SUEÑOS ROBADOS - YEONGYU

XXXVIII- ETERNIDAD

-¿Cómo esta mi nieta?- el abuelo Shin detuvo al doctor en cuanto lo observo salir del área de terapia intensiva.

-No le voy a mentir señor, la operación fue exitosa se retiro la bala y se trato de reparar su medula ósea pero lamentablemente el impacto afecto los nervios espinales por lo que me da mucha pena tener que comunicarles que la señora Ryujin perdió la movilidad y no podrá caminar.-

-¿Qué?- el abuelo grito, los ojos del señor se llenaron en lagrimas.

-Lo siento mucho, era una joven con una vida por delante.-

-¿Y cómo esta su bebé?- el abuelo pregunto desesperado.

-La señora sufrió un aborto, la señora tenía diez semanas de gestación no pudimos salvarlo, lo siento mucho.- el doctor palmeo el hombro de Beomgyu quien solo estaba cruzado de brazos.

-¿Qué vas a hacer?- el padre de Ryujin se acerco a Beomgyu.

-No voy a hacer absolutamente nada.-

-¡Es tu esposa!-

-¿Y?-

-Es la madre de tu hijo.- Beomgyu rodo los ojos.

-En primer lugar ya no está embarazada en segundo ese no era mi hijo y tercero ¡Por mí que se muera!- dio la vuelta comenzando a caminar.

-¡Es tu esposa! Sabes que mi hija se muere si no te ve junto a ella.-

-Entonces que se muera de soledad.-

-¡No lo puedes hacer!-

-Mire como me largo de su vida.-

-¡Sabes que puede morir!-

-Me importa una mierda.-

-¡Podemos matar a Yeonjun, Mu Jian lo tiene en la mira ahora que esta vulnerable!-

-Ya caí una vez y fue el puto error más grande que cometí en toda mi existencia.-

-No te atrevas a venir a nosotros si Mu Jian le hace algo a Yeonjun.-

-¡Háganlo! No me importa.-

-Quedas advertido.-

-Sí está bien.-

-¡Beomgyu! ¡Regresa aquí!-

-Adiós- agito su mano.

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Choi Yeonjun era conocido como un oficial imparable y que nunca se rendía esta vez no era diferente su recuperación era su prioridad dedico todo su tiempo disponible a su recuperación pasaba alrededor de 18 horas trabajando en su rehabilitación Lev y Hueningkai se encontraban con él para atenderlo, cuando Yeonjun comenzó a caminar con un bastón decidió que era momento de estar solo y valerse por si mismo.

-No, me niego a dejarte.-

-Lev por favor.- Yeonjun rodo los ojos.

-¡Yeonjun! No puedo dejarte solo.-

-Necesito estar solo y valerme por mismo.-

-No al menos hasta que estés completamente recuperado.-

- Hueningkai, ya no soy un niño para que me traten así.-

-Aunque te sientas joven Yeonjun.-

-No necesito que me traten como un inútil.-

-¡Yun!- Soobin rogo.

-Solo hasta que estés mejor ¿Sí?-

-Ya puedo caminar con el bastón.-

-Tienes varios clavos en las piernas y te pueden doler, además debes de continuar con tus terapias.-