"Taeyong, yo te ame primero."
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Taeyong estaba en su casa terminando una de sus tantas cosas pendientes de la escuela, al parecer ya era experto porque sus dedos se movían por si solos por la computadora, era el proyecto final y no le importaba desvelarse porque después de entregarlo podría dormir todo lo que él quisiera.
-Solo una cosa más y creo que acabe...
Hablo consigo mismo hasta que algo golpeando su ventana percató su atención, algo irritado se puso de pie y la abrió para fijar su mirada en que su vecino de el frente, Jaehyun, hizo una mueca y espero a que hablara.
-Taeyong, ¿estás libre?
-No, estoy terminando mi proyecto.
Taeyong estaba dispuesto a cerrar la ventana pero fue Jaehyun quien lo detuvo arrojando otra pequeña piedra causando que lastimara un poco su piel.
-Auch, tonto.
-¿Puedo subir?
Taeyong no dijo nada y abrió sus ventanas para que pudiera escalar, una vez Jaehyun estuvo dentro fue directamente a tomar uno de sus mangas y sentarse en la alfombra a leer. Jaehyun sabía que Taeyong solía estar más irritado en los finales por lo tanto se quedaría en silencio leyendo hasta que el mayor terminará sus deberes.
-No hagas tanto desastre y si quieres comer algo baja en silencio porque mis padres están durmiendo.
Jaehyun asintió sonriendo amablemente para continuar leyendo tranquilamente mientras Taeyong seguía trabajando en su presentación.
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Cuando por fin había terminado, reviso la hora y eran las 2 am, suspiro cansado y se quito los lentes para descansar la vista, se giro y miro a Jaehyun que estaba armando legos y no pudo evitar reír.
-¿Te aburriste esperando?
-Para nada, tu habitación es una isla de tesoros.
-Iré a darme un baño rápido, acomodate para dormir.
Jaehyun le hizo caso mientras iba gateando hasta el closet para sacar la poca ropa que se dejaba ahí de las veces que venía a verlo.
Ah, Jaehyun y Taeyong tenían una larga historia de como es que pasaron de ser simples vecinos desconocidos a mejores amigos quizás.
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-Jae, ¿no quieres salir un rato a ver el jardín? Mientras yo acomodo las cosas con tu papá, te llamaré para comer.
Jaehyun asintió y se fue corriendo al patio con un osito de peluche en la mano, apenas tenía 8 años y sus papás habían optado por mudarse debido al trabajo del señor Jung.
El pequeño Jaehyun estaba sentado sobre la hierba apretando el peluche contra su pecho, miraba su nuevo vecindario y solamente esperaba ver a más niños para acercarse a jugar con ellos también hasta que algo llamo su atención que eran dos niños jugando a lanzar la pelota mientras conversaban, se veían mayores pero no mucho, al pequeño niño de cabellos chocolates eso no le importo solamente quería jugar y ya, así que fue siguiéndolos precavidamente sin llegar a ser descubierto hasta que los chicos llegaron al parque donde el más alto fue a colgarse a uno de los juegos, el más bajo lo miraba soltando una risa. Jaehyun se acercó y se sentó al final de una las resbaladillas observando a ambos con una sonrisa mostrando los dientes, sus ojos se hacían chiquitos y los mayores se percataron de su presencia.
