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♡8:LOS ÁNGELES♡

“Mientras no sabían,
Yo te besaba a escondidas”

SHANA

Caminé lo más rápido que pude para encontrarnos como quedamos bajo el árbol.

—Hey, por fin, ¿lo habéis vendido todo?—cuestioné viendo a los chicos

—Creo que mi encanto me ayudó bastante...—pronunció de manera arrogante Kass e hice una mueca.

—¡Por fin! Ya lo hemos vendido todo... Gracias a Dios—Samir hizo un gesto de rezar y lo miré incrédula.

—¿Desde cuando eres creyente?

—Desde el día de hoy...—afirmó.

Negué varias veces con la cabeza y ví la expresión de Samir cambiar.

—¿Qué sucede?—indagué en su seriedad.

—Ahí viene Nate con sus matones...—escupió Samir con desdén

Me giré hacia la dirección en la que miraba mi hermano y efectivamente, ahí venían

—Bueno bueno bueno... Pero qué tenemos aquí, Samir Derry junto a su hermanita menor "la niñera limpia mierdas"—dijo con su natural burla.

—Yo también me alegro de verte, "pandillero de mala calidad"—le sonrío satírica expresándole mi más profundo amor.

A Nate no le hizo ningún tipo de gracia mi comentario pero me daba exactamente igual.

—¿Tienes lo mío?—se dirigió a Samir no si antes repasar rápidamente a Kass.

—Toma, con esto saldamos las deudas—Samir le entrega el dinero de mala manera y este lo acepta mostrando todos sus dientes frontales.

Que expresión tan repugnante y horrible tenía ese hombre.

—Fuistéis rápidos eh—agregó contando los billetes.

Me crucé de brazos esperando a que dijera que ya podíamos irnos pero al parecer se lo tomaba todo con excesiva calma.

—Nate, tenemos un proble...—esa voz—¿Rubia? ¿Qué haces aquí?

Me quedé de piedra al ver a Chase llegar al grupo de Nate y para colmo de los colmos hablarme tan despreocupadamente.

Me quedé procesando que hacer o que decir ya que todos los ojos cayeron en mí.

—¿Rubia? ¿Os conocéis?—la interrogante de mi hermano me hizo tragar grueso y ni hablar de la mirada confusa de Kass.

¡Qué buen lío!

Esto era lo peor que podía pasar por haber besado al idiota ese—me comentó internamente mi conciencia

—Yo...—aplasté mis labios sin saber qué explicar exactamente.

—¿Tú?—mi hermano levantó una ceja

Respiré profundamente para comenzar pero Chase me interrumpió—Le dije par de cosas antes y se molestó un poco, parece que la chica es un poco susceptible y no le gusta bromear, ¿No es así rubia?

Pestañeé varias veces sin entender porqué mentía, aunque esa mentira fue mejor que decir públicamente que lo había besado solo para vender dos putas pastillas de su propia banda.

—Idiota...—fue lo único que pudo elaborar mi lengua y cerebro.

—Mmm interesante... Bueno podéis iros, y tú Samir, trata de meterte en menos problemas, sigues siendo un niño pequeño—Nate le alborotó el cabello a Samir y este gruñó para luego alejarse.