ULQUIORRA EN EL UNIVERSO DE MARVEL

CAP 12. Cuatro Reyes.

// Lugar desconocido //
// Planeta desconocido //
Primer rey.

a pasado un mes desde que apareció en este extraño lugar, no planeta. Una idea que el Rey Quinci vio como solo un concepto de los humanos débiles de mente débil, la cuales creian en cosas que no existían. Mas esa ideología fue tirada directo al bote de basura y luego incinerado, cuando al recorrer todo el planeta, se topo con aquellas presencias extrañas, donde para su sorpresa todas eran criaturas que no eran hollow o alguna criatura que hayan visto antes. Aunque por lo que logro comprender de estos seres, era que su comportamiento era similar a la de los cavernícolas aunque menos violentos, dando así a una especie primitiva. Durante este mes se topo con algunas sorpresas, como que su cuerpo había rejuvenecido pareciendo un joven de 17 años, aunque podía cambiar su apariencia a su estado mayor pero al hacer eso su poder aumentara y poco a poco se desgastara, era algo así como una transformación aunque no le dio mucha importancia dejándolo como segundo plano. Otra cosa que lo sorprendió fue la falta de energía espiritual incluso lo escasa que se sentían, lo cual debería ser un gran problema si necesitaba recuperar su poder, mas aquí estaba la sorpresa. Su poder se reponía automáticamente usando el que su cuerpo emanaba, algo así como una auto retroalimentación constante como un bucle sus fin. Tal capacidad o habilidad no la poseía antes, aunque como todo lo demás lo dejó como algo sin importancia o poco relevante. Lo que ahora pensaba, era una manera de como regresar a la tierra al tener en claro que no estaba en la tierra, no teniendo ni la mas remota idea de como fue que termino allí. Posiblemente fue un salto a otra parte del universo, lo cual puede ser imposible pero con lo que vio durante este mes no sonaba tan descabellado. Ahora solo tenia un pensamiento, si hay otros planetas con vida como este, puede que en otros haya vida mucho mas desarrollada, lo que hacia pensar en querer gobernar no solo un mundo sino todo ellos hasta gobernar todo el universo. Un pensamiento que tras estar un un lugar tan tranquilo y pacífico lo llego a tener tales pensamientos, al Rey Quinci no era alguien que le gustase tal tranquilidad y prefería estar en un campo de batalla que un lugar tan absasperante e irritante como ese. Incluso el acabar con una de esas cosas seria como caer muy bajo, matar a un ser que a sus ojos no es mas que un insecto vil y rastrero seria muy bajo para alguien como el, un Rey. Por el momento lo único bueno de ese lugar era la vista, aunque luego se vuelve aburrido y quiere salir cuanto antes de aquel planeta, y baya que su deseo se cumplió en ese preciso instante. Mientras miraba el cielo, vio como un extraño objeto volador descendía y en lugar de asombrarse simplemente sonrió. Ese era su boleto de salida de aquel horrible lugar, así que usando su velocidad similar al sonido de un arrancard o el paso flash de un shinigami, uso su paso dinivo del cielo. Un nombre algo largo, pero no es quien para refutar cuando es un nombre adecuado, siguió a la nave de cerca impresionado por la velocidad de la nave, donde los vio detenerse cerca de un gran grupo de aquellos criaturas, viendo como eliminaban algunas y a otras las encerraban en jaulas. Cansado se ver esto, dejo su postura de loto y se dejo caer, donde su aterrizaje fue bastante fuerte causando un leve temblor por el impacto, rápidamente la atención se centro en el, y los vio hablar entre ellos en un idioma extraño. Pudo verlos mejor, parecían alguna clase de bestias con armadura y extrañas armas, aunque ignoro como lucían al recordar que estos eran alienígenas. Estas palabras fueron extrañas en su cabeza, después de todo nunca pensó que diría o pensaría tales palabras en su larga vida.  Extendiendo su mano derecha a un lado, rápidamente materializo una enorme espada azul de energía la cual ilumino el lugar tenuemente oscuro por la sombra de la nave. 

Yhwacht-. Gracias por mi transporte...

Agito su espada acabando con decenas de ellos, donde aprovechando el aturdimiento de estos hizo una masacre dejando solo a uno, el cual parecía ser el líder el cual sostenía por la cabeza mientras absorbía sus recuerdos al inyectarle de su poder a este, donde al finalizar dejo caer el cuerpo carbonizado al suelo y subirse a su nueva nave con el conocimiento de como pilotear entre otras cosas. Entro a la nave desapareciendo su espada y colocando sus manos en sus bolsillos, donde al llegar a la cabina del piloto inmediatamente puso en marcha la nave y la hizo elevarse casa vez mas hasta dejar el planeta. Una ves afuera voló hacia el frente, pensando en cual seria su siguiente plan de acción. Ir a la tierra seria un desperdicio de tiempo, su ejército arraso con todo, y solo iría cuando seria el único ser vivo allí. En su lugar iría a un planeta con vida inteligente, y como no reclutar gente para formar su ejército y quien sabe reformar a su elite de Quinci. Con eso ya en mente activo la hiper velocidad dejando el planeta en un instante perdiéndose en la oscuridad del espacio.