Doble Caras[FINALIZADA]

Prólogo.

   —Es una historia sobre antiguos dioses, demonios, magia, masacres, guerra y de maldiciones... Nada bueno trae esta historia.

Hace un tiempo, en un gran continente existía un gran y poderoso país. Su ejército no tenía comparación alguno con ningún otro país, su fuerza era aplastante, nunca perdían alguna batalla, ni aunque el número fuera en desventaja, pues en su ejército peleaban algunos dioses, demonios y magos maestros en el arte de la guerra...

No se sabe que paso realmente puesto que no existe rastro de su civilización. Lo único que sabemos es gracias a un antiguo escrito que describe el gran país y a su maravilloso ejército.
Y lo peor de todo el libro, es la parte que describe la peor guerra que se haya visto jamás.

Solo una guerra interna pudo acabar con el gran país... La masacre estaba por todos lados. Las grandes torres que se elevaban a lo alto del cielo fueron derrivadas como si fueran montones de polvo. Y tras ocho largos y sangrientos años de guerra sin descanso, la ciudad quedo en una completa ruina. Solo uno de un millón de guerreros quedo en pie y mal herido.

Se dice que ese guerrero fue recompensado y castigado por habar quedado en pie. Los dioses de el cielo lloraron a sus hijos caídos en la tierra, la codicia humana había hecho una gran masacre a dioses y semidioses.

Al último guerrero se le dio un poder absoluto con el cual el debía acabar con los humanos normales, dejando así una tierra donde sólo aquellos descendientes dignos quedaran para poblar la tierra.
Y también fue castigado con la mayor maldición del cielo; haciéndolo un poderoso hechicero. Se le concedió el poder de la inmortalidad, para que así viera la muerte y desesperación de muchos.
Se le prometió una mayor recompensa si llevaba a cabo ese gran plan.

El hechicero paso décadas perfeccionando una maldición que el mismo creo para matar a todos los hombres normales.
Y al fin lo consigo... La maldición perfecta, algo de lo que los hombres jamás pudieran escapar, alimentado por todo lo malo.
Las sombras... Seres nacidos de todo lo malo del hombre, eso es algo que jamás desaparecería de un hombre, ellos mismo se matarían, fruto de su codicia y egoísmo.

Pasaron siglos, los hombres morían por miles, solo los de sangre descendiente de los antiguos guerreros sobrevivían a el genocidio.
Entonces llego el momento de su recompensa, pero los dioses lo miraron con desprecio... Algo que ellos le ordenaron que hiciera, pero ahora ellos estaban arrepentidos, habían visto sufrir a los hombres durante siglos, se dieron cuenta que esa maldición era irremediable.

Lo castigaron aun más y dejaron que fuera inmortal para siempre, mandaron a dioses tras el para torturarlo... Quizá el hacerlo inmortal fue la peor decisión que pudieron haber hecho.
El había estado perfeccionando todas sus habilidades al máximo durante todo ese tiempo, incluida una habilidad prohibida. Una habilidad capaz de matar a los dioses.

Los dioses se pueden matar entre sí, y también  pueden matar a todos los que estén por debajo de ellos, pero esa regla no aplicó para este hechicero.
La inmortalidad de todos los dioses del cielo le fue concedida y durante milenios fue condenado a interminables batallas contra dioses supremos, no lo debilitaron en ningún momento fue incluso peor.
Se hizo tan poderoso que pelear contra los dioses ya no era suficiente.

Pero paso algo que el no se esperaba...
Tras milenios de perfección los dioses crearon ocho habilidades absolutas y se las dieron a los dioses más poderosos de su cielo.
Pero no fue suficiente una vez más, la fuerza del ahora llamado "oscuro" era demasiada para unos poderes que apenas habían sido creados.
Solo lograron separar al oscuro en siete partes.

Esas partes representan los siete poderes absolutos de el... Y para evitar que el volviera esos siete fragmentos fueron enviadas a el dimensiva carcerem la prisión a través de las dimensiones por las que se mueve el mundo. 39 dimensiones hechas una gran prisión para evitar que el escapara.

Solo sirvió durante mil años.
El logro escapar y juntar sus siete fragmentos. Pero esta vez llego acompañado de un horror más.
Sombras más evolucionadas y fuertes que las originales.
Aun así el fue derrotado por los ocho poderes absolutos y de nuevo fue partidos en siete fragmentos. Y así se quedará, los poderes crecen igual, y los de ese guerrero están más avanzados que cualquier otro...

Hasta ahora el oscuro ha vuelto 38 veces al mundo y esas 38 veces a vuelto a la prisión.
Se ha detectado un patrón significativo cada vez que vuelve... Y parece que esta será la ocasión en la que nos toque defender la prisión. Nosotros los descendientes de las 50 primeras familias de magos y de las 10 últimas que existen... Es nuestro deber defender el  dimensiva carcerem en esta 39° vez que el vuelva, y nuestro prioridad es encontrar a esos ocho elegidos - No me queda de otra más que creer en esa historia que me acaba de contar Sedrick.

  —¿Cómo es qué sabes todo esa historia si se supone que no existen registros de esa civilización? —pregunto confundida y él pone una expresión de asombro.

   —Parece que pusiste atención —dice y enseguida saca un libro muy grande y grueso—. Todo está escrito en éste libro... Pero está incompleto. En este no se nota, porque es una copia, pero en el original se ve que partieron el libro en dos mitades. Quizá la guerra lo destruyó. No se sabe —explica a medias.

Se mira algo frustrado... Me siento algo mareada. Tengo mucho sueño ¿qué es lo que me pasa?