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En el capítulo anterior ya vimos con están las cosas con Gran Colombia y sus hijos, pero ahora veremos que paso con Panamá.

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Esta se despertó en los brazos de Rusia inmediatamente levantó su cabeza e hizo contacto visual con el lo cual hizo que se pusiera nerviosa, con rapidez se sentó, pero no se dio cuenta que lo había echo en las piernas del ruso, lo cual lo sorprendió a el, ella al notarlo rápidamente se paro dándole su espacio personal, lo cual el parecía agradecer.

—yo lo lamento tanto— agachó su cabeza varias veces avergonzada

Rusia se rió un poco por las acciones de la panameña lo cual la sonrojo aún más —no tienes de que preocuparte, yo originalmente había venido a ver cómo estabas, ya que no sabia nada de ti desde lo sucedido con USA, asique como en las últimas dos reuniones vi que estabas ahí quería saber cómo estás ahora— explicó calmando a la panameña

—bueno la verdad ya me encuentro mejor, no tienes que preocuparte por mí, son solo tonterías mias— río suavemente

Lo que Panamá no noto fue que su "explicación" solo hizo que Rusia se preocupara aún más por ella, si eso tenía sentido, pero ese no era el mejor momento para volver a hablar de las heridas del pasado.

—No te sientes mal?— pregunto tocando la frente de la panameña para asegurarse de que no tuviera fiebre, ya se había desmayado no sabía que mas podía pasarle además notaba un pequeño color rojo en su cara

Panamá lo alejó con cuidado de ella y ella misma dio tres pasos atrás alejándose asi del ruso —no es nada, estoy segura que tienes cosas más importantes que hacer no?— Rusia trato de no incomodarla y decidió dejar su conversación con ella para otro día cuando ella se sintiera mejor

Panamá lo acompañó hasta la puerta, que no estaba muy lejos por cierto, se despido aún algo sonrojada pero sentía que no era necesario llamar tanto la atención de Rusia, que tal si el creía que era muy dramática?, prefería no arriesgarse con alguien que tuviera ese tipo de personalidad.

Rusia no dio ni tres pasos cuando escucho a la panameña toser, dio media vuelta para ver si todo estaba bien y efectivamente.



Todo estaba mal!












Vio como la panameña había caído de rodillas mientras tosía sangre, no perdió tiempo y se acercó a ayudarla, la tomo en brazos para intentar ver qué le pasaba, Panamá solo se estaba preguntando porque le pasaba esto a ella, no pasó mucho antes de que volviera a desmayarse.



















Continuará

Si la gran colombia volviera Donde viven las historias. Descúbrelo ahora