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Narra Aixa

La universidad no es fácil.

Si aún no vives esta etapa, no quiero asustarte pero debes saber que así es esto, es algo así como una advertencia sin peligros reales.

Bueno, no peligra nada más que tu salud mental.

Pero si estás ahí, te felicito, no importa cuantos ramos te echaste y debiste o deberás repetir, una mala nota no define tus conocimientos. Te felicito por esforzarte, por no darte por vencido a pesar del cansancio, del estrés, por aguantar todas esos desvelos y llantos, te felicito por no rendirte y te doy animo a no hacerlo porque a pesar de todo, lo vale.

Nuevamente, te repito, no quiero asustarte pero los años de carrera no son nada comparado al último año y menos si estás estudiando algo relacionado a las áreas de la salud. El estrés de la tesis, las prácticas, estudiar, hacer planificaciones, casos clínicos, es un caos y aún ni siquiera comienza el año. Aunque para tu tranquilidad, todo sería más fácil para mi si jamás le hubiese comentado a mí tía el sueño del intercambio. No me quejo, sin ella todo hubiese quedado en eso, un sueño.

En resumen y para darte contexto, este es mi último año de Fonoaudiología, este año comienzo mi tesis y hago mi internado, ósea, la práctica. Desde que entré a la carrera o incluso antes, siempre quise hacer un intercambio, estudiar en otro país, conocer como es mi profesión en otros lugares, por cosas de la institución, no fue posible y el sueño, solo quedó en eso. Resulta que, años más tarde comentándolo con mi tía y posteriormente con mi universidad, se abrió una pequeña ventana a una posibilidad a lo que creía imposible. Luego, esa posibilidad se convirtió en algo real y es cuando llegamos a este momento.

Spoiler; Drama.

—Amiga, no puedes perderte la oportunidad de tu vida por ese saco weas.— habló la de ojos claros.

—Amiga, no puedo simplemente irme, no puedo dejarlo solo con las dos niñas ¿Quién las va a cuidar?

—Sarah no son tuyas, no son tu responsabilidad. Está bien, las quieres pero esto es tu futuro, te vas a dedicar a esto y perdóname pero no sabes si vas a seguir con él en unos años, él no puede depender de ti todo el tiempo... Hablamos de esto un montón de veces, soñamos con esto durante años y ahora dirás que no ¿Por él? ¿Por qué el te lo pidió?

—Amiga intenta entenderme...

No cabía en mi cabeza como podía poner a un hombre por sobre su futuro. De cierta forma la entendía, se había encariñado demás con las hijas del pelotudo pero aún así, esto era su futuro, eran sus sueños ¿Realmente iba a dejarlos de lado por él?

—Te entendería si me dijeras que tú lo decidiste, que tú quieres quedarte para ayudarlo, porque lo amas y no puedes alejarte de él o de ellas, pero hace dos días estabas emocionada, ibas a irte y ahora no ¿Qué cambio? Él, él no está de acuerdo, te dijo lo de siempre, que no puede solo, que no tiene apoyo, que te necesita y te dio vuelta así. —Dijo chasqueando los dedos —te tiene aquí. —Agregó apuntando la palma de su mano.

—Es que es real amiga, no tiene a nadie más. —intentó razonar la más baja pero no era así y estoy segura de que parte de ella lo sabía, pero no quería aceptarlo.

—No amiga, eso es lo que él dice y tú le crees— respondió la otra. —él tiene a sus papás, a la mamá de las niñas que contra todo lo que él diga y lo que te haya hecho pensar es una súper buena mamá, a los  otros abuelos de las niñas, tiene muchas redes de apoyo pero se ancla a ti porque tu nunca le dices que no. Dime ¿Cuántas veces dejaste de ir a la universidad el año pasado por cuidarle a las niñas? ¿Para cuantas pruebas dejaste de estudiar por la misma razón? ¿Cuántas pruebas no diste?

—Tú no la conoces. —Dijo ella, porque claramente eso fue lo más importante de todo lo que dije.

—No necesito conocerla para saberlo, cuando las niñas vuelven de su casa, vuelven limpias, con sus tareas hechas, lo que ella haga y deje de hacer con su vida sexual no afecta su maternidad, recuerda que tu no hace mucho eras igualita a ella o que yo sigo siéndolo  ¿O hablas así de mí cuando yo no te estoy escuchando?

—No es así y no tienes idea lo que estoy sintiendo en este momento, lo amo y tu nunca has querido tanto a alguien.

—La que no tiene idea eres tú Sarah, he querido mucho pero aprendí a alejarme cuando es necesario, la diferencia entre tú y yo es que ya yo no voy a dejar que el primer tipo que me trate bonito se interponga en mis sueños.

—El Samu es diferente.

—Para ti todos son la excepción a la regla y al final, te das cuenta de que no a punta de porrazos pero esta vez, yo no voy a estar para recoger otros destrozos porque voy a estar al otro lado del mundo cumpliendo nuestros sueños.

Y dicho esto, me di la vuelta con el corazón a mil por hora y me fui.

Dejé atrás a la que durante cuatro años fue mi amiga, mi compañera, mi primera amiga de la universidad. Pero hacía lo creía correcto, no podía ayudar a alguien que no quería ser ayudado y tampoco podía quedarme estancada por ella.

•••

—Hola washita ¿Como te fue en esos tramites que estabas viendo? —Preguntó Chalo, cuando llegué a la cafetería donde habiamos quedado en juntarnos. —¿De que eran a todo esto?

—Ahora que es un hecho puedo contarte —Dije feliz. —Voy a hacer mi internado en España.

—Pero Washa eso es maravilloso weona ¡Felicidades! —Dijo é con genuina alegría, parándose de su asiento a abrazarme con efusividad.

Gonzalo, Chalo para los amigos, era otro de mis amigos de la universidad y durante un tiempo, todos fimos un grupito, luego cuando Sarah comenzó a pololear con Samuel todo se fue a la mierda y nos separamos porque ella casi no iba a clases y dejaron de considerarla en los trabajos, por mi parte me sentí mal por ella y las pocas veces que iba, me quedaba con ella.

—Cuéntame todo ¿Cuánto se van? Porque supongo que Sarah va contigo. —Agregó mientras volvía a sentarse.

—Vengo de hablar con ella y no, va a quedarse por el saco de pelotas.

—¿Me estay webiando?

—Ojalá.

—Que es weona. —Se limitó a decir. —¿Y que onda con la tesis?

—Supongo que voy a tener que hacerla sola pero en realidad eso no me molesta. —Respondí restándole importancia porque era verdad, de cierta forma, hacerla sola sería mejor para mí, yo vería mis tiempos.

—Podí hacerla conmigo yo no tengo atado, sabí que yo no te dije antes porque ustedes vienen en par y con ella prefiero no trabar.

—No sé sabí, igual es difícil porque serán caleta de horas de diferencia y en practicas igual será más dificil.

—Washa vo' no te preocupí, soy seca, vo' podí con las prácticas y los dos sabemos que trabajamos de pana juntos, no necesitamos estar en el documento a la vez, tu me dejai un mensaje con tus dudas o avances y viceversa y era. —Dijo él intentando convencerme, sabía que era un interés genuino porque siempre que podíamos trabajábamos juntos y realmente nos iba bien.

—¿Entonces de que la hacemos?

—Wena Tamos dados pa' el éxito washa, la hacemos de voz profesional y era.

Y se armó.

O bueno, se hizo un intento.

Tesis [Ferran Torres]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora