un olor desagradable a podrido y alcohol, así se levantó sintiendo las feromonas de un alfa en WooJin, su lobo gruñó al sentir a su beta con un olor que no era el suyo. El alfa llevó su boca junto a su nariz al cuello del coreano para dejar allí una mordida que le hizo callar un jadeo de dolor a Kim quien arqueó su espalda.

—¿Acaso tienes a ese alfa como rehén o como un puto esclavo sexual para cuando yo no te tome en cuenta? —cuestionó enojado apretando el muslo del beta.

—N...No uhm, él lo hizo para colocarte así —gimió al sentir como su cuello era atacado —. El dijo que tenía unas feromonas en mi y que le molestaba, por lo cual llenó la habitación de sus feromonas pero me dieron náuseas y salí de allí.

—Al parecer ahora debo de acompañar lo que es mío, y ver si ese maldito alfa quiere ver cómo lo marcó —sonrió al ver cómo WooJin negaba.

El alfa olor a café y chocolate amargo pasó su lengua por la mordida que hizo hace unos segundos para saborear la sangre que salía de esta, sintiendo como el beta debajo suyo se estremecía y gemía bajito. El alfa hizo un camino de besos por el cuello del beta hasta llegar a los pezones de este donde los mordió y jalo a su antojo, solo que la puerta ser tocada llamó la atención de ambos mayores.

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Jeongin tenía su respiración agitada, se había despertado hace un rato, no oía nada, no sabía dónde estaba y la habitación estaba a oscuras ocasionando que piense demasiadas cosas. Trató de levantarse pero el dolor en sus costillas o su cuerpo en general no se lo permitió, cayendo nuevamente rendido ante lo que suponía que era una cama. Su lobo aún seguía durmiendo, total él fue quien estaba consciente cuando atacaron la casa de HaJoon. Sus ojos se llenaron de lágrimas más la habitación de sus feromonas de tristeza, todo estaba perfecto pero de la noche a la mañana todo se fue a la mierda.

La puerta ser abierta lo hizo secar rápidamente sus lágrimas, encontrándose con un chico que encendía la luz de la habitación viendo como esta era presentable. Alguien quien lo asustó y lo hizo querer levantarse nuevamente pero este no se lo permitió.

—Hey no lo hagas, solo te harás daño —tomo levemente del brazo al alfita soltando feromonas dulces para que se relajara, no como las que sintió hace unas horas.

—¿Don... dónde estoy? —quiso saber mirando como el omega se sentaba a su lado para revisarlo.

—Estás en la mansión de Skz, estaremos cuidando de ti hasta que todo se tranquilice... ¿Algo que te moleste? —le pregunto viendo como este bajaba la mirada —. No bajes la mirada, ¿Algo te duele? -lo tomó por la barbilla haciendo que negará.

El golpeteo de la puerta hace que el omega se levante para abrir la puerta, encontrándose con Changbin que tenía una bandeja de comida que probablemente preparó Minho junto a Félix. Seungmin se hizo a un lado para que entrase, pero Seo se negó a pasar, no quería incomodar más al pobre chico. Jeongin se dedicó a jugar con sus manos, hasta que un nuevo olor a lluvia y bosque frondoso llegó a él mezclándose perfectamente con el aroma del omega, frutilla y chocolate.

—Yo... ¿puedo levantarme? —La voz débil del chico llamó la atención de la pareja que estaba discutiendo a través de mímicas.

—Lo mejor es que no lo hagas por unos días, traeré una compresa helada para colocarte allí, mientras come algo —sonrió dejando al alfa solo junto al menor.

—Ash, omega, hace todo lo que quiere -protestó girando asustado para ver si no estaba Seungmin, haciendo reír al alfita mientras se adentraba a la habitación y dejaba la bandeja en el velador —. Tratemos de que te sientes bien para que comas algo.

Changbin hizo lo posible para no hacerle daño al chico, por lo cual colocó una almohada en la espalda de este y le dejó la bandeja en las piernas, soltando un suspiro que llamó la atención al pequeño que estaba llevándose una cucharada a su boca probando lo rica que estaba esa comida. Seo de vez en cuando miraba el rostro del pequeño o las partes descubiertas que tenía este, se notaban los moretones y también la quemadura del cigarrillo.

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